Hay momentos en la vida en los que parece que la luz que ha estado alumbrando desde los inicios cada rincón comienza a apagarse. Unas veces lo hace de repente y otras, gradualmente. Si lo hace gradualmente, uno empieza a perder visibilidad aunque, con esfuerzo, entornando los párpados, consigue percibir el lugar en el que se encuentra y cómo los objetos están distribuidos por el espacio para no chocar o tropezar fácilmente. Sin embargo, finalmente se acabará apagando, produciendo una oscuridad total, negra como el tizón e inquietante por momentos. De este modo, la única vía para poder abandonar ese estado de vulnerabilidad es intentar hacer que se vuelva a encender, a pesar de que para ello haya que tantear y, en muchas ocasiones, chocar, golpearse o caerse. Pero, al final de todo, quedará encendida y volverá a iluminar la habitación.

Esta metáfora es la que mejor define el estado actual del Granada CF. Un equipo que visualizaba con total claridad la manera para vencer en cualquier situación y ante cualquier rival, pero que, desde hace algunas semanas, en concreto tres, parece que ha perdido la luz, y ahora está intentando encenderla con bastantes obstáculos que obstaculizan, valga la redundancia, el camino hacia el interruptor, dejándose así puntos que parecían asequibles por el camino. Todo comenzó en la jornada décimo tercera, donde el conjunto andaluz se dejó dos puntos en el Nuevo Los Cármenes ante el CD Numancia, que colocó la muralla soriana para drenar el ataque de los nazaríes. Seguidamente, la UD Las Palmas estuvo a punto de derrotar a los rojiblancos en el archipiélago canario, pero un tanto tardío de Rodri Ríos terminaba dando un punto para el Granada CF. Por último, la semana pasada, el Real Sporting derrotó a los andaluces en su propio feudo, lo que provocó la primera derrota de los granadinos en la ciudad de la Alhambra esta temporada, e hizo gala del dicho ‘entrenador nuevo, victoria segura’ en un encuentro cargado de polémica arbitral.

Foto: Antonio L. Juárez / VAVEL Granada
Foto: Antonio L. Juárez / VAVEL Granada

 

Debido a estos tres últimos resultados, al Granada CF se le apagó la luz del liderato y se sumió en una oscuridad momentánea que lo ha relegado al cuarto puesto de la tabla. No obstante, el próximo sábado se presenta una gran oportunidad para demostrar que la luz no se ha disipado del todo. El próximo sábado se producirá un partido que estuvo cargado de rivalidad en el siglo pasado, aunque ahora se respire un aire de cordialidad y de hermanamiento. Efectivamente, un derbi histórico de Andalucía: un Málaga CF – Granada CF. Así, los nazaríes visitarán a los boquerones en La Rosaleda, un estadio muy complicado en el que ningún rival ha conseguido arañar ningún punto en lo que va de liga. Por otro lado, los blanquiazules también se encuentran en una parcial oscuridad, ya que, aunque se sitúan un punto por encima de los granadinos, no han podido ganar fuera de casa desde septiembre y se presentarán ante su público tras perder en Almendralejo por la mínima contra el Extremadura U. D. Con estos precedentes, el tercero de la clasificación recibirá al cuarto, el cual intentará cortar su racha de tres partidos sin ganar para reencontrarse con los tres puntos y superar así a los malagueños.

Foto: LaLiga
Foto: LaLiga

Además, los de Diego Martínez tendrán una nueva oportunidad para dar un golpe sobre la mesa en cuanto a la lucha por el ascenso directo a la Liga Santander. De esta forma, el Granada CF tratará de derrotar a un equipo de la parte alta, cosa que parece ser complicado esta temporada. Esto se debe a que el conjunto rojiblanco tan sólo se ha alzado con la victoria ante un ‘rival directo’, de los de arriba de la tabla, en lo que llevamos de liga. Fue a mediados del mes de octubre, en el feudo granadino, donde el sevillano Alejandro Pozo anotó un auténtico golazo tras una dejada de tacón de Álvaro Vadillo frente al RCD Mallorca, que actualmente marca la separación que hay entre los puestos de playoff y el resto de la tabla. También cuenta con un empate a domicilio ante la UD Las Palmas anteriormente mencionado y, por último, dos derrotas lejos de la ciudad andaluza ante los equipos que ocupan las plazas de ascenso directo. Por un lado, el líder, la AD Alcorcón, que derrotó al Granada CF con un gol de Juan Muñoz, tras un polémico penalti por mano de Álex Martínez; y, por otro, el RC Deportivo de La Coruña, que batió por dos goles a uno a uno a los rojiblancos, que pecaron de timidez en su visita al estadio de Riazor.

Foto: Antonio L. Juárez / VAVEL Granada
Foto: Antonio L. Juárez / VAVEL Granada

Por este motivo, el Granada CF espera cortar su mala racha ante los equipos de arriba el próximo domingo en Málaga, deteniendo así la oscuridad que ha mermado al equipo en las últimas jornadas y volviendo a ganar como única vía para recuperar la luz que le pueda guiar hacia los requeridos y competidos puestos del ascenso directo.