Tristemente, un nuevo escándalo de corrupción ha salpicado al fútbol español. En esta ocasión, el caso afecta, aunque de manera indirecta, al Real Sporting de Gijón, al estar involucrado uno de los futbolistas que conforma la plantilla rojiblanca en la actualidad, Xavi Torres. Con motivo del conocido "Caso Osasuna", que investiga supuestos sobornos y amaños en el tramo final de la campaña 2013-2014, además de irregularidades en las cuentas del club rojillo, la Fiscalía solicita dos años de prisión y una multa de 1,9 millones de euros para los exjugadores del Real Betis Balompié Antonio Amaya , hoy día en el Rayo Vallecano, Jordi Figueras, del Karlsruher SC alemán, y el propio Xavi Torres.
Concretamente estos futbolistas han sido acusados por supuestos sobornos por parte de exmandatarios de Osasuna. Las cifras que se están barajando son de 650.000 euros en metálico, 400.000 por vencer al Valladolid y 250.000 por dejarse perder ante el conjunto navarro, lo que, sin duda, adulteraría la competición en esas últimas dos jornadas ligueras. De confirmarse estos hechos, estaríamos ante uno de los mayores escándalos extradeportivos de la historia de nuestro fútbol.
En el escrito de acusación emitido por el Ministerio Fiscal también se solicitan penas de más de 14 años de cárcel para Ángel Vizcay, exgerente de Osasuna, más de 12 para Miguel Archanco, expresidente pamplonica, y Txuma Peralta, exdirectivo de la entidad, así como 11 años y 11 meses para los también exdirectivos rojillos Juan Pascual, José Manuel Purroy y Sancho Bandrés.
Por este mismo proceso han sido investigados futbolistas de la talla de Patxi Puñal, Damià Abella, Sergio García y Jorge Molina, además del entrenador del actual colista de la Liga Santander, Petar Vasiljevic. Sin embargo, el Juzgado de Instrucción Número 2 de Pamplona acusó, al término de la investigación policial a mediados del mes pasado, únicamente a 18 de los 29 investigados en un principio.