La silla caliente de la selección de España ha sido ocupada por un entrenador capacitado, con una personalidad fuerte, con experiencia, y una impecable hoja de vida. Luis Enrique fue el escogido para tomar las riendas del equipo dejado por Julen Lopetegui y posteriormente por Fernando Hierro. El ex entrenador del Barcelona tiene la difícil misión de dar continuidad a una dura transición que está buscando la Federación Española, de lo que fue la etapa de éxitos con Aragonés y con Del Bosque para pasar a otra etapa que brinde éxitos pero con un estilo más acorde a la nueva generación.
Así, el primer reto del entrenador será preparar a su equipo para afrontar la novedosa Liga de Naciones de la UEFA que dará inicio en el mes de septiembre. La competencia tendrá un formato de cuatro ligas compuestas por diferentes grupos en los que se acomodan los seleccionados nacionales según su coeficiente UEFA. Este torneo será el encargado de determinar los últimos cuatro puestos para la Eurocopa de 2020.
Los ganadores de cada grupo se enfrentaran contra los demás ganadores de grupo de sus respectivas ligas y quien salga ganador de esos play-offs será el clasificado para la Eurocopa. Además, el ganador del play-off de la Liga A será reconocido como el campeón de la Liga de Naciones.
En este sentido, la misión para Luis Enrique —quien firmó una vinculación con la RFEF de dos años, es decir hasta la Eurocopa de 2020— será levantar la cabeza del equipo, renovar el estilo y hacer el papel esperado de la selección española en la Liga de Naciones. Por esto, el nuevo estratega deberá comenzar a diseñar y poner en marcha su plan en el menor tiempo posible.
Calendario y rivales
La selección de España tendrá como rivales a dos de los semifinalistas del Mundial 2018, a Inglaterra y a Croacia en el Grupo A4, es decir el cuarto grupo de la Liga A. El equipo ganador del grupo se clasificará al play-off, mientras que el último del grupo descenderá a la Liga B donde hay naciones como Rusia, Suecia o Ucrania.
No será un grupo fácil, por supuesto. Los ibéricos se podrían medir ante el campeón del mundo en caso de que Croacia venza a los franceses y contra el tercero del mundial en caso de que los ingleses derroten a Bélgica.
Los encuentros se disputaran en los meses de septiembre, octubre y noviembre del presente año, teniendo en cuenta que se jugarán seis encuentros de un ‘todos contra todos’ con un estilo de ida y vuelta, tal como ocurre en competencias como la Champions League.
El primer duelo de los españoles será a comienzos del mes de septiembre visitando a la Inglaterra de Harry Kane y Raheem Sterling en Wembley. Para esto deberá prepararse inicialmente Luis Enrique, para enfrentar a un equipo que juega con tres defensores centrales, con carrileros y dos puntas de características muy dispares. Tiene como referencia el último encuentro que España jugó ante una defensa de cinco, el partido de octavos contra Rusia. Si bien los rusos y los ingleses tienen muy poco en común a la hora de hablar de estilos y estrategias, será un punto de partida importante para analizar los movimientos defensivos.
Posteriormente, recibirá a la selección de Croacia el 11 de septiembre, en un duelo de características muy diferentes al que puede ser contra los ingleses. El fútbol de los croatas será influenciado directamente por lo que Modrić y Rakitić produzca en la medular y por el constante peligro que significa tener a Perisić y Mandžukić moviéndose delante de la defensa.
Finalmente, para cerrar el grupo las localías rotaran. Inglaterra visitará a los españoles en la tercera fecha el 15 de octubre y Croacia recibirá a los de Luis Enrique el 15 de noviembre para terminar como la presentación española en la fase de grupos de la Liga de Naciones. El grupo terminará tres días después con un duelo entre Inglaterra y Croacia en terreno británico.
¿Qué puede ocurrir?
Los de Luis Enrique tienen tres posibilidades en su participación en la Liga de Naciones. Primero, y en el escenario más positivo, se pueden clasificar en el primer puesto del grupo, entrar a los play-offs y luchar contra los demás ganadores de los otros grupos. Estos pueden ser equipos como Italia, Portugal, Alemania o Francia, entre otros. En este caso, los play-offs se jugarían en el mes de junio de 2019. Segundo, podrían quedar en la segunda posición del grupo, lo cual implica que se mantienen en la Liga A para la siguiente edición del torneo. Finalmente, podrían terminar últimos del grupo y descender a la Liga B, algo que seguramente querrán evitar.