El año comenzaba con ilusiones renovadas. Tras una primera vuelta en la que el equipo acabó segundo superando una auténtica plaga de lesiones de jugadores importantes, los hombres de Ángel Viadero llegaban al mercado invernal con todas las aspiraciones intactas. El club santanderino se vio obligado a reforzar varias posiciones que no estaban dando el resultado esperado. Uno de los grandes nombres de este mercado fue Abdón Prats, delantero que llegaba del Mirandés. Junto al jugador mallorquín, también se incorporaron Santi Jara, el defensa central Israel Puerto, el centrocampista Jagoba Beovide y el delantero Carlos Álvarez.
Con unos refuerzos de excepción, los de Viadero afrontaban la segunda vuelta con la esperanza de alcanzar a la Cultural Leonesa, líder sólido del grupo primero y que se distanciaba del equipo santanderino en cinco puntos.
En el primer partido del año, el Racing conseguía vencer en Palencia, un rival de la zona baja. La jornada siguiente, los cántabros recibían a uno de los conjuntos más en forma del campeonato, el Celta de Vigo B, que llegaba a Santander con el pichichi Borja Iglesias en sus filas. Lo cierto es que los gallegos fueron muy superiores al Racing y acabaron llevándose un encuentro en el que marcó el propio Iglesias.
Con el bajón típico de la derrota ante un rival directo y con muchas dudas en la afición por el comportamiento del equipo ante los equipos de la zona de la alta de la clasificación, el equipo de Ángel Viadero encadenó catorce partidos sin conocer la derrota. La racha se iniciaba con la victoria en Pontevedra (0-1) y continuaría la siguiente semana con uno de los pocos traspiés que los cántabros tuvieron en El Sardinero, donde empatarían ante el Racing de Ferrol.
El mes de febrero servía para afianzar la tendencia iniciada anteriormente y el Racing sumaría 10 de los doce puntos en juego con victorias sobre Burgos, Lealtad, Osasuna B y un empate frente al filial del Valladolid. Con 26 jornadas disputadas, los verdiblancos sumaban 55 puntos lo que les permitía ocupar la segunda posición a cuatro del líder, que continuaba con una marcha inmaculada.
Las nuevas incorporaciones iban dando sus resultados. Santi Jara se afianzaba en la banda derecha y Abdón Prats era el complemento perfecto para incrementar la cuenta goleadora que casi había sido propiedad de Aquino. Con dos victorias frente al Tudelano y la Ponferradina, el Racing afrontaba el partido más importante de lo que se llevaba de temporada, en un choque que le mediría ante el líder, Cultural Leonesa, en León, y con la presencia de casi cinco mil aficionados racinguistas que, ante la importancia del partido, no dudaron en arropar a su equipo. En un partido entre dos rivales muy parejos, el encuentro terminó sin goles y con la sensación de que los cántabros dejaron escapar la oportunidad de vencer a su más directo competidor.
Con la decepción propia de la impotencia por no ganar, el Racing sumaba ocho partidos sin perder y tenía por delante un calendario propicio para conseguir el liderato del grupo. Este hecho se vio reflejado en las cinco victorias consecutivas ante Somozas, Coruxo, Boiro, Arandina y Caudal, lo que favoreció que los hombres dirigidos por Ángel Viadero alcanzaran la primera plaza del grupo a falta de tres jornadas.
Partido clave
La jornada 36 se presentaba como clave para asegurar la primera plaza. El Racing visitaba Guijuelo para enfrentarse a un equipo que ya había hecho sus deberes y asegurado la permanencia. Los cántabros, tan solo debían sumar un punto para poder mantener su distancia con sus perseguidores en la clasificación. En un partido marcado por la incomodidad de jugar en un campo de hierba artificial y con una climatología adversa por el fuerte viento que estuvo presente durante el encuentro, los santanderinos no fueron capaces de competir y se vieron superados por un rival que fue mejor.
La derrota racinguista y la victoria de la Cultural Leonesa, condenaban a los cántabros a la segunda plaza. Con sendas victorias ante Multivera e Izarra, finalizaba una temporada regular en la que el Racing terminaba en segunda posición, empatado a puntos con la Cultural Leonesa con la espectacular cifra de 86 puntos, record de la categoría.
Promoción de ascenso
El primer rival en las eliminatorias por conseguir el ascenso a la segunda división fue el Rayo Majadahonda. El primer partido se disputó en tierras madrileñas y, tras una primera mitad aburrida, el Racing dio un golpe sobre la mesa y consiguió aprovechar los errores de la zaga rival para llevarse el partido por un contundente uno a tres. El partido de vuelta en El Sardinero discurrió sin historia y con un Racing muy superior que ganaba por tres goles a cero.
El segundo obstáculo en el camino era el Villanovense. Los extremeños llegaban a esta fase del play off como uno de los equipos revelación y daban muestra de ello venciendo al Racing en un muy buen partido que acabó con victoria de los de Villanueva de la Serena por dos goles a cero, un resultado corto a la vista de las múltiples oportunidades que desperdiciaron los extremeños.
El partido de vuelta sirvió para que el racinguismo se uniera en busca de una remontada que, visto el primer partido parecía complicada. Con un estadio casi lleno, el Racing buscó dar la vuelta a la eliminatoria sin pausa pero sin prisa. Fruto de esa insistencia fue el gol de Beovide en la primera mitad que daba esperanzas a los santanderinos. La segunda parte fue un vendaval verdiblanco, quizás en la mejor segunda parte de la temporada y con un gran acierto de cara a gol que imposibilitó la reacción extremeña. Castañeda, Prats y Santi Jara cerraban un partido que dejaba al Racing a las puertas de la división de plata.
