El fútbol moderno ha visto como con el paso de los años se ha ido sometiendo a nuevos cambios, buscando varias direcciones en las que poder moverse hasta encontrar la adecuada. En estas últimas temporadas, hemos visto como el juego colectivo se ha impuesto como el dominador de los grandes torneos internacionales, como es el caso de la Selección Francesa, alzándose como campeona del mundo, del Liverpool, logrando la última Champions en el Metropolitano, o la inverosímil temporada que nos regaló el Leicester City conquistando la Premier League en 2016.

El talento sigue destacando y siendo un factor relevante, pero ahora, un ejército bien armado prevalece sobre un sobresaliente soldado. La táctica se ha posicionado como el eje sobre el que gira el devenir de los encuentros, aunque continúan existiendo genios que se encargan de determinar ellos mismos el resultado. Siempre habrá excepciones, pero actualmente, un buen plantel compuesto por una plantilla competitiva, equilibrada y bien trabajada tácticamente se antepone al talento.

Es por ello por lo que los equipos buscan constantemente estar a la vanguardia, haciéndose con los jugadores más preciados del panorama futbolístico ante el gran derroche físico que se exige en estos días. Sin embargo, en los últimos tiempos, el mercado ha sido absorbido por una burbuja que ha crecido de forma ininterrumpida. Las grandes cantidades de dinero que se mueven en las ventanas de fichajes han obligado a varios equipos a buscar otras nuevas vías en la búsqueda del nuevo genio de este deporte.

Un ejemplo es el del Real Madrid, que ante los millones que Manchester City y Paris Saint Germain están dispuestos a desembolsar, ha orientado su política de traspasos hacia una dirección: centrarse en prematuras promesas, evitando introducirse en subastas con jeques con los que no desean competir. Esa política implantada en el club blanco le ha colocado como el tercer equipo europeo que incorpora a futbolistas más jóvenes a sus filas, con una media de edad estipulada en los 23,54 años, siendo superado únicamente por Bayer Leverkusen y Borussia Dortmund.

El conjunto merengue apuesta por que la mayoría de sus incorporaciones no sobrepase los 21 años, como es el caso de Vinicius Jr, Reinier, Rodrygo, Kubo, o anteriormente Isco, Asensio o Brahim. Mientras que el Real Madrid se ha alejado de esa lucha por los jóvenes europeos, el Manchester City se ha erigido como el equipo que más apuesta por el joven talento del viejo continente. Con las arcas a rebosar, el club no duda en entrar en la puja que considere necesaria para edificar un equipo lo más rejuvenecido y competitivo posible.

Desde la temporada 2015/2016, en el seno de la entidad eran conscientes de que el plantel que se alzó con dos Premier League a las órdenes de, primero Mancini, y después Pellegrini, pedía a gritos un relevo generacional. En la última temporada del técnico chileno, el club se lanzó a por las dos grandes promesas europeas del momento, Raheem Sterling (20) y Kevin De Bruyne (24).

Ambos serían los primeros bloques del nuevo proyecto que se ideaba en Manchester, al que se unió la temporada siguiente Pep Guardiola. El de Sampedor se encontró con un equipo con ansias de renovación, reforzándose de nuevo con jóvenes jugadores como John Stones (22), Ikay Gündogan (26), Leroy Sané (20) y Gabriel Jesús (19). No obstante, la primera temporada no logró alcanzar las expectativas puestas en un bloque que se mostraba cada vez más rejuvenecido, aunque la defensa se perpetraba como la gran pesadilla de los citizens. Desde la secretaría técnica se centraron esfuerzos, y de la mano de Guardiola, el club recibió a Ederson (24), Laporte (23), Benjamin Mendy (23), Kyle Walker (27), Danilo (26) y Bernardo Silva (23).

Además, se subió al primer equipo a dos jóvenes del filial que venían derrumbando la puerta: Phil Foden (17) y Brahim Díaz (18). Sin embargo, el overbooking del centro del campo, unido al súper equipo construido por el entrenador catalán, impidió a ambos canteranos disfrutar de la suficiente cantidad de minutos con los que poder deslumbrar a la hinchada skyblue. Los resultados comenzaron a llegar y el equipo se alzó con una histórica Premier League y con la Capital One. El club entendió que ya había conformado la columna vertebral de su nuevo proyecto al gusto de su adorado técnico, por lo que sólo quedaba pulir algunos puestos. Para ello, llegaron Mahrez (27) primero, revalidando el título de Premier y monopolizando los cuatro títulos ingleses, y esta temporada Rodri Hernández (23), Cancelo (25) y Angeliño (23).

