Ni la costa oeste, ni la costa este de Estados Unidos le sentaron bien a Eugenie Bouchard que hoy ha quedado fuera del Miami Open al perder contra Rebecca Peterson con parciales de 6-4 y 6-3. Así, Peterson es la que accede al cuadro principal de Miami, dejando fuera a Bouchard en su sexto año participando en el segundo evento premier de la temporada. En sus últimas dos apariciones, Bouchard no había logrado pasar de primera ronda y en las primeras tres llegó a la segunda instancia. Sin embargo, es la primera vez que no había entrado de manera directa al cuadro principal.

La sueca de 22 años regresa a Miami por primera vez desde el 2014. En aquella vez llegó a la segunda ronda en el cuadro principal y ocupaba el ranking número 250 del mundo. Esta vez accedió por medio de los partidos de clasificación y es la #116 en el ranking de la WTA. Para Peterson el 2018 ha sido un año con resultados prometedores. A pesar de que emepezó el año perdiendo su primer partido en Australia, en Acapulco logró llegar a la semifinal. Ha escalado más de 30 posiciones desde que comenzó la temporada.

Tras eliminar a Pauline Parmentier en el primer partido clasificatorio, Bouchard era la que la separaba del cuadro principal. A pesar de que los reflectores estaban en la modelo de Sports Illustrated, la sueca no se dejó intimidar y le complicó el tramite del partido a su rival desde el principio. Un primer set en el que necesitó de un solo quiebre para marcar la diferencia e imponerse 6-4. La canadiense se apoyó en su servicio para intentar hacer daño y concretó tres "aces." Sin embargo, en casi todos los demás rugros Peterson fue superior.

Bouchard dió señales de esperanza cuándo ganó el primer juego del segundo set, pero todo se vino abajo cuándo rápidamente la oriunda de Estocolmo comenzó a remontar. Su efectividad en primer y segundo servicio superó a lo que la ex-número cinco del mundo hizo durante el partido. Así que tras 76 minutos de partido, Peterson selló su pase al cuadro principal del Miami Open. Bouchard, una reina en redes sociales sigue perdiendo protagonismo en las canchas torneo tras torneo.