Nicolás Vallejo tiene 18 años, nació en Corzuela, provincia de Chaco, y debutó profesionalmente en Independiente el 24 de julio de este año ante Atlético Tucumán, con Claudio Graf como entrenador. Se desempeña como extremo por ambas bandas (últimamente más por izquierda) y desde su primer partido demostró tener una buena velocidad, capacidad para encarar y solidaridad para ayudar en el retroceso, aunque también dejó en claro que sigue en aprendizaje, al apurarse en algunas decisiones o jugar la individual, detalles que puede pulir con minutos de juego. En los encuentros anteriores, le tocó ingresar y sumar tiempo en cancha, pero su nombre resonó el pasado miércoles, en la eliminación por Copa Argentina. El jugador fue uno de los elegidos para patear en la tanda de penales, en la que el Rojo tenía la chance de igualar a Talleres, que había errado su reciente remate. Sin embargo, el juvenil abrió mucho el pie, y la pelota se fue al lado del palo izquierdo, con un arquero totalmente engañado. El Rey de Copas perdió, y el chaqueño fue amenazado por redes sociales por su fallo, al punto que subió en su cuenta de Instagram un comunicado pidiendo disculpas a la hinchada, en el que expresó su tristeza. Una situación similar vivió Ayrton Costa (defensor surgido en el club hoy con un buen presente a préstamo en Platense), tras ser expulsado por Copa Sudamericana frente a Ceará de Brasil, a los pocos minutos de cotejo.

Una frase muy conocida es "El fútbol siempre da revancha", y Vallejo lo comprobó hoy. Con la ausencia de Leandro Fernández, el jugador más desequilibrante desde la vuelta de Julio César Falcioni, este último (que lo está llevando de a poco) se decantó por él para reemplazarlo y debutar como titular con Arsenal. Y así, a los tres minutos del duelo con los del Viaducto, el chico aprovechó una asistencia de Damián Batallini y una cobertura de Leandro Benegas para correr hacia el arco rival, y estampar su bautismo de gol en Primera, así como la victoria de los comandados por el Emperador. No conforme con eso, generó una chance que no fue concretada por el Tanque y corrió hasta ser sustituido (estando acalambrado) para hacer el ida y vuelta y apoyar a Alex Vigo y Edgar Elizalde, al nivel de ganarse la amarilla por acumulación de faltas, bastante lejanas de la ubicación del arquero Alejandro Medina.

Más allá de su rendimiento, en el que claramente deberá seguir trabajando, la cuestión mental es el punto principal en este apartado: hoy Nicolás Vallejo le dio los tres puntos a Independiente, a cuatro días de ser tildado como culpable de una eliminación. El director técnico, acusado de obligarlo a patear ese penal, lo reivindicó y le dio confianza, algo que el extremo no desaprovechó. Un caso con mayor dimensión, fue el de Martín Benítez. El misionero, hasta ese momento nacido y con toda su carrera en el Rojo, falló desde los 12 pasos en la definición de la Recopa Sudamericana contra Gremio de Brasil, instancia a la que los dirigidos por Ariel Holan llegaron después de aguantar casi 90 minutos con uno menos. Pese a los insultos recibidos, y la desazón del propio atacante, en el encuentro siguiente, ante Banfield por el torneo local, convirtió el tanto que permitió vencer al Taladro, recibiendo aplausos y apoyo de todo el LDA. Justamente, los cánticos en este estadio suelen pedir por la inclusión de los pibes, pero más que pedirlos, hay que bancarlos para que puedan desarrollarse y darle más que solo ganas a un club con unas inferiores más que talentosas.