Arturo Vidal y el Fútbol Club Barcelona han separado este domingo sus caminos después de hacerse oficial la marcha del centrocampista chileno al Inter de Milán por un precio de 500.000 euros más variables. Tras dos temporadas en el Camp Nou, donde se ha erigido como revulsivo en el centro del campo, el ya exfutbolista culé vuelve a Italia cinco temporadas después de dejar la Juventus de Turín en 2015 para fichar por el Bayern de Múnich.
El "rey" Arturo aterrizó en Can Barça en verano de 2018 por una cifra cercana a los 20 millones de euros, una cantidad que la directiva presidida por Josep Maria Bartomeu abonó al conjunto alemán con el objetivo de aportar músculo a la medular y reforzar cualitativamente al equipo que dirigía entonces el "Txingurri" Ernesto Valverde. Desde entonces, el chileno ha disputado a sus 33 años un total de 94 partidos con la zamarra azulgrana y ha celebrado once goles, que avalan su condición de llegador.
Con la llegada de Ronald Koeman al banquillo catalán, la remodelación en la medular pasa por prescindir de futbolistas como Vidal, que a su vez ostenta una alta ficha de la que el club blaugrana no puede hacerse cargo. Antes de oficializarse el fichaje, el propio jugador hacía un video dirigido a su nueva afición, la neroazzuri, que daba por hecho su llegada conjunto interino, donde firmará por dos temporadas más una opcional. Además, algunos de sus compañeros y amigos como Leo Messi o Luis Suárez le despedían con un mensaje en sus redes sociales. Tras su paso por el Barcelona, esta será la segunda aventura de Arturo Vidal en la Serie A después de su paso por la Juventus donde estuvo cuatro campañas, entre 2011 y 2015.