Había mucha expectación por este partido tras la victoria del pasado miércoles de 4-1 ante el Oviedo Vetusta. El encuentro era crucial para las aspiraciones numantinas de meterse entre los tres primeros puestos, ya que tras el empate en los últimos instantes del Lealtad ante el Valladolid Promesas los "rojillos" dependían de ellos mismos.
El técnico soriano salió con Ximo Miralles en portería, Sillero y Borja López de centrales y con San Emeterio y Aguirre ocupando los laterales. Línea de tres en el centro del campo para Manzanara, Andrés y Cotán. El tridente de ataque fue Menudo, el canterano Moha y el "tiburón" Gabarre.
Buena primera mitad soriana
El partido comenzó con un Numancia muy intenso que en todo momento buscó portería contraria. En el minuto 7, Moha, que fue el jugador más eléctrico del partido, realizó un centrochut que rechazó con mucha solvencia el ex portero de River Plate. Durante los primeros compases de encuentro el Numancia lo intentó sobre todo por el lado derecho, mediante centros del lateral Borja San Emeterio.
En el 18', Aguirre puso un fantástico centro desde el lateral izquierdo a la cabeza de Gabarre, pero el "tiburón" no estuvo del todo acertado en su remate, el cual fue bastante forzado. Minutos más tarde Ximo Miralles tuvo que hacer gala de sus magníficos reflejos para solventar el problema en un remate muy escorado por parte de Juanma.
El partido se fue al descanso muy trabado por faltas y por cartulinas amarillas por parte de ambos conjuntos.
La suerte no sonrió al Numancia
El Numancia no quería el empate y buscó la victoria a toda costa. A los pocos minutos del comienzo dela segunda parte, Menudo metió miedo en el cuerpo a los burgaleses con un disparo que Barovero detuvo fácilmente en dos tiempo. En el 59' de encuentro, Andrés puso un córner que acabó en los pies del 10, pero su volea no encontró puerta.
El Numancia poco a poco se iba acercando más a la portería, sin embargo, los centros laterales no encontraron destinatario, excepto en el minuto 78. Gabarre tuvo en sus pies la oportunidad más clara numantina para poder adelantarse en el marcador, pero inexplicablemente y con una parada antológica que quedará en el recuerdo de todos los aficionados, Barovero sacó el balón de la misma línea de gol. Ningún jugador se lo podía creer, y menos Gabarre, que se echó las manos en la cara sabiendo que no está teniendo nada de suerte de cara a portería esta temporada.
En los últimos minutos el Burgos apretó un poco más, y fue cuando llego el único y definitivo tanto del encuentro. En el 86', un córner botado desde la derecha encontró la cabeza del exnumantino Elgezabal, el cual introdujo el balón hasta el fondo de las mallas.
El partido murió en ese mismo instante, con un resultado de 0-1 para los líderes del subgrupo b del grupo 1. La próxima jornada el Numancia se medirá en Asturias contra el Langreo, en un partido que definirá el rumbo del futuro numantino.