Héctor Hernández ha vuelto a trabajar con el primer equipo tras tener en vilo a Lucas Alcaraz durante varios días. El técnico granadino comienza a recuperar hombres poco a poco con el objetivo de superar su próximo y duro rival. Ante el Barcelona de Luis Enrique, Gastón, Ingason, Saunier y Khrin han sido duda. Sin embargo, para la fortuna del Granada, todos estarán disponibles el domingo a las nueve menos cuarto. Entre todos los nombres reluce el de Héctor Hernández, quien ha sido una pieza clave en el esquema de Alcaraz desde su llegada.
Las estadísticas son un fiel reflejo del excelente rendimiento del jugador español. La confianza ganada de una manera fugaz le ha hecho jugar diez partidos desde principios de febrero. En siete de ellos ha logrado empezar desde el primer minuto. Sin duda alguna, junto con Wakaso, es la incorporación más productiva del Granada en los mercados más recientes.
Dimitri Foulquier se ha visto sobrepasado por la calidad del cedido por la Real Sociedad. Puede considerarse como uno de los laterales más sólidos de La Liga. Uno de los trabajos que más esfuerzo requieren en esta posición es el de conseguir la precisión necesaria en los centros al área. Héctor Hernández supera la media de la primera división española y permite codearse con jugadores de la talla de Dani Carvajal, Rosales o Aarón Martín.
Moralmente, el alta médica de Héctor es un chute de moral para el vestuario granadino. El guión no cambiará la línea seguida en el Camp Nou. Lucas Alcaraz, un fiel del sistema defensivo y amante del juego de contraataque, buscará las cosquillas de los azulgranas esperando atrás. Así, el Granada deberá tirar de músculo e intensidad para aguantar durante los noventa minutos el vendaval culé. Precisamente, estas cualidades son las que el vallisoletano mejor despliega sobre el verde, por lo que su recuperación es vital para conseguir la gesta el próximo domingo.