Guía VAVEL Athletic Club 2017/18: un pequeño gran cambio

A nivel táctico, el Athletic Club parece que va a sufrir una modificación basada en la entrada de Mikel Vesga en el once inicial. En principio, el jugador que estuvo cedido en el Sporting de Gijón formará pareja de centrocampistas junto a Beñat, desplazando de ese puesto a un Mikel San José que sí parecía dar algo más de equilibrio al cuadro rojiblanco. Repitiendo esquema, los entrenados ahora por José Ángel Ziganda no parece que vayan a mostrar más novedades.

Guía VAVEL Athletic Club 2017/18: un pequeño gran cambio
Vesga durante el partido ante el Dinamo de Bucarest | Fotografía: Athletic Club
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Por Aitor Sánchez-Rey Larrea

Desde que se anunciara la llegada de José Ángel Ziganda, muchas eran las miradas que intentaban descifrar las nuevas ideas que el técnico navarro implantaría en el vestuario. Sin embargo, los deseos se han esfumado rápidamente al comprobar que el Athletic Club volverá a disponer un planteamiento similar al que ya utilizaba con Ernesto Valverde y que viene de la época de Marcelo Bielsa. Lo que sí puede variar es el concepto futbolístico que quiere implantar el que fuera técnico del filial rojiblanco en el primer equipo. Y es que, parece que va a prescindir de la dupla formada por Beñat y San José que tanto tiempo ha estado pilotando el centro del campo del conjunto vasco. Vesga se postula como el acompañante de un centrocampista que sí es fijo para cualquier entrenador que comande la nave rojiblanca. Intentando descifrar qué es lo que puede aportar la inclusión del que estuviera cedido en el Sporting de Gijón la pasada campaña, conviene echar un vistazo al planteamiento táctico del equipo de San Mamés a poco menos de una semana de comenzar la liga.

Mayor estructura defensiva

Además de la que es la principal cara nueva en el once del Athletic, hay otro concepto que ha llamado la atención. Ahora, los rojiblancos parecen mucho más estructurados que con Valverde en el banquillo. Desde luego, esto tiene sus puntos positivos y negativos pues, aunque es cierto que da una mayor estabilidad ante posibles contras, hay muchos menos jugadores que se presentan en el área contraria, lo que puede provocar algún déficit ofensivo. Precisamente, ese tipo de encorsetamiento que sufre el equipo bilbaíno bien puede venir provocado por la escasa profundidad de sus laterales. A lo largo de la pretemporada, ese problema se ha puesto de manifiesto, siendo uno de los principales quebraderos de cabeza del técnico navarro.

Ni De Marcos ni Balenziaga parecen terminar de convencer en los laterales

Ni Óscar De Marcos ni Mikel Balenziaga parecen ser laterales modernos, esos que viven más en campo contrario que en el suyo propio. Hay que tener en cuenta que, por la naturaleza de los jugadores que utiliza el Athletic en posiciones más adelantadas, el terreno de juego del que disponen estos laterales es mucho menor. Si bien Muniain es algo más móvil, Iñaki Williams es un extremo pegado a banda que corta mucha proyección a De Marcos. El lateral de Laguardia es de los que necesita espacio para poder lucir sus espectaculares cualidades físicas de las que ya ha hecho gala en innumerables ocasiones. Problema similar, aunque esta ocasión derivado por sus características, ocurre con Balenziaga en el carril izquierdo. El ex del Real Valladolid, además de haber bajado el rendimiento en el último año por la falta de competencia, no acostumbra a incorporarse en campo contrario para dar centros o ser una pieza más de apoyo para sus compañeros.

Balenziaga durante el partido contra el APOEL en la UEFA Europa League
Balenziaga durante el partido contra el APOEL en la UEFA Europa League

El único que puede arreglar en cierto modo este inconveniente rojiblanco es Íñigo Lekue, el canterano que ha demostrado una gran polivalencia sobre el terreno de juego. Más joven y, por tanto, más adaptado a ese fútbol moderno que utiliza a los laterales como carrileros, el de Bilbao bien puede aprovechar su calidad con ambas piernas para penetrar por una y otra banda en función de lo que requiera el partido. Bóveda o Saborit podrían ser otras variantes, aunque ninguno de los dos parece que vaya a tener demasiados minutos esta temporada.

El efecto Muniain

Si De Marcos necesita espacio en el terreno de juego para poder desplegarse, su compañero Iker Muniain precisa de un contacto constante con el balón para sentirse cómodo e importante. El jugador navarro es, posiblemente, junto a Williams, el futbolista diferente de la plantilla. Con picardía, desborde y poderío físico en sus piernas, el que ya es uno de los capitanes del Athletic trae de cabeza al rival y es capaz de cambiar el encuentro por sí solo. Sin embargo, hay un problema, y es que, a veces, desaparece. Aunque en algunas ocasiones esta pérdida de protagonismo sobre el terreno de juego es a su propia voluntad, en otras sí que es cierto que el estar escorado a una banda le limita para entrar en contacto con el balón.

Si Muniain entra en juego, el Athletic mejora

Queda demostrado que cuando Muniain conecta con la pareja de centrocampistas y con el resto de compañeros ofensivos, el Athletic no solo tiene más balón, sino que domina y encierra al rival. Lo que terminó por ser un problema para un Ernesto Valverde que, en más de una ocasión, optó por situarle en la mediapunta, ha pasado a ser un deber para un José Ángel Ziganda que tiene que encontrar una posición en la que Muniain se sienta cómodo sin desplazar a un Raúl García que es detrás del punta donde más rinde, aportando tanto trabajo en la presión como gol en la finalización de las jugadas.

Muniain celebra uno de los goles la temporada pasada
Muniain celebra uno de los goles la temporada pasada

Todo igual, salvo Vesga

Finalmente, y tras analizar las principales novedades tácticas del Athletic, hay que recordar que el resto de la alineación permanece inamovible. Si no hay nada extraño en la decisión de Ziganda, Kepa Arrizabalaga debería ser el guardameta titular de un equipo que vuelve a tener el debate abierto en la portería tal y como sucediera el pasado curso. Por delante, la línea de cuatro estará formada por los ya mencionados Óscar De Marcos y Mikel Balenziaga, quienes escoltarán desde los laterales a una pareja de centrales de futuro formada por Yeray Álvarez y Aymeric Laporte. En el inicio de liga no sorprenderá ver a Etxeita o San José en sustitución del canterano de Barakaldo, que aún sigue recuperándose del tumor testicular detectado el pasado año.

En la primera línea de creación es donde aparece la principal novedad. Pues la inclusión de Mikel Vesga en detrimento de San José supone la principal y, posiblemente, única aportación de Ziganda en su primera etapa de este proyecto. El centrocampista brilló con luz propia en su cesión al Sporting de Gijón a pesar del descenso del conjunto asturiano. Visión de juego e inteligencia táctica se combinarán con un Beñat que ya ha demostrado la importancia que tiene sobre el terreno de juego en lo que al desempeño del Athletic se refiere. Por delante, Muniain y Williams se repartirán las bandas dejando en el centro del campo a un Raúl García que ha mostrado en pretemporada más gol que nunca. Su compenetración con el hombre más adelantado, Aritz Aduriz, ha resultado ser perfecta desde que llegara al conjunto rojiblanco hace ya dos temporadas.