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Kyrgios cae por su propio peso

El tenista australiano, decimocuarto cabeza de serie del Open de Australia, cae eliminado ante el italiano Andreas Seppi. Un partido a cinco sets en el que el italiano se impuso 1-6, 6-7, 6-4, 6-2 y 10-8.

Kyrgios cae por su propio peso
Kyrgios golpeando de revés una de las bolas del partido. Foto: DaniMullor - VAVEL
lopezalex98
Por Alexander José López Stoeckl

Partiendo como el cabeza de serie número catorce del primer Grand Slam de la temporada, el Open de Australia, el ídolo local Nick Kyrgios se enfrentaba a priori a una fácil segunda ronda en Melbourne ante Andreas Seppi, teniendo que batirse en primera ronda con el portugués Gastao Elías, número setenta y siete del ránking ATP, al que venció de una manera muy cómoda y jugando un tenis muy limpio en un partido en el que no perdió la cabeza en ningún momento. El duelo estaba servido, lo más claro era una victoria del Australiano pero todo el mundo sabe que Kyrgios al saltar a pista puede dar una versión u otra.

Comienzo esperado

El partido comenzaba como no podía ser de otra forma, el aussie apoyado por todo el público e intratable al saque ante un Seppi que se veía muy superado por la situación que estaba viviendo. No todos los días juegas en una pista central de un Grand Slam ante el ídolo local y recibiendo latigazos a más de 100 km/h. Ni un sólo respiro le dio Kyrgios al jugador italiano, el primer juego con el saque le rompió en blanco y Seppi se vino abajo. Los puntos seguían transcurriendo y los saques directos por parte de Kyrgios seguían llegando, el primer set acabaría con un claro 6-1 a favor del jugador local.

El segundo set comenzaba con una bola de break para Kyrgios pero bien salvada con un golpe poderoso por parte de Seppi. Conseguía salvar su saque y Kyrgios empezaba a mostrar un bajón en su juego. Lo fue sorprendente fue el cambio de actitud de Seppi que no dejaba al australiano estar cómodo en pista, lo que no le permitía lanzar grandes golpes con su poderosa derecha. La segunda manga llegaría al tie break ya que ninguno de los dos jugadores tendría más oportunidades de rotura. Seppi buscaba dar la sorpresa e igualar el encuentro pero no fue posible ya que dos dobles faltas condenaron al jugador europeo y Kyrgios al saque era infranqueable. El tie break recordaba al primer set, Seppi desquiciado y Kyrgios intratable. Todo indicaba a que el partido se iba a decidir en tres sets.

Punto de inflexión

Después de un pequeño descanso para calmar los ánimos, Seppi volvía mucho más relajado y conseguía sumar juegos al saque con facilidad. El 4-4 del tercer set sería el punto clave del partido, Seppi cuajaba un gran juego y aprovechaba la primera bola de break que tenía en todo el partido. En ese momento, a Kyrgios se le pasa algo por la cabeza y empieza la debacle. El italiano se hace con la tercera manga por 6-4 y los aficionados se temían lo peor para el australiano.

Cabizbajo y desganado, Kyrgios parecía tener prisa por terminar el partido y la prisa en el tenis es muy mala compañera. Numerosas dobles faltas y errores no forzados durante el partido condenaban a Kyrgios, al que Seppi consiguió romper en dos ocasiones, teniendo bola de break para romper su saque por tercera vez. El cuarto set acababa con un gran resultado 6-2 para el motivado Andreas Seppi.

Puro espectáculo

Lo bonito de los Grand Slam es la gran duración de los partidos y los muchos cambios que sufre el partido durante su transcurso y este fue uno de los partidos para recordar. Comenzaba el quinto set con un Kyrgios que parecía que había cogido confianza para irse a por el partido.

Ambos jugadores se mostraban seguros con su saque pero dubitativos al resto por lo que los juegos iban llegando hasta el 4-4 en el que los nervios iban a jugar un gran papel. Tres buenos puntos jugados por el australiano le daban la oportunidad de encontrarse con tres bolas de break para romper el saque de su rival y tener la oportunidad de sacar para ganar el partido pero el italiano supo jugar todos los puntos y consiguió salvar el juego con su saque.

Comenzaba el show particular de Kyrgios, cada vez estaba más desesperado y hacía gestos negativos con la cabeza ya que no se veía capaz de ganar este partido ni con las ganas suficientes para lucharlo. Perdería su saque con dos dobles faltas hechas casi a propósito ya que su cara era de tener ganas de marcharse a casa sin que le hablase nadie. Se mascaba la tragedia para el público australiano, Seppi sacaba para partido y eliminar al jugador en el que más confiaban pero no llegaría todavía ya que la raqueta le temblaba y acumuló varios errores que aprovechó Kyrgios para seguir en el partido.

8-8 en el quinto set, comenzaba un nuevo partido con un único factor, tres horas habían transcurrido y eso empezaba a notarse en las piernas de ambos tenistas. Seppi consiguió un gran winner para salvar una bola de partido que parecía hecha pero el italiano mantuvo la cabeza fría. Kyrgios estaba harto de la situación y su juego parecía como si estuviese en un torneo de exhibición sin importarle nada de nada. Una doble falta más haría que Seppi consiguiese el break definitivo para que pudiese sacar para llevarse un partido en el que nadie daba un euro por él. Finalmente, el italiano se llevaría el partido en un último juego en el que Kyrgios ni se molestaba en moverse, algo que ya ha hecho más de una vez y le ha costado más de una sanción económica pero se ve que su actitud no la piensa cambiar.

Darcis, próximo asalto

El rival de Seppi será el belga Steve Darcis, que venció en segunda ronda al argentino Schwartzman en cuatro sets bastante desiguales 3-6 3-6 6-2 y 4-6.