La Ponferradina comenzaría el año 2014 jugando fuera de casa ante un rival directo en la lucha por la permanencia un año más en la categoría de plata del fútbol español, el Girona. La Deportiva iba a sacar un valioso empate 1-1 en tierras catalanas en los últimos compases de partido gracias a un gol de Alberto Aguilar. Una semana más tarde recibían en El Toralín a la UD Las Palmas que se encontraba en puestos de play off de ascenso a la Liga BBVA. Se preveía un partido difícil ante un equipo que venía muy fuerte y con ganas de puntuar, pero se encontró con una Ponferradina sólida en defensa y que consiguió un merecido empate 0-0 ante uno de los rivales más prestigiosos de esta Liga Adelante.
La salvación, un sueño hecho realidad
La siguiente jornada los blanquiazules recibían a un Córdoba que era una de las grandes revelaciones de la temporada. El conjunto local perdió 0-1 ante el Córdoba, que venía "on fire" para colocarse en puestos de playoffs. Una semana más tarde la Ponferradina viajaba a Sabadell, para enfrentarse a otro de sus rivales directos. Los blanquiazules consiguieron empatar 1-1, dejando claro que en los partidos contra rivales directos, puntuar fuera de casa es básico.
El mes de febrero fue un mes de irregularidades. La primera mitad del segundo mes del año 2014 fue de alegrías. La Ponferradina venció por 2-0 al Real Murcia y empató 1-1 en el Molinón ante el Sporting de Gijón, sin duda dos buenos resultados de cara a la Liga Adelante. Pero lo que fueron alegrías en este comienzo de mes acabó en tragedia, y es que el equipo entró en una mala racha en cuanto a resultados se refiere. Perdió ante el Alcorcón en casa y ante el colista, el Hércules por 1-0.
Obligados a mejorar su juego, la Ponferradina afrontaba marzo con duros compromisos que sin duda iba a marcar cuales eran los objetivos de cara a final de temporada. El equipo blanquiazul consiguió una victoria, dos empates y dos derrotas (una de ellas 5-0 ante el Tenerife, en un partido para olvidar por parte de la Deportiva).
Reconstrucción de la plantilla
El primero en llegar fue el nuevo míster que comandaría el conjunto berciano, y para ello se confió en José Manuel Díaz, entrenador la temporada pasada del Real Madrid Castilla tras la destitución de Toril y un entrenador curtido en la cantera blanca durante muchos años. El nuevo míster llegaba a Ponferrada en su primera experiencia como entrenador fuera del Madrid, pero con muchas ganas de agradar y centrando sus esfuerzos en que el equipo basara su juego en el balón. Poco a poco empezarían a llegar los refuerzos, empezando por la portería donde tras la marcha de Santamaría urgía un portero de garantías. Diego García volvía tras su cesión al Elche ilicitano y junto a Dinu Moldovan, se traía a Francisco Prieto del CD Mirandés.
La parcela defensiva por su parte mantenía gran parte de los pilares de años anteriores, contando con Aguilar, Alan Baró y Carpio como principales baluartes, y con Oscar Ramírez y Julen Castañeda. A estos se le añadieron el francés procedente del Alcorcón Samuel Camille, y el chileno Lucas Domínguez del Colo Colo chileno. El medio del campo por su parte continuaban José Rueda y el eterno “capitán” Jonathan Ruíz que cumple su séptima temporada en el club y tras la marcha de Juande a la Serie B italiana se contrataba a Andy Rodríguez, procedente del Levante B y formado en las categorías inferiores del Real Madrid, y Mario Paglialunga procedente del Zaragoza. En bandas se mantenían jugadores como Acorán y Cristían. Por su parte se ficharían a Alberto Chamorro “Tete” procedente del Real Murcia y la vuelta tras su cesión en la Cultural Leonesa, del canterano y berciano, Adán Gurdiel.
En ataque la Deportiva mantendría a dos de sus pilares, como Berrocal que tras su gran final de liga renovaba con el club berciano y el artillero y capitán, Yuri de Souza. Por su parte vendrían a reforzar el ataque dos jugadores de gran nivel como, como fichaje estrella llegaba Pablo Infante, el conocido ex jugador del Mirandés que llevo a semifinales de Copa y a 2º al conjunto mirandesista, y Rubén Sobrino, delantero del Castilla y a las ordenes del nuevo míster la temporada pasada y en años anteriores. Tras estos fichajes la Deportiva estaba lista para arrancar una nueva temporada en segunda, su tercera consecutiva y la quinta en toda su historia.
