El derbi burgalés volvía a la capital del Arlanzón con aires de un gran partido aunque finalmente dejó algo que desear. Las dos aficiones se portaron y llenaron de color un Plantío que presentó una muy buena entrada. Las ganas de derbi superaron el fútbol ofrecido por los dos equipos mientras que el empate final parece que fue lo más justo.

Un gol y fútbol tranquilo

El encuentro comenzó con bastante ritmo, el Burgos intentando llevar la posesión del balón, controlando un poco el juego en los primeros minutos hasta que en el minuto 5 llegó el primer disgusto para el conjunto local. Kijera puso un centro perfecto al segundo palo donde Pito Camacho, ya en área pequeña, pudo controlar a placer y batir por bajo a Saizar, poniendo el 0-1 en el electrónico. Un gol con un fallo general en la defensa blanquinegra que apenas se dio cuenta de una jugada que fue rápida.

A raíz de este gol el equipo rojillo empezó a controlar el partido con mucha tranquilidad, el Burgos se vino abajo y comenzó a tener errores no forzados, unos fallos que daban alas a un Mirandés que tenía la posesión del balón y que no llegaba a ver peligrar su portería en ningún momento. En el minuto 14 Yanis puso un centro-chut que fue directamente a portería que hizo que Saizar se tuviese que estirar para enviar el balón a córner.

Los minutos de la primera mitad iban corriendo mientras el Burgos seguía sin encontrar su juego y el Mirandés estaba demasiado cómodo como para jugar fuera de casa. Entrando en los últimos cinco minutos de esta primera parte el Mirandés dispuso de otra ocasión de gol tras un balón que se quedó suelto en el área al que no llegó a acertar la defensa blanquinegra y le cayó a Yanis que disparó, tocó un defensor blanquinegro y posteriormente Saizar metió la mano abajo para despejar.

Tras el paso por los vestuarios parece ser que el Burgos salió algo más concentrado, buscando tener de nuevo el balón en su posesión e intentando meter un poco atrás a un Mirandés que parecía querer mantener el resultado. En el minuto 51 Andrés puso un centro desde la derecha al corazón del área donde cabeceó Madrazo y despejó Limones.

Reacción blanquinegra con empate final

La segunda mitad fue avanzando con un Burgos sumido en un juego de calma, sin poder llegar apenas a la portería rival y sin poder tener oportunidades de hacer el empate. El Mirandés seguía manteniendo la calma mientras el Burgos tenía el balón pero continuaba teniendo demasiados errores como para poder llegar al gol.

El partido entraba en los últimos diez minutos del encuentro cuando llegó el éxtasis blanquinegro logrando el empate en una jugada ensayada. Adrián Cruz botó una falta en corto a la frontal donde Blázquez la puso de primeras por encima de la defensa, Adrián Hernández no llegó a rematar, la defensa tampoco pudo despejar y finalmente Iker Hernández logró empujar el balón al fondo de las mallas, poniendo el 1-1 definitivo en el marcador.

El empate final no dejó contento a ninguno de los dos equipos, el Mirandés perdió la oportunidad de meter presión a un Sporting B que había perdido y se queda a tres puntos del liderato. Por el otro lado, el Burgos tampoco aprovechó el partido y el punto sumado le sigue dejando 11º con 42 puntos, ya a nueve del play-off. En la próxima jornada el Burgos seguirá con su particular Tourmalet y viajará a Mareo para enfrentarse al Sporting B mientras que el Mirandés recibirá al Caudal, último clasificado.

Puntuaciones VAVEL

Kijera 3 pt.
Pito Camacho 2 pt.
Iker Hernández 1 pt.