Radu Albot consiguió una trabajada victoria en la segunda ronda del torneo de Delray. El moldavo superó en tres mangas a un apático Nick Kyrgios (6-2, 3-6, 6-3). Tras su ajustado triunfo ante su compatriota John Millman, Kyrgios sigue sin levantar el vuelo, o al menos sin dar la sensación de querer levantarlo.

El primer set apenas tuvo historia. Ambos tenistas parecían arrancar el partido de forma normal, pero enseguida Kyrgios regaló dos juegos consecutivos con su saque, lo que significó un 5-1 a favor de Albot, una renta más que suficiente para apuntarse el primer parcial en apenas 23 minutos.

La segunda manga parecía seguir el mismo camino que la anterior. Kyrgios siguió haciendo de las suyas y salvó hasta tres bolas de rotura en el quinto juego. Sin embargo, a partir de ese momento el australiano cambió por completo la dinámica del partido y se hizo con el control. Albot no fue capaz de gestionar este cambio de guión y vio como su rival le empezó a crear problemas al resto hasta que en el octavo juego llegó el break y a continuación el set para el tenista australiano.

Todo parecía de cara para Kyrgios, pero en el tercer set volvió a aparecer la peor versión del australiano, una parecida a la de los primeros compases del choque. Al otro lado, Albot supo mantener la regularidad y esperar su oