En Brasil, el país más 'futbolero' se encendieron las alarmas en torno al estado de los campos de juego, el Arena do Gremio, el mítico Maracaná, Arena Fonte Nova, entre otros despiertan preocupación por los estados de los campos de juego, el balón no rueda correctamente, dista mucho de lo que el público está acostumbrado en la máxima justa continental, mucha arena, muy pesados y con algunas imperfecciones.

La cinco veces campeona mundial reemplazará a Perú como anfitriona del Mundial FIFA sub- 17 que se desarrollará del 26 de octubre al 17 de noviembre, eso será un debate aparte. Tras la Copa del Mundo 2014 y los Juegos Olímpicos de Río 2016 la gran mayoría pensamos que la  Copa América tendría mejor acogida, pues nos equivocamos, el público brasileño no ha respondido a la demanda, tampoco se preocuparon por hacer un mantenimiento idóneo. 

El campo de juego estuvo pesado durante Uruguay 2-2 Japón | Foto: Getty Images
El campo de juego estuvo pesado de Arena de Gremio  | Foto: Getty Images

El máximo ente sudamericano debería preocuparse por no repetir los mismos errores el próximo año. La Confederación Brasileña es responsable directa de las desprolijidades que se vieron las primeras dos jornadas.  La justa continental es el torneo más longevo del fútbol mundial y merece que se le respete de acuerdo a la envergadura.

Sin ánimos de generar controversias, la CONMEBOL necesita seguir puliendo detalles tal vez sea el momento de evaluar otras propuestas, solo tenemos diez selecciones y necesitamos invitados para completar el formato. Aunque sería ideal una copa continental.  Europa no tiene invitadas en su competición, tampoco África, Asia, Oceanía y Norteamérica.

Sudamérica es un continente 'futbolero' que anhela volver a surgir, el próximo año será la primera vez que se organizará en dos sedes, aunque faltan definir detalles como el formato disputa.  Todas las partes involucradas deberán escatimar esfuerzos a largo plazo, mientras disfrutemos al máximo de los momentos decisivos del último curso de la década.