Inicio perfecto
Tras una gran pretemporada jugando como suele ser habitual con equipos bercianos de categorías inferiores y algún partido contra rivales de entidad, como Sporting de Gijón, Sporting de Lisboa y Deportivo de la Coruña la Deportiva comenzaba la liga en casa frente al Tenerife donde debutarían jugadores como Pablo Infante, y precisamente sería este jugador el encargado de anotar el primer gol de la temporada y que serviría para dar la victoria frente al Tenerife tras un espectacular gol olímpico (1-0).
La primera salida de la temporada sería a Gijón donde tras mantener el empate inicial y cuando más se volcaban los blanquiazules un fallo defensivo y un error arbitral suponían la primera derrota de la temporada, a pesar del gol de Carpio (2-1). La tercera jornada coincidía con las fiestas de la Encina en la capital berciana y la Ponferradina recibiría al rival más potente de la categoría, el Real Betis. En un partido para la historia y para el recuerdo del conjunto berciano y sus aficionados, la Deportiva destrozo, humillo y goleo a un Real Betis (4-1), que se fue del Toralín goleado tras una segunda mitad primorosa donde se rozó la perfección, y en la que los blanquiazules consiguieron marcar cuatro goles en menos de 30 minutos, tres de ellos de Yuri que realizo uno de sus mejores partidos desde que llego a Ponferrada. El gol de Acoran y bajo la dirección sublime de Pablo Infante llevaron a los bercianos a una victoria épica que pudo ser mayor.
Esa semana la Ponfe jugo la 2º ronda de Copa del Rey en Huelva, donde a pesar de ser superiores a su rival, fue el Recreativo el que se llevo el gato al agua venciendo y consiguiendo el pase a la 3º ronda del torneo del K.O (2-1). En la cuarta jornada tocaba la siempre complicada visita a Soria, en el derbi regional frente al Numancia, sin embargo, esta vez la Ponferradina demostró que su gran inicio no era cosa del azar y venció con solvencia, (1-3) a un Numancia que se vio superado durante la mayor parte del encuentro por una deportiva mejor.
Octubre irregular
Con motivo del Mundial de Ciclismo en Ponferrada en la jornada cinco, la Ponfe tenía que jugar fuera y el rival fue un Sabadell que se llevo una victoria injusta por los meritos hechos por uno y otro, donde la falta de pegada, la falta de fortuna y la expulsión de Yuri condicionaron a los blanquiazules que sufrían la segunda derrota de la temporada (1-0). En la vuelta al Toralín, en la jornada seis, la deportiva recibía al Albacete y de nuevo conseguía una victoria como local, tras un espectacular gol de falta directa de Pablo Infante, (1-0), por la escuadra que dejaba los tres puntos en casa.
En su siguiente salida, en la jornada siete, esta vez a Girona, la Ponfe volvía a sufrir una nueva derrota, esta vez dolorosa tras caer goleada (3-0). A pesar de las claras oportunidades por parte de Infante y que el Girona se quedará en inferioridad, los bercianos no supieron aprovechar la superioridad y el Girona remato el encuentro, venciendo de manera justa y contundente. La Ponfe alternaba una imbatibilidad y una solvencia en casa abrumadora, mientras como visitante mostraba una debilidad defensiva preocupante, además de una falta de gol, algo que en casa sobraba.
En la jornada ocho de nuevo en casa tocaba derbi regional contra el Mirandés y de nuevo los blanquiazules conseguían la victoria, la cuarta consecutiva en cuatro partidos como locales, (1-0), tras una espectacular jugada de Infante que remataba en línea de gol Berrocal. Eso si la victoria no estuvo exenta de polémica, ya que el gol venía precedido de un centro de Infante que no debió valer, ya que el balón se encontraba fuera del terreno de juego en el momento del centro, a pesar de eso, los tres puntos se quedaban en casa y la Deportiva continuaba exultante como local.
El mes de los empates
En la jornada nueve, de nuevo un derbi regional, pero esta vez como visitante y frente al Valladolid. En esta ocasión los blanquiazules consiguieron romper la mala racha a domicilio y rascaron un importante punto (0-0) que suponía un impulso importante para los de Manolo. En la décima jornada la Ponfe recibía a uno de los máximos favoritos al ascenso, la UD Las Palmas, que sería el primer rival en llevarse puntos del fortín del Toralín (2-2). A pesar de los goles de Acorán y Andy, los grancanarios con sendos golazos de Araujo y Nauzet Alemán y una discutible actuación arbitral privaron a los blanquiazules de una nueva victoria como local. En la siguiente jornada, tocaba visitar al Leganés, otro de los equipos invictos como local, y tras sendos penaltis para cada equipo, el gol berciano transformado por Infante por la baja de Yuri, el partido finalizaba con empate (1-1).
