La temporada 2016/17 fue el inicio de algo bonito en el Espanyol. La llegada de un nuevo presidente y propietario, el empresario chino Chen Yansheng, y con él, el dinero, hizo que se considerara en la primera piedra de los nuevos tiempos que se espera que se vivirán en la parroquia blanquiazul. 

Además, el nuevo presidente llegó con Quique Sánchez Flores debajo del brazo y con toda una serie de fichajes como Pablo Piatti, Leo Baptistao o Jurado que volvieron a hacer creer en aspiraciones europeas en la entidad catalana. Sin embargo, el proyecto no empezó como se esperaba, y el incio de Liga fue algo decepcionante. 

Los pericos en las diez primeras jornadas sumaron tan solo 11 puntos de 30 posibles y dejaron muy malas sensaciones y fragilidad en la defensa. En el primer partido los de Barcelona encajaron seis goles en el Ramón Sánchez Pizjuán ante el Sevilla -los de Sánchez Flores perdieron 6-4 en un partido loco- y no sumaron los primeros tres puntos hasta la quinta jornada de Liga cuando derrotaron al Osasuna en el Sadar (1-2). 

No obstante al mal inicio, los espanyolistas empezaron a carburar y terminaron la Liga siendo un equipo muy sólido atrás y haciendo disfrutar mucho a su afición. Terminaron ocupando una muy digna octava posición, quedándose a siete puntos de las posiciones europeas. Además, se superó por primera vez desde la temporada 2004/05 la barrera de los 50 puntos, al haber sumado un total de 56. 

El Espanyol, también, volvió a mostrarse fuerte en su feudo y no se dejó puntos ante los rivales de la zona baja de la tabla, como era habitual en temporadas anteriores. En todo caso, el problema los tuvo frente a los rivales que terminaron por encima. Los periquitos fueron capaces solo de derrotar a uno de los siete primeros clasificados: sumaron una victoria, cuatro empates y nueve derrotas.

Aún así, la mayor decepción que se vivió entre los periquitos fue la eliminación en Copa del Rey frente a un rival de Segunda División como el Alcorcón. Los catalanes se despidieron de forma prematura de la competición del KO en la tanda de penaltis y en casa, tras haber empatado tanto en la ida como en la vuelta de dieciseisavos a uno. 

Como en todo proyecto a medio-largo plazo, es necesario de un año de transición entre el pasado y el futuro. En el Espanyol consideran que la pasada temporada fue este año de transición y ahora se preparan para dar un último salto hacia algo todavía mejor... ¿Europa?