Madison Keys se sigue fortaleciendo con el paso de los partidos, la joven tenista norteamericana está mejorando notoriamente su nivel ofrecido durante los últimos meses en el circuito. Teniendo en cuenta que perdió en varios debuts y varias rondas iniciales, su resultado en Stanford invita a pensar que Keys está de vuelta.

Para este encuentro, tenía del otro lado de la cancha, a otra joven jugadora rusa que viene haciendo muy bien las cosas y está en el puesto 38 del ranking, Daria Kasatkina que venía de eliminar en primera ronda a la bielorrusa Aliaksandra Sasnovich.  La serie entre la norteamericana y la rusa está a favor de Keys en dos encuentros.

Keys fue ampliamente superior a una Kasatkina que muy pronto se quedó sin respuesta, ante los poderosos ataques de la estadounidense. Apenas en el primer juego de servicio de la rusa, Keys se impuso sin perder puntos, lo que puso ante los ojos del mundo lo que sería el resto del encuentro, una Keys dominante de principio a fin, de hecho, la norteamericana solo permitió una oportunidad de quiebre y ésta se presentó en el primer juego de servicio, de ahí en adelante se mostró muy firme en sus golpes y en sus saques, a la vez que Kasatkina estaba muy errática.

El segundo set casi que fue una copia al carbón del primero, el dominio de Keys fue absoluto y solo permitió una oportunidad de quiebre, igualmente en su primer servicio, el resto fue historia, se quedó con el encuentro con un abultado marcador de 6-2 y 6-1 donde consiguió 15 tiros ganadores, por cuatro de Kasatkina, avanzando de esta manera a los octavos de final del torneo.

Posterior al encuentro, Keys indicó que "Estaba haciendo lo que necesitaba para estar bien, y atacar cuando necesitaba atacar" también aseveró que "En general creo que no hubo mucho que me hiciera sentir infeliz hoy", demostrando estar muy contenta por el tenis que pudo hacer hoy, un reflejo de lo que demostró en Stanford y sigue en Cincinnati. La norteamericana tendrá un duro escollo en los octavos de final, en los que enfrentará a la española Garbiñe Muguruza a la que ya derrotó en Stanford y con la que todavía no ha perdido en los tres enfrentamientos que han tenido.