Final por el ascenso
En la última eliminatoria, el Racing se enfrentaba al filial del F.C. Barcelona, un equipo que llegaba a este tramo de la competición con mucho desgaste y con una trayectoria más que cuestionable. Tras la victoria ante el Villanovense, la afición racinguista fue consciente de la importancia del partido de ida e hizo grandes colas en las inmediaciones de las taquillas de El Sardinero para no perderse el envite. De hecho, el acontecimiento sirvió para colgar el cartel de “no hay billetes”.
Con la motivación por las nubes y con el contagio de euforia propia de la situación, el Racing consiguió ponerse por delante en el marcador al comienzo del partido. Con marcador favorable y ante un rival que parecía estar superado por la situación, todo parecía que iba a ser un paseo. Sin embargo, las tendencias en el fútbol cambian muy rápido y tras dos errores defensivos graves, el Barcelona B se iba al descanso con ventaja en el marcador. La segunda mitad sirvió para afianzar la victoria blaugrana ante un Racing que se desinfló y tiró por la borda toda la ilusión y el esfuerzo generado durante la temporada.
Nuevo reto
Tras la desilusión por no conseguir el ascenso, el Racing vio como pasaba a formar parte del grupo segundo de la Segunda División B. Con un presupuesto más ajustado, también pudo ver como los jugadores más importantes del pasado curso abandonaban la disciplina cántabra ante la imposibilidad de asumir sus fichas. Quizás, el abandono que más dolió fue el de Abdón Prats, que puso rumbo a Mallorca tras sus excelentes números en Santander. También marcharon Santi Jara, Jagoba Beovide, Puerto o la pareja de centrales, Llorca y Santamaría.
Con ese panorama, la secretaría técnico del club iniciaba la confección de la plantilla con regresos de jugadores salidos de la cantera racinguista como Quique Rivero, Juanjo, Antonio Tomás o Álex García, a los que se unió una nueva pareja de centrales, Gonzalo y Regalón.
Nuevos rivales
Con distintos rivales pero con el mismo objetivo, el Racing comenzaba la temporada recibiendo al Arenas de Guecho. En un partido plano y propio de principio de temporada los racinguistas conseguían la primera victoria. La semana siguiente, repetirían resultado ante el Gernika.
El primer gran partido de este nuevo curso se produciría en la jornada tres, donde el recién descendido Mirandés visitaba El Sardinero. Ambos rivales se mostraron muy parejos, pero la victoria final fue para los burgaleses. El equipo no arrancaba y los fichajes no aportaban lo previsto. La afición comenzaba a impacientarse y la siguiente salida solo sirvió para confirmar los malos augurios. El Racing perdía en Gijón por tres goles a uno ante un filial del Sporting que se mostró muy superior en todo momento.
Críticas al equipo
Las primeras críticas se centraban en Ángel Viadero, un hombre que no fue capaz de conseguir el ascenso y que comenzaba la temporada con un equipo en el que su juego dejaba mucho que desear. Sin embargo, a pesar de los problemas circunstanciales y baches por los que pueda atravesar el equipo, sigue siendo una de las mejores plantillas del campeonato por lo que siempre está expuesto a encadenar una buena racha de resultados.
Con victorias frente a Leioa, tomándose la revancha de la eliminación copera, Peña Sport, Bilbao Athletic y empatando ante Vitoria e Izarra, el equipo santanderino enlazaba seis jornadas sin perder que le situaban en la segunda posición. El mes de octubre finalizaba con la tercera derrota de la temporada ante el Amorebieta.
Con un juego pobre y ramplón, el técnico santanderino seguía muy cuestionado. Los fichajes no terminaban de aportar y el equipo seguía generando muchas dudas. A pesar de ello, noviembre servía para seguir sacando resultados positivos, en los que el Racing ganaba a Burgos, Caudal, Lealtad y Osasuna B de manera consecutiva y empataba ante el Tudelano, volviendo a recuperar la segunda plaza, aunque viendo como el líder, Mirandés aumentaba su diferencia en la clasificación.
En la jornada 17, los cántabros volvían a caer derrotados, esta vez ante el Logroñés. En los dos últimos partidos, el Racing empataba ante el filial de la Real Sociedad B y ganaba a domicilio en Irún. Con estos datos, el club santanderino termina el año en la tercera posición, a seis puntos del Mirandés que se muestra como el auténtico dominador de la competición.
Datos globales
En cuanto a datos globales, el Racing ha disputado en el año 2017 un total de 45 partidos, de los que ha ganado 28, ha empatado cuatro y ha perdido otros tantos. Unos números muy buenos para la categoría pero que no terminan de ser lo suficientemente importantes como para lograr el ascenso. En cuanto a goles, en el año que finaliza, el Racing ha anotado 74 tantos, de los cuales 22 fueron marcados por Dani Aquino.
Año 2018
Con el año 2018 se inicia el mercado invernal de fichajes y los santanderinos se verán obligados a buscar un referente en ataque para acompañar a Dani Aquino, ya que Juanjo o Pau Miguélez no terminan de ayudar en la faceta goleadora. Por otra parte, los de Viadero también podrían incorporar a algún defensa que colabore a fortalecer una de las partes más vulnerables de lo que llevamos de temporada.
En definitiva, el club santanderino afronta por tercera temporada consecutiva el objetivo de abandonar la categoría de bronce del fútbol español. Una división compleja, en la que superar las adversidades es muy complicado y donde la exigencia del play off final obliga a los equipos a llegar a esa parte de la temporada en la mejor de las formas posibles.