En la duodécima jornada la Deportiva iba a sumar un nuevo empate, el cuarto consecutivo, y segundo consecutivo como local tras empatar esta vez (3-3) en un partido loco frente al Recreativo en el que pudo salir goleado al principio pero tras una gran reacción dio la vuelta al marcador gracias a los goles de Lucas y Castañeda. Poco después sería expulsado Yuri y los onubenses empatarían. Cuando parecía que acabaría con empate a dos, un golazo de Andy daba la ventaja a la Ponfe, pero en el 93 un fallo defensivo en una falta permitía al Recre salvar un punto.
En la jornada trece la Deportiva, visitaba a un rival y un campo de esos que dan lustre a una categoría y a las victorias. La Ponfe conseguía vencer después de cuatro empates, nada menos que al Osasuna y en el Sadar (0-1), tras un espectacular golazo de Sobrino que daría los tres puntos de manera justa a unos bercianos que fueron superiores en el terreno de juego.
En su vuelta a casa, Ponfe y Barcelona B iban a ofrecer un espectáculo de goles al público presente en el Toralín,(4-4) empate en un partido loco en el que se adelantaron pronto los blanquiazules gracias a un gol de Aguilar, pero que en la primera mitad, remontarían los blaugranas haciendo tres goles en media hora. En la segunda parte se mantuvo el resultado igual, hasta que entre el minuto 72 y el 79 se desató la locura. Cuatro goles en siete minutos, tres de ellos de la deportiva, que recortaba distancias gracias al gol de Acorán, pero que veía como en el 76 Ramírez hacía el 2-4 en propia puerta, poniendo casi imposible puntuar. Cuando parecía que vendría la primera derrota como local, Yuri que había salido poco antes, necesitó tan solo dos minutos, del 77 al 79 para poner patas arriba el coliseo berciano con sendos goles que colocaban el empate en el luminoso. Incluso el propio Yuri consiguió marcar un gol más que fue anulado por fuera de juego, y dispuso en la última jugada del encuentro un mano a mano que pudo suponer la remontada pero que el portero culé evitó.
Un final de año con sonrisas
En la jornada 15 la Ponferradina visitaba la Romareda frente a un Zaragoza que estrenaba técnico, y peor no pudo irle a los bercianos, que salieron goleados (4-1) en una primera parte para olvidar, pero que en la segunda parte pudieron arreglar, sin embargo tan solo Yuri consiguió maquillar el resultado. En la jornada 16 la visita del Alavés al Toralín suponía una nueva victoria (2-1), que se consiguió en el último tramo del encuentro, después de dos maravillosas acciones de Infante, que dejaron a Yuri solo para hacer los dos goles y dar la victoria final a los bercianos.
En la jornada 17 la Ponfe visitaba al colista Llagostera con la ilusión puesta en volver a ganar como visitante, pero más lejos de la realidad, los blanquiazules cuajaron el peor partido de la temporada y cayeron con autoridad (3-1). Tras la expulsión de Aguilar y el penalti transformado por los gerundenses, la Deportiva desapareció del campo y tan solo el gol de penalti de Acorán dio esperanza a una Ponfe desconocida que perdió con todo merecimiento ante un rival desquiciado que vio la luz.
Para finalizar este año la Ponfe recibía en la jornada 18 a un Mallorca en horas bajas que confirmo sus presagios. La Deportiva lavo la mala imagen de Llagostera y realizo un gran partido, en el que pudo golear a su rival, pero que sirvió para ganar con claridad y merecimiento (3-1). Los goles de Yuri en dos ocasiones, el segundo de penalti y el golazo del canterano Adán, tras un espectacular trallazo que se coló por la escuadra, siendo su primer gol en segunda y su primer gol con el equipo, dejan a la Deportiva en sexta posición de la liga con 29 puntos, a diez puntos del descenso y metida de lleno en play off de ascenso.
Un 2015 para soñar
Aunque se dice que el objetivo es la permanencia, su imbatibilidad en casa, donde acumula 21 puntos y donde no ha perdido aún, hacen soñar a una afición que puede que este 2015 pueda celebrar el ansiado, aunque lejano Play Off a primera división. El objetivo está claro, pero la ilusión y la racha con la que comience este año nuevo, determinarán las aspiraciones de una Ponferradina que sueña con todo y que no va a renunciar a nada.