Piastri llegó a la F1 tras dominar la Fórmula 3 y la Fórmula 2, ganando ambas categorías en su año de debut. Su paso a la máxima categoría no ha hecho más que confirmar su potencial. En su primera temporada, ya ha logrado dos podios, incluyendo un segundo puesto en el Gran Premio de Italia. Llegó para llenar el asiento vacío de Daniel Ricciardo, que en 2022 había decidido tomar un año de descanso.
Al nivel de Hamilton
Las comparaciones con Hamilton son inevitables. Ambos pilotos llegaron a la F1 con un gran cartel y no tardaron en demostrar su calidad. Hamilton, en su debut en 2007 con McLaren, consiguió nueve podios y una victoria, terminando en el segundo puesto del campeonato. Piastri, por su parte, ya lleva dos podios y está luchando por el quinto puesto en la clasificación general. Eso les situa a los dos como los rookies más destacables de la historia de la Fórmula 1.
Un futuro brillante
El futuro de Piastri se presenta brillante. Con McLaren, un equipo con un gran potencial, tiene la oportunidad de seguir creciendo y desarrollando su talento. No sería de extrañar que, en los próximos años, veamos a Piastri luchando por el campeonato del mundo. Este año pasado hemos visto un atisbo de lo que tiene preparado, y estas primeras carreras, con el coche poco preparado, ya nos hacemos una idea de lo que es capaz.
Claves del éxito de Piastri
Si hay algo que está claro que tiene, es talento natural, tiene un taleto innato para la conducción; su capacidad de control del coche y su precisión al volante son excepcionales. Además, cuenta con madurez tanto dentro como fuera de la pista a pesar de su juventud. Es capaz de tomar decisiones correctas bajo presión y mantener la calma en situaciones difíciles. Y eso en la competición es decisivo.
Si algo es necesario en este deporte y que hemos podido ver en casos como el de Ricciardo en el McLaren es la adaptabilidad, si no te adpatas rápidamente al coche, no consigues resultados. Pero él ha sido capaz de aprender de sus errores y mejorar su rendimiento carrera tras carrera. Además, es un piloto muy trabajador. Se dedica al máximo a su profesión y siempre busca mejorar.
Pero sobre todo, tiene una mentalidad ganadora. No se conforma con menos y siempre busca la victoria. Eso recuerda a la de Verstappen cuando era más jóven, y ya se ha visto lo lejos que ha llego y que va a llegar.
Oscar tiene contrato hasta 2026 con la escudería naranja, y tiene tiempo de sobra para demostrar lo lejos que puede llegar. Su debut ha sido estelar y tiene todo lo necesario para convertirse en una leyenda de este deporte. Solo el tiempo dirá si puede superar a Hamilton, pero lo que está claro es que el futuro de Piastri es brillante.