24.146 espectadores se reunieron en el José Zorrilla para disfrutar del espectáculo y la ilusión de La Roja, que se impuso por 3-1 a una Georgia comandada por Khvicha Kvaratskhelia, autor del único gol de Georgia.
La Selección Española se adelantó con un remate de Le Normand, pero rápidamente, Georgia empató en un mano a mano de Kvaratskhelia, firmando así las tablas en la primera mitad. En la segunda parte, un cabezazo de Ferrán y un gol en propia de Lochorashvili dieron el triunfo a La Roja.
Primera parte: la sorpresa georgiana
La Selección Española comenzó tocando en campo rival con mucha facilidad, mientras que Georgia asumió un papel defensivo replegándose y a la espera del contraataque. El primer ataque de La Roja fue fructuoso, pues apenas pasados 4 minutos de juego, Le Normand abrió el marcador.
Una falta escorada botada por Ferrán Torres llegó al segundo palo, y tras un error de marcaje de Kashia, Le Normand fue capaz de estirar la pierna para inaugurar el electrónico y adelantar a España. España intentó aprovechar el momentum, y en el minuto siete estuvo a punto de llegar el segundo. Carvajal la dejó atrás después de una diagonal de Rodri, y Gavi le pegó de volea, pero Mamardashvili despejó y el rechace cayó en los pies de Williams, que disparó por encima del arco georgiano.
La Selección parecía empezar a engrasar, pero entonces la sorpresa saltó en el Zorrilla. Mikautadze filtró entre los dos zagueros españoles un gran pase para Kvaratskhelia, que definió raso y cruzado, imparable para Unai Simón. Grave error de coordinación de Le Normand e Íñigo Martínez que resultó en el gol colquense y la vuelta de las tablas al marcador. Después del gol, Georgia se intentó liberar, pero la presión y la intensidad solo hizo que aumentar, por lo que a los de Sagnol no les quedó otra que volver a retroceder y encerrarse en su propio área.
El mediocampo español buscaba de manera reiterada a Nico Williams, que intentó desbordar en distintas ocasiones a Kakabadze, logrando varias faltas laterales como la del primer gol español. El director de orquesta estaba siendo Gavi, muy asociativo y bastante inspirado, pero lamentablemente, apenas después de varios minutos en lo que estaba volviendo loca a la defensa kartveliana, se marchó lesionado cercana la media hora de juego. En un desborde, Azarov le pisó el tobillo y el jugador del Barça se quedó sentado sobre el césped. Finalmente, se tuvo que retirar, y en su lugar entró Oihan Sancet, del Athletic Club. Poco tiempo después se dio a conocer que la lesión estaba posiblemente relacionada con el cruzado.
España contó con varias ocasiones para poner el 2-1, como una gran falta de Fabián que Mamardashvili despejó a córner, o un centro a media altura de Ferrán que Morata remató a bocajarro, pero de nuevo el meta ché evitaría el gol.
Kverkvelia y Kashia achicaban agua como podían, en un bombardeo constante de la Selección Española que no encontraba el premio del gol, pero cada vez hundía más a la línea defensiva transcaucásica sobre su arco. Las únicas opciones de la Selección Georgiana residían en las contras lideradas por Mikautadze y Kvara, pero ninguna llegó a intimidar al conjunto español.
Finalmente, tras tres minutos de añadido, ambos combinados nacionales se marcharon a vestuarios con el 1-1 en el marcador. Mucho que hablar en vestuarios para intentar llevarse el triunfo durante el segundo tiempo.
Segunda parte: España remata el trabajo
La Selección salió como un tiro en la segunda parte. El entreacto sirvió para que Luis de la Fuente tocara con la tecla y activase a los jugadores para la segunda mitad, pues la reacción de España fue instantánea. Mamardashvili se tuvo que lucir con una preciosa estirada para evitar que un potente cabezazo de Rodri acabara en el fondo de las mallas georgianas, pero poco pudo hacer en la siguiente llegada de los locales.
Gayà oteó a Ferrán en el segundo palo, y puso un precioso centro para que Ferrán rematara en el área chica, esta vez sin oportunidad alguna para Mamardashvili, que solo pudo contemplar como España se adelantaba nuevamente en el marcador.
Willy Sagnol decidió que era el momento para introducir los primeros cambios del partido, y sustituyó a Mikautadze y Kverkvelia por Davitashvili y Mekvabishvili, en un intento por volver a empatar el partido. De la Fuente también movió ficha y sustituyó al goleador Ferrán Torres por Lamine Yamal, momento que el Zorrilla aprovechó para ovacionar a los dos cracks del FC Barcelona.
Davitashvili tuvo su primera intervención en un pase largo de Kochorashvili, que le dejó frente a Unai Simón, pero el guardameta vasco estuvo atento y se tiró al suelo para atrapar el balón apenas unas milésimas de segundo antes de que el delantero kartveliano pudiera controlar.
El encuentro bajó de revoluciones y derivó a un terreno más lógico de dominancia española, que en consonancia acabaría con el tercero de La Roja. En el minuto 70’, el recién entrado Lamine Yamal colgó desde el balcón del área un centro que Lochorashvili intentó despejar pero que acabó introduciendo en su propia meta, para desconcierto de Mamardashvili, que no esperó el cambio de dirección y por tanto le fue imposible detener el rechace.
Georgia había mantenido la compostura hasta el momento, intentando varias contras encabezadas por Kvaratskhelia, pero el tercer gol acabó con cualquier atisbo de esperanza visitante. Aún así, de la Fuente instó a los suyos a bajar el ritmo y Georgia contó con sus primeras posesiones largas. Willy Sagnol decidió sustituir a Azarov, que estaba haciendo un partido magnífico, a pesar del choque con Gavi, por Gocholeishvili. El resto de minutos fueron un pleno trámite, solo destacables por las sustituciones de Williams y Rodri, que dejaron sus puestos a Riquelme y a Zubimendi respectivamente.
El MVP, va sin duda alguna para Ferrán Torres. El tiburón estuvo muy enchufado durante la totalidad del partido, y fue el encargado de dar la asistencia a Robin Le Normand en el primer gol, y de después anotar el segundo con un gran cabezazo. Partidazo también de Rodri, muy activo en el mediocampo y clave para el triunfo de España.