Novak Djokovic dio un paso más para quedar en los libros del tenis. Este domingo, venció a Matteo Berrettini por 6-7(4), 6-4, 6-4 y 6-3, en tres horas y 23 minutos de juego, para quedarse con su sexto título en Wimbledon y lograr su Grand Slam N°20.
Con este resultado, alcanzó el récord de Majors ganados y lidera la estadística junto a Roger Federer y Rafael Nadal. Ahora, aspirará a obtener el Golden Slam (imponerse en los cuatro torneos grandes y en los Juegos Olímpicos) que solo pudo lograrlo Steffi Graf en 1988.
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El italiano arrancaría con ventaja
El inicio del serbio fue algo dubitativo. De todas maneras, supo esperar su momento para mostrarse agresivo al resto y en su segunda opción de quiebre rompió el servicio rival para adelantarse 3-1. Parecía tomar el control del parcial y con 5-2 dispuso de un punto de set.
Sin embargo, Berrettini se defendió y fue trabajando con paciencia hasta escapar de esa situación. No solo siguió con vida en el set, sino que con tres juegos seguidos igualó 5-5 para decidir a su favor la manga en el tiebreak. La mejoría del N°9 del mundo dio sus frutos e hizo valer un mini-break para, sorprendentemente, llevarse el primer set.
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Nole no bajó los brazos en los siguientes parciales
Djokovic empezó el segundo set dispuesto a hacer daño desde el principio, y lo logró. Rápidamente, se puso 3-0 arriba y dejaba muy tocado a su rival. Con esos dos breaks y una notable mejora en su juego, el balcánico sacaría para el set. Pero, de nuevo, el italiano se marcó un gran juego para alargar un poco más la definición.
Sin embargo, lejos de repetir errores del pasado, el serbio no dio más vida a su rival. Con un equilibrado balance de 12 winners y solo 4 errores no forzados terminó igualando el encuentro y enderezó su rumbo en Londres.
El N°1 del mundo tardaría poco en ponerse adelante en el tercero. Fue en el segundo turno de servicio de Berrettini, donde su mejora se hizo evidente. El break que lograría lo aguantaría hasta el 5-4, donde una vez más, sacó para ganar el tercer set y quedarse cerca de un nuevo título.
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A Djokovic no le tembló el pulso para cerrar el duelo
El parcial comenzaría de manera diferente, ya que Berrettini conseguía llevarse sus primeros tres turnos de saque, sin conceder opciones de break, algo que aún no había sucedido en el partido. La primera bola de rotura llegó en el 3-3, con servicio del italiano, que en ese momento cometió su tercera doble falta.
En ese momento, el balcánico encarrilló el partido y contó con tres match points para quedarse con la definición. Tras un slice en la red del N°7 del mundo, Nole se tiraría al suelo y festejaría la obtención de un nuevo Major en su carrera.