David Silva durane un partido esta temporada / FOTO: Premier League
David Silva durane un partido esta temporada / FOTO: Premier League

El gigantesco presupuesto del conjunto inglés les ha permitido moldear una plantilla que le viene a Pep como anillo al dedo. El equipo en 5 años se ha visto envuelto en un radical cambio generacional con el fin de alzarse de una vez por todas con el reinado continental por primera vez en su historia. De Hart a Ederson en la puerta, de Sagna o Zabaleta en la derecha a Cancelo y Walker, pasando por una zaga que ha pasado de conformarse por Kompany y Demichelis a Stones y Laporte, mientras que en el flanco izquierdo Clichy y Kolarov se han visto reemplazados por Mendy.

En el mediocentro perviven figuras como Fernandinho, que se resiste a dejar su puesto, junto a un David Silva que se ve opacado por Kevin De Bruyne o Gündogan. Toure Yayá pivoteó al equipo durante años, pero ahora Rodri se ha postulado como su reemplazo. Mientras que en el flanco de ataque tenemos a un histórico de los de Manchester, porque desde su llegada en 2011, el Kun Agüero se ha ido ganando un puesto en el once que Gabriel Jesús no ha arrebatado hasta el momento. Los costados de ataque se han visto supeditados a muchísimos cambios. Lejos quedaron Jesús Navas o Nasri, y ahora Sané, Sterling, Mahrez y Bernardo Silva disputan dos preciadas posiciones.

De este modo, los fichajes de los de Manchester presentan una edad media de 25,73 años, un par de años mayor que la del Real Madrid. Así, podemos vislumbrar cuál es la política de fichajes de cada uno de estos dos conjuntos que se van a ver las caras el próximo miércoles en el Estadio Santiago Bernabéu en la ida de Octavos de Final de la UEFA Champions League. Si nos atrevemos a hacer un juicio de valor, el Real espera formar él mismo los jugadores, impregnarles el sentimiento blanco antes o recién cumplida la veintena, optando por recoger la semilla de la juventud. En el otro lado de la moneda, los citizens, aunque están apostando por formar a su cantera, se decantan por observar los primeros pasos de los jugadores hasta que den sus primeros pasos en la élite, declinándose por aferrarse a una juventud desarrollada.

Vinicius Jr y Rodrygo celebran un gol logrado en Champions / FOTO: Champions League
Vinicius Jr y Rodrygo celebran un gol logrado en Champions / FOTO: Champions League

l Madrid más valiente, temerario y con más fe. El City conservador y precavido, pero más impetuoso. Al fin y al cabo, son dos estilos, dos formas de entender el fútbol que han funcionado de una forma u otra. O bien a base de ligas, o a base de Champions. No obstante, los futbolistas de Guardiola han dotado de un mayor protagonismo que algunos de los pequeños de Chamartín, a pesar de que una joven estrella se cambiara de bando.

El Caso Brahim

Brahím Díaz (20) es el jugador que hizo el trasvase en el invierno de 2019 desde el Manchester City al Real Madrid. El futbolista español ascendió desde las categorías inferiores de los británicos hasta el primer equipo. Sin embargo, la frustración se apoderó de un joven que buscaba comerse el mundo. Con el contrato a punto de vencer en el mercado estival. Brahím se lanzó en busca de pretendientes, hasta que encontró al Real Madrid, del que no dudó en ir a sus brazos. El traspaso se materializó en el mercado invernal, desembolsando el club blanco 17 millones de euros por hacerse con sus servicios. Con esperanzas de revertir su situación, el futbolista ha terminado encontrándose en las mismas cárabas por las que salió del Manchester City, la falta de minutos. Tras arrancar su etapa en el club blanco con fuerza, su luz se fue diluyendo hasta esta temporada casi desaparecer, llegando a estar cerca de salir cedido en la pasada ventana de traspasos.

Brahím durante un partido esta temporada / FOTO: La Liga
Brahím durante un partido esta temporada / FOTO: La Liga

No ha tenido suerte el malagueño, que continúa soñando con triunfar algún día en el Real Madrid, pero quién sabe si el destino le deparará en un futuro otro equipo en el que encuentre su sitio, porque calidad, desparpajo y dominio de balón son incuestionables.

El devenir del fútbol

En definitiva, dos estilos, dos modelos, dos equipos tan distintos se cruzarán este miércoles en el primer asalto de un combate que se antoja apasionante. Los jóvenes pueden marcar el devenir del encuentro, pero no sólo el miércoles, sino que el del futuro del fútbol, porque cada vez está más cerca que los viejos genios del balompié nos dejen con el transcurso de las primaveras. Su magia ostentan recibirla las nuevas estrellas del firmamento futbolístico que ansían el trono, pero tras el reinado sin paliativos de Messi y Cristiano, se anhela complicado que algún jugador ose dar un paso al frente y anticiparse al resto. El devenir del fútbol está en sus botas, y noches como las de Champions pueden encumbrarles hasta la cima. Sterling, Vinicius, Rodrygo, Fede Valverde, Rodri, Foden, Gabriel Jesús… ¿Dará alguno un paso al frente y liderará a los suyos? El miércoles a las 21:00 horas en el Santiago Bernabéu la respuesta.