Otro año se acerca a su final, al ocaso y, con este, ya son cuatro los años que el Eibar lleva consecutivos en la máxima categoría del fútbol español, la Primera División. Ha habido momentos buenos, momentos malos, momentos de ensueño y momentos de cierta frustración, pero el club ya lleva cuatro años aguantando con bastante éxito en LaLiga, y cada año que pasa, da la sensación que el club se hace más grande y se va haciendo un hueco entre los históricos de Primera.
En este Eibar, sin duda, no pasa nada desapercibido Takashi Inui, el jugador más exótico del conjunto armero y que, desde la banda, aporta muchísimo al Eibar gracias a su regate, buen pase y visión de juego. Pese a no producir grandes cifras goleadoras al equipo, Inui siempre tiene buena participación e influencia en el juego.
Este 2017 ha sido un año de altibajos para el equipo y, de estar muy cerca de puestos europeos, se arrancó la temporada 2017/18 en descenso, con lo que el cambio fue drástico. Sin embargo, el conjunto de Mendilibar acaba el año de forma magnífica, cerca de los puestos altos de la clasificación y con ese mal arranque en el olvido. Este, para Takashi Inui, ha sido un buen año, en el que ha gozado de la confianza de Mendilibar. Pese a eso, el japonés no puede quedarse de brazos cruzados y debe seguir progresando para lograr un 2018 aún mejor para él y para la SD Eibar.
Inui, ganándose la titularidad progresivamente
Por la Primera División han pasado unos cuantos jugadores de origen japonés, así que Inui no es el único. Sin embargo, todos estos japoneses que aterrizaban en LaLiga, apenas estaban uno o dos años sin acabar de cuajar, debido, quizás, al cambio que supone ir de un país a otro o por otras cuestiones. Takashi Inui, en cambio, está disputando su tercera temporada en España y parece que hay Inui para rato.
En la temporada 2016/17, el Eibar de José Luis Mendilibar realizó una temporada increíble, marcada por un final quizás un poco agridulce ya que el equipo tuvo la clasificación para competiciones europeas muy cerca. Eso sí, para un club tan humilde, llegar dónde se llegó tuvo un mérito increíble y poder acabar luchando por Europa en vez de por el descenso, en sí ya dice mucho de la gran temporada. En ese último tramo de temporada, es decir, a partir de 2017, todo el equipo estuvo entonado y Inui no fue una excepción. Bebé empezó alternando titularidad con él, pero poco a poco el japonés le fue ganando la partida y se fue haciendo el dueño de esa banda izquierda. Actualmente, el japonés es una pieza clave para Mendilibar que, incluso en un 5-3-2 dónde cuesta un poco más situarlo, el de Zaldívar le busca hueco.
Con Gaizka Garitano, el conjunto eibarrés tenía un ritmo de partido aún más alto y eso quizás perjudicaba un poco a Inui. Con la llegada de Mendilibar, hubo un acercamiento por parte del juego del Eibar al de Inui y viceversa. El equipo empezó a jugar con una marcha menos, con más pausa y más balón, cosa que va muy bien a un jugador como Inui, al cual le gusta tener el balón en los pies.
Un buen inicio de temporada para Inui
El conjunto de Mendilibar empezó la temporada muy mal, colocándose incluso en puestos de descenso y mostrando carencias defensivas y ofensivas. No obstante, pese al mal rendimiento del equipo en general, Takashi Inui era la excepción. El japonés muchas veces se ponía el equipo a la espalda y, mediante tener el balón, intentaba crear peligro. Sin embargo, Inui es un jugador que no tiene demasiado gol y necesita de un delantero en plena forma a su lado que aproveche sus asistencias.
Actualmente, el equipo se ha ido al parón navideño con 24 puntos en su haber y con Europa puesta entre ceja y ceja. Inui, solo, no podía girar esa situación, y al conjunto armero le ha venido como agua de mayo el regreso de Iván Alejo tras la lesión, y le ha dado aire fresco y más desborde para subir aún más arriba. El japonés atesora muchísima calidad y el balance del año 2017 ha sido espléndido para él. Sin embargo, aún tiene mucho margen de mejora y, pese a sus constantes detalles de calidad, para 2018 debe intentar ser un poco más determinante y aportar mucho más al equipo en lo que a goles y asistencias se refiere.
Pese a estar tan cerca de Europa, no hay que olvidar de dónde viene el Eibar y quién son. El Eibar es uno de los equipos con menos presupuesto de LaLiga y su objetivo debe seguir siendo la permanencia. Eso sí, una vez certificada la permanencia, puede haber licencia para soñar.
