“Quería decirles que hace unos días recibí una carta de la ITF en el que me decían que había fallado a un examen de droga en el Australian Open. Fue así y asumo la responsabilidad por eso”. El día siete de marzo de 2016,  María Sharapova convocó con urgencia a una conferencia de prensa: con estas palabras y con un rostro triste,  la tenista rusa anunció que había recibido una notificación de la Federación Internacional de Tenis acusándola de haber consumido una sustancia denominada “Meldonium”,  la cual no estaba permitida dentro del reglamento de la WTA.

La exitosa tenista aceptó haber consumido ese medicamento durante diez años por orden de su médico personal. Sin embargo, en enero del pasado año, ese remedio se unió a la lista de sustancias prohibidas, noticia que la rusa pasó por alto y que siguió consumiendo hasta el primer Grand Slam del año. Luego del partido correspondiente a los cuartos de final del Australian Open, en el cual Serena Willians se impuso por 6-4 y 6-0 ante María, la ITF descubrió la droga utilizada por ella y le aplicó una larga sanción de más de un año.

María Sharapova volvió al circuito

El grave error cometido por ‘Masha’ repercutió en todo el mundo generando controversias, críticas y largos debates entre las máximas autoridades del tenis y la obligó a alejarse del circuito durante mucho tiempo. Con 29 años y con una trayectoria fuera de serie, Sharapova debió afrontar y superar la  situación más compleja de su carrera. Un año y tres meses más tarde, la ex número uno del mundo cumplió con la sanción  establecida y, a raíz de una invitación especial cedida por director del torneo WTA de Stuttgart y bajo un marco de feroces críticas por parte de jugadores y otras personas destacadas, regresó a la competencia profesional.

"No ha podido jugar en 15 meses. Ahora tiene todo el derecho de regresar y competir"

La decisión de Markus Günthardt -director del torneo alemán- de conceder una wilcard a la rusa para que pueda disputar el torneo, trajo consigo una multitud de críticas y voces opositoras. Sin embargo, él mismo se encargó de defender su postura y de ratificar que su decisión fue la correcta. " Yo he decidido otorgarle una invitación a Sharapova pensando en el torneo. Ha sido número uno del mundo, ha ganado Grand Slams y ha ganado tres veces en Stuttgart. Su forma de jugar, su lucha y su pelea han ayudado a que este torneo crezca", se defendió.

 "No ha intentado hacer trampas, solo cometió un error muy grave. Durante 10 años tomó algo legal que pasó a estar prohibido. ¿Por qué no supo que ya estaba prohibido? No tengo respuesta, pero asumió su responsabilidad. Lo hizo muy bien. No ha podido jugar en quince meses que es un mundo para un profesional. Ahora tiene todo el derecho de regresar y competir", se justificó el director del evento.

La inactividad, la falta de ritmo y la ansiedad por volver a disfrutar del tenis no se evidenciaron en el cuerpo de María Sharapova que, con una calidad infernal y con mucho amor propio, jugó un tenis espectacular. Alternó diferentes golpes, convirtió muchos tiros ganadores y con merecimiento, superó la primera ronda del torneo Porsche Tennis Grand Prix al vencer a la italiana Roberta Vinci por 7-5 y 6-3. 

La rusa domina de principio a fin

Aceleración, profundidad, aperturas y excelentes devoluciones  fueron las cuantiosas  virtudes utilizadas por la rusa que brindó un buen espectáculo de tenis y, con un absoluto dominio, se impuso ante el juego de la número 36 del ranking durante todo el primer set. La italiana solo se vio favorecida en el comienzo del partido cuando rompió el servicio de su rival. Sin embargo, rápidamente llegó el contra break y el encuentro se volcó definitivamente para un solo lado. Con 24 tiros ganadores y 12 errores no forzados y con un alto porcentaje de primeros servicios, Sharapova volvió a tomar el saque de su adversaria en el 5-5 para quedarse, en su tan esperada vuelta, con el primer parcial por 7-5.

En el segundo set, la rusa continuó con un vistoso y elegante tenis.  Con mucha agresividad, atacó cada uno de los saques de Vinci -estrategia que le proporcionó mucha cantidad de puntos-, jugó siempre metida dentro de la cancha y no afrontó dificultades para sacar adelante sus turnos de servicios. María quebró en el 0-0, y con un marcador muy favorable para ella, controló a la perfección cada momento del partido. 

En el noveno game del encuentro, exquisitas devoluciones y algún que otro error de Vinci la dejó con una triple oportunidad para romper el servicio de su contrincante y ponerle punto y final al encuentro. Sin dejar pasar la oportunidad, la rusa se quedó con el set por 6-3 y avanzó a la siguiente ronda el torneo alemán, en el que fue campeona en tres ocasiones. En la siguiente instancia, deberá enfrentar a su compatriota Ekaterina Makarova, que derrotó a la polaca Agnieszka Radwanska. El tiempo fuera de la pista no le pesó y, demostrando una grandeza fascinante, María Sharapova regresó al tenis.