Partido muy disputado entre dos de las mejores promesas del tenis mundial en la Next Generation ATP Finals: el estadounidense Taylor Fritz contra el ruso Andrey Rublev, un partido en el que ha resultado vencedor el actual subcampeón Rublev por tres sets a dos. Hay que recordar que esta competición se disputa bajo unas reglas especiales: al mejor de cinco sets y cada set al mejor de cuatro juegos (tie-break si se llega al 3-3), además de los juegos sin ventaja.

Ha sido un año complicado para el ruso entre lesiones y rachas negativas de derrotas pero empieza con buen pie en su última competición del año y ha sabido remontar un partido que empezó ganando pero en el que después se puso 2 sets a 1 abajo. La primera manga se la llevó Rublev sin complicaciones, muy seguro al saque y ya en el primer juego al resto teniendo las dos primeras bolas de break del partido, que el estadounidense consiguió salvar. Sería ya en el sexto juego del set cuando el ruso rompía el servicio a su rival para cerrar el set 4-2.

En el segundo set iba a llegar la respuesta del estadounidense, que a pesar de haber perdido el set anterior, estaba muy motivado para poner el partido a su favor. Nada más empezar el set, Fritz rompía el servicio a Rublev y lo volvía a hacer poco después en el quinto juego del segundo set para cerrarlo 4-1 a su favor en diecinueve minutos.

El tercer set tenía también el color de la bandera estadounidense. Empezaba muy a favor de Fritz, quien hacía break en el primer saque de Rublev, pero el ruso le iba a responder con un contrabreak. Ambos mantuvieron después sus saques sin problemas hasta llegar al tie-break, en el que el estadounidense apretó bastante y consiguió romperle el saque al ruso en cuatro ocasiones para llevarse finalmente el tie-break 7-4.

En el cuarto set volvía a aparecer otra vez el tie-break, pero esta vez la moneda iba a cambiar de lado. Un set sin ninguna rotura de servicio hasta llegar al desempate, en el que Rublev aseguró bastante, ya que sabía que si cometía algún error se le escaparía el partido. Empezaba igualado el tie-break con ambos jugadores conservando sus primeros servicios, pero después el ruso iba a quebrar el saque dos veces seguidas a Fritz para llevarse el tie-break 7-2.

Llegaba el quinto y último set del partido en el que Andrey Rublev iba a demostrar cómo llegó a la final en el mismo lugar el pasado año, llevándose en este caso el set sin ningún apuro 4-2 y, por tanto, ganando el partido. El ruso ganó todos sus saques sin ningún problema y fue en el tercer juego del set cuando rompió el servicio en blanco a su rival.

Gran triunfo del joven jugador ruso que recupera mucha confianza en Milán, donde consiguió muy buenos resultados la pasada temporada y donde ahora sueña con liderar el grupo B y, por qué no, con alzar el título de la Next Gen.