El actual campeón del mundo Sébastien Oiger ha admitido que la actuación del piloto británico Kris Meeke durante las dos primeras jornadas del rallye, le obligó a no  poder relajarse en ningún tramo restante del fin de semana. 

Ambos  pilotos se disputaron el liderato de la prueba en lo que sería los primeros tramos del Mundial de Rallyes 2016. Aunque el piloto de casa lograba una ventaja de 30 segundos antes del abandono de Meeke, aseguró que esa distancia nunca le permitió sentirse a seguro. 

“En condiciones normales sobre asfalto, si tienes una ventaja de 30 segundos, es una gran diferencia y es difícil que te alcancen, por lo que puedes empezar a pensar en la victoria. Pero en Monte Carlo una elección de neumáticos incorrecta o si tu rival corre más riesgos en las zonas con hielo, puedes perder rápidamente 30 segundos”, ha comentado.  

Al primer  abandono de la temporada para  Kris Meeke, Citröen Abu Dhabi, en el TC-12A por problemas mecánicos había que sumarle también los desajustes mecánicos que sufría el  Volskwagen Polo R WRC número 2, pilotado por Jari Matti Latvala y, que le obligaba a tener que  abandonar la primera prueba del mundial y cederle el segundo puesto  al noruego Andreas Mikkelsen que lo mantendría hasta el final. 

“Kris estaba haciendo un gran trabajo. Tuvo un ritmo muy fuerte y cada vez que me relajaba o me tomaba un tramo con más precaución se colocaba por delante”. 

De esta manera el piloto de francés obtenía una ventaja de casi dos minutos  para afrontar la última jornada y su cuarta victoria en el Monte, tercera consecutiva.

“Fue emocionante y una lástima que no pudiéramos luchar hasta el final del rallye. Fue pura mala suerte lo que le pasó. Por otro lado, a partir de entonces pude controlar la carrera y correr de forma más fácil el último día”, ha añadido Ogier