En el año 2006, Tommy Robredo alcanzó el número cinco del mundo. Por aquel entonces el español tenia 24 años y muchos años de alegrías por delante. 12 títulos le contemplan, entre ellos un Masters 1000 en Hamburgo ese mismo 2006 ante el checo Radek Stepanek, pero las lesiones han ido castigando severamente al catalán que no gana un torneo desde hace casi cuatro años.

Por el camino, Robredo ha hecho todo lo posible por superarse y por ser ese jugador competitivo capaz de ganar a cualquier jugador, sobre todo cuando llegaba la tierra batida, superficie donde se sentía más cómodo, lo que le llevó a ganar once de sus doce títulos en esas pistas. El gerundense lo ha intentado de mil maneras, pero parece ser que su cuerpo no esta por la labor. En el partido de hoy se le vio la calidad que nunca se ha ido, pero su físico no respondió ante un jugador mucho más joven.

Khachanov solo tuvo problemas en el segundo set

El ruso, uno de los jugadores más prometedores de la denominada next-gen, ​demostró que tiene tenis de muchos quilates en su raqueta. El joven jugador ruso de 20 años conectó doce saques directos que dejaron sin respuesta a Robredo. Khachanov llevaba casi dos meses sin ganar un partido, desde la primera ronda del Open de Australia, pero sacó su mejor tenis para vencer con cierta facilidad.

​Khachanov demostró un nivel superior al que estaba demostrando en los últimos tiempos.En la primera manga, el ruso barrió de la pista al español. En solamente 20 minutos, Khachanov jugaba a su antojo con Robredo, que no sabía que hacer ante el nivel que tenía su rival en la tarde de hoy en el complejo de Indian Wells. Tres roturas consiguió el ruso que golpeaba con una fuerza descomunal a la pelota, demasiado para el español.

Sin embargo, la cosa cambio en el segundo set. Robredo no se iba a ir sin luchar. El gerundense empezó a meterse más en pista y Khachanov se vio totalmente dominado. La rotura con la que empezó la manga demostraba que el español tenía ganas de dar guerra y consiguió hacer sudar al joven ruso. Sin embargo, cuando Robredo servía para ganar el set, Khachanov se soltó y volvió ese juego celestial del primer set que le permitió ganar cuatro juegos seguidos y hacerse con el partido. En la siguiente ronda, el ruso se enfrentará al belga David Goffin.