El partido comenzó con igualdad, un encuentro que se preveía diferente, con un Burgos hambriento de gol y un Gernika aguerrido que quería buscar la sorpresa en tierras burgalesas. Los primeros minutos fueron de mayor dominio del conjunto vasco, llegando en un par de ocasiones al área blanquinegra pero sin llegar a crear verdadero peligro. A pesar de este dominio fue el Burgos el primero en crear peligro en el minuto 17 cuando Abel Suárez lanzó una falta directa que atrapó Jon Altamira.
Demasiadas faltas y poco fútbol
A partir del minuto 20 de la primera mitad el partido empezó a decaer, se ensució el juego de ambos conjuntos, se dejó de crear peligro y las faltas seguidas dominaban un encuentro que se afeaba por momentos. La dureza del conjunto vasco y el adormilamiento del Burgos dieron con unos cuantos minutos de impas donde el ritmo no podía aumentar y la alegría de los primeros minutos decaía a niveles demasiado bajos.
Ya en el minuto 45, rozando el descanso, Abel Suárez metió un gran balón entre líneas al área para Carlos Álvarez que se plantó ante Jon Altamira pero su disparo raso lo consiguió atrapar el portero del conjunto vasco. Tras esta ocasión el árbitro señaló el túnel de vestuarios con un sabor amargo por parte de los dos equipos que parecían ir a la par en el ritmo de las varias mitades del encuentro.
Sobresaltos en la segunda mitad
El incio de la segunda parte fue una locura para un Burgos que no lograba despertar y este hecho lo intentó aprovechar el Gernika para crear peligro y poner con el corazón en un puño al graderío burgalés. En el minuto 48 Madrazo caracoleó en el área, logró disparar y el balón tocó en Julio Rico para posteriormente estrellarse en el larguero.
El Gernika continuaba teniendo más el balón mientras el Burgos andaba impreciso en todas sus líneas del campo y no podía poner en apuros a un Jon Altamira que vivía bastante tranquilo este inicio de segunda parte. En el minuto 56 Madrazo se volvió a internar en el área por banda, puso el centro que tocó Mikel Saizar para que Ayoze acabase despejando.
De aquí al tramo final se fue sucediendo el carrusel de cambios por parte de los dos equipos y hasta los minutos finales no se volvieron a vivir emociones fuertes en el feudo burgalés. En el minuto 87 Olaetxea cometió un gran error derribando en el centro del campo a David Martín y viendo cómo Leandro Carbajales le mostraba su segunda amarilla apenas 6 minutos después de ver la primera, dejando a su equipo con diez.
El Burgos apretó teniendo un jugador más en unos minutos finales en los que el Gernika cerró líneas atrás dando por bueno el punto que estaba consiguiendo en tierras burgalesas. Ya en el minuto 95 Javi Cantero puso el centro al segundo palo donde controló Blázquez y disparó perdiéndose el balón rozando el poste, perdiendo la última ocasión del encuentro. A pesar de la derrota, el Burgos continúa en la tercera plaza de la clasificación aunque viendo cómo el Mirandés le abre una brecha de 4 puntos mientras que el Gernika seguirá 13º con dos puntos por encima del descenso.
Madrazo |
2 pt. |
David Martín |
1 pt. |