La noche del sábado 13 de agosto el Barça disputaba ante el Rayo Vallecano la primera jornada de La Liga Santander, el Spotify Camp Nou acogía un duelo intrigante para la afición azulgrana que llegaba ilusionada al estreno del campeonato liguero.

Xavi Hernández no sorprendía con el once inicial y apostaba por una alineación que había rendido muy bien durante la pretemporada. Sin embargo, el equipo careció de muchas cosas vistas durante los partidos amistosos y a pesar de que pudo acabar ganando el partido, lo cierto es que el Rayo le plantó cara y mereció el punto logrado en el feudo azulgrana.

Una delantera que debe conectar 

En lo colectivo, al equipo le faltó más conexión, algo que a estas alturas de la temporada y con la cantidad de incorporaciones nuevas, es normal. De hecho, en la delantera debutaban de manera oficial dos de los tres jugadores titulares, Lewandowski y Raphinha. Con lo cual, la zona más determinante del campo y la que en su mayoría es la encargada de definir los partidos estaba poco rodada. El mejor de los de arriba fue el atacante polaco, disputó todo el partido y estuvo muy participativo tanto en zonas cercanas al área rival, como en zonas de creación, bajando a recibir constantemente. No fue su partido más brillante, pero para nada fue un mal debut, hasta llegó a marcar gol definiendo con una vaselina de mucha clase, aunque estaba en posición adelantada y el tanto no subió al marcador

El centro del campo habitual

En la medular, partieron de titulares Busquets, Gavi y Pedri, como se contaba anteriormente, los problemas del Barça ante el Rayo fueron colectivos y no tanto de actuaciones individuales. Ninguno de ellos quedó especialmente señalado, los dos jóvenes interiores conectaron bien con los de arriba, pero faltó creatividad en los metros finales. Por su parte, Busquets no hizo un mal partido, como es habitual, siempre bien colocado en la salida de balón, el problema para el capitán llegó cuando el equipo no dominaba el esférico. El de Badía sufrió sin el esférico y llegaba tarde a muchas acciones, lo acabaría pagando siendo expulsado en el noventa por doble tarjeta amarilla. 

Una pareja de centrales llama a la puerta

En la zona defensiva se encontraron tanto aspectos positivos como negativos, la pareja de centrales estaba compuesta por Christensen y Eric García. Ambos rindieron muy bien para el poco tiempo que llevan jugando juntos, el danés se mostró muy seguro con y sin balón, conducía y distribuía el esférico por el Camp Nou como si llevará años haciéndolo y cortó varias acciones de peligro. Por otro lado, Eric también ofreció un gran rendimiento, sobre todo con la pelota en los pies, todavía genera algo de inseguridad a la hora de defender, pero dejó acciones defensivas más agresivas de lo habitual.

Urgen laterales en Can Barça

Si algún jugador salió especialmente señalado ayer este fue Jordi Alba, el de Hospitalet sigue generando muchas dudas, sobre todo en defensa y cuando en ataque no está inspirado las carencias defensivas se hacen notar aún más. Fue sustituido en el minuto 83, mostrándose muy fatigado. Y cerrando la defensa, en el lateral izquierdo estaba Ronald Araujo, a falta de incorporar a un lateral de garantías y sin confiar en Dest, Xavi apostó por colocar al uruguayo en el carril derecho. Como ya tiene acostumbrado a la afición, su trabajo en defensa fue prácticamente impecable, aunque no estuvo muy exigido. En ataque es donde genera más dudas su posición, ya que en el sistema del Barça y especialmente de Xavi los laterales son claves en el ataque, y Araujo carece de condiciones ofensivas para desempeñar esa función. Para partidos concretos y más exigidos a nivel defensivo puede ser una buena solución, pero ante equipos más cerrados su aportación disminuye. Y cerrando el once titular con la portería, Ter Stegen ofreció un gran nivel evitando el gol visitante en un mano a mano muy claro. Más allá de esa acción, no tuvo más exigencias, con los pies estuvo efectivo y no cometió errores clamorosos. 

Muchas variantes en el banquillo

Del banquillo saldrían, De Jong, Ansu Fati, Sergi Roberto, Aubameyang y el debutante Kessie. Ninguno pudo aportar soluciones para deshacer el empate. Destacar a De Jong, que en medio de los rumores sobre su salida no pareció afectado y tuvo una buena actuación. Kessie llegó a marcar, pero también quedaría invalidado por fuera de juego. Ansu gozó de una buena oportunidad, pero su remate los desvió Dimirievski.

Tras analizar línea por línea el rendimiento de los jugadores azulgranas en el encuentro ante el Rayo, queda claro que Xavi Hernández tiene mucho trabajo por delante. Las piezas las tiene y la plantilla parece muy compacta para rendir a un gran nivel, ahora solo queda encajar esas piezas y encontrar los esquemas correctos para evitar que partidos así se atasquen.