David Gallego no pudo estar más acertado en sus declaraciones previas al partido entre Espanyol B y Levante Atlético. El entrenador catalán vaticinó un encuentro de corte defensivo y con pocas oportunidades para ambos equipos. El filial granota contruyó, solidificó y perfiló su efectivo muro defensivo de nueve hombres en dos líneas diferentes y cedió la pelota al Espanyol B, que intentó sin éxito encontrar la portería rival.

Marc Gual volvió a vestir la camiseta espanyolista tras su frustrada salida al Sevilla Atlético, que se cerrará en el mercado invernal, pero ni con la vuelta de la referencia blanquiazul el Espanyol B consiguió ver puerta. Y ya son dos partidos en los que el filial espanyolista no marca contra equipos que producen poco en ataque.

El Atlético Levante se encerró en su campo y esperó a que el Espanyol B cometiera errores. Pocos hubo, pues unos mantenían su espléndido posicionamente sobre el terreno de juego y otros hacían circular el balón sin presión. Óscar Melendo fue de los pocos jugadores blanquiazules que consiguieron mover las piezas del engranaje defensivo levantinista para generar espacios. Sin embargo, el Atlético Levante, leal a su fama, no se dejó intimidar por los largos ratos de posesión local.

Pese a la poca prodigación en ataque de los valencianos el Espanyol B estuvo a punto de ir por debajo en el marcador. Gallego es consciente, como ha demostrado siempre en rueda de prensa, que las pocas ocasiones que condecen sus jugadores penalizan mucho al equipo. Una vez más estuvo a punto de producirse la misma historia de siempre pero Andrés Prieto volvió a demostrar sus credenciales como portero al desbaratar una ocasión de Son. Rufo iba a tener una oportunidad clara para marcar pero no tuvo suerte.

Al final el partido acabó como empezó y ninguno de los dos equipos pudo hacer nada por llevarse los tres puntos.