El norteamericano Jack Sock, actual número 22 del ránking ATP, alcanzó por segunda vez consecutiva los cuartos de final del último Masters 1000 de la temporada, París-Bercy, tras su victoria en dos sets ante el tenista local Lucas Pouille, cuatro posiciones más arriba que su verdugo de hoy pero que logró entrar del todo en un encuentro dominado casi en su totalidad por el estadounidense. 

Más consistente Sock, que acabó con 21 golpes ganadores por 25 errores no forzados, nueve menos que los que realizó PouilleSock, que ayer remontó un 5-1 en el tercer set ante el británico Kyle Edmund, siempre se mostró más consistente que un Pouille que volvió a demostrar que es capaz de lo mejor y de lo peor. El francés, que venía en racha tras ganar la semana pasada en Viena, es un tenista de sensaciones y hoy no las encontró casi en ningún momento. Con su primera doble falta del partido, Pouille cedió su servicio en el tercer juego del primer set (2-1) permitiendo a Sock coger la iniciativa del encuentro demasiado pronto. 

El estadounidense mantuvo sin mayores problemas su ventaja hasta que le tocó cerrar, momento en el que su brazo se encogió. Merced a varios errores con su mejor golpe, la derecha, perdió su servicio y su primera ocasión de cerrar el set (5-5). La muerte súbita fue un auténtico cara o cruz. Ambos tenistas mostraron sus nervios y la balanza no terminaba de decantarse hacia uno u otro lado. Un 'smash' garrafal a la red por parte de Sock parecía darle el set a Pouille que servía con 6-5 para ganarlo pero el de Nebraska obró la remontada y con tres puntos consecutivos se llevó finalmente el juego decisivo por 8-6

Sock no baja el ritmo y cierra por la vía rápida

La tónica del partido no cambió en absoluto en el segundo set. El ritmo brillaba por su ausencia (sólo ocho puntos por encima de nueve golpes) y también lo hacía Pouille que seguía con muchos problemas para encontrar algo de consistencia en su juego. El galo volvió a ceder su servicio en el cuarto juego para recuperarlo inmediatamente pero no fue capaz de controlar sus nervios y con otra doble falta regaló el 'break' a Sock que, esta vez, no lo desaprovechó para sellar su triunfo con un servicio en blanco (6-3). 

Como decíamos, la derrota de Pouille tiene sus consecuencias. La primera para el propio Lucas, que se queda ya sin opciones de pelear por acceder a las Nitto ATP Finals de Londres. Una plaza que ya tiene asegurada el belga David Goffin que, pese a perder hoy contra Julien Benneteau, se ha garantizado su presencia por la derrota, precisamente, de Pouille, un enemigo menos para el español Pablo Carreño.