Año nuevo, vida nueva. O eso debió pensar el Arenas tras la mala racha de resultados cosechados en los últimos 9 partidos de 2017. En frente, un Racing en busca de la regularidad que no consiguieron en el tramo final del pasado año. Los tantos de Aitor Ramos y Borja Granero en propia meta permitieron al Histórico llegar con dos goles de ventaja al marcador. César Díaz acortó distancias en el primer minuto del segundo tiempo, pero en los últimos minutos Ian Uranga sentenció con gran cabezazo.
El once de Bolo no dejó indiferente a nadie. El técnico local apostó por un cambio en la portería: Pablo Fid, que jugó su segundo partido de la temporada, entró en detrimento del habitual Txemi. Jordan retrasó su posición para actuar de lateral derecho, y Cristóbal ocupó el lugar de Dani López.
Viadero, en cambio, tan solo introdujo dos novedades con respecto al último partido del conjunto santanderino en Irún, donde se impusieron por 1 gol a 3: entraron en el once Antonio Tomás y Quique Rivero en el lugar de Gándara y Córcoles.
El Arenas supo sufrir
El partido comenzó con un Racing intenso, sin ceder a la presión local y con ganas de ir a por el partido. Los cántabros dispusieron de dos ocasiones en los primeros minutos, pero primero Edu Luna y después Pablo Fid impidieron que los visitantes se adelantasen en el marcador. El que finalmente abrió el marcador fue Aitor Ramos, que se anticipó a la zaga rival para cabecear a la red un centro medido desde la derecha de Ian Uranga y poner así el 1-0 en el marcador.
Con el gol, el Arenas cogió aire y niveló el control del partido. La intensidad fue la tónica dominante un primer tiempo en el que las ocasiones brillaron por su ausencia. Aun así, al filo del descanso el Histórico consiguió ampliar la ventaja. En un córner desde la derecha botado por Royo, Granero cabeceó involuntariamente hacia su propia portería, haciendo el segundo tanto del encuentro.
Tras el descanso, Viadero realizó una doble sustitución: dio entrada a César Díaz y Álex García y retiró a Juanjo y Héber. Y obtuvo sus frutos. En la primera jugada tras la reanudación, el balón le llegó a Óscar Fernández en la banda derecha y, tras ganarle la espalda a Royo, puso un centro raso para que el recién entrado César Díaz rematase a placer entrando desde atrás.
Jugadores y aficionados creyeron en la remontada, y aunque fueron superiores durante el segundo tiempo, no llegaron a incomodar a la zaga rojinegra. A falta de 20 minutos para el final, Viadero decidió quitar a Sergio Ruiz para dar entrada a Pau Miguélez, y el Racing pasó a jugar con defensa de 3.
Como era de esperar, los de Santander se fueron al ataque en busca del empate, pero el Arenas supo defenderse y salir atacando los espacios. En una de esas salidas, Uranga se anticipó a la defensa para hacer el tercero de cabeza tras un buen centro desde la izquierda. El gol dejó muy tocado al conjunto santanderino, que terminó el partido desalmado y con una tremenda bronca de su afición.
Dulce victoria
Los empates y derrotas en sus respectivos partidos de los equipos que ocupan los puestos de descenso permiten al Arenas coger aire de cara a los próximos partidos. Los de Gobela llevaban 9 jornadas sin conseguir los 3 puntos, y esta victoria les coloca en la decimotercera posición, con 23 puntos, con 3 de ventaja respecto al puesto de play-out. La próxima jornada los de Getxo visitarán a una Peña Sport que suma ya tres empates consecutivos.
El Racing, por su parte, pierde una clara ocasión de acercarse al liderato, ya que el Mirandés cayó en casa ante el Leioa. Los de Ángel Viadero se mantienen con 37 puntos en tercera posición y la próxima jornada recibirán en El Sardinero al Gernika de Jabi Luaces.
El Racing jugó "en casa"
Más de 300 aficionados recorrieron los 100 kilómetros que separan Getxo de Santander para apoyar a su equipo. A pesar de que no dejaron de animar durante todo el partido, el equipo no estuvo a la altura y la hinchada comenzó a mostrar su descontento tras el tercer tanto del Arenas.
Con el pitido final, se escucharon cánticos como "Viadero dimisión", "esta camiseta no la merecéis" o "los mercenarios se tienen que marchar". A pesar del profundo enfado de los aficionados verdiblancos, los jugadores se acercaron a aplaudir a los suyos, y éstos les devolvieron los aplausos al retirarse a los vestuarios.
Viadero y su cuerpo técnico decidieron no comparecer ante su afición y se retiraron a los vestuarios nada más pitar el final.
Puntuaciones Vavel
| Ian Uranga | 3 puntos |
| Edu Luna | 2 puntos |
| César Díaz | 1 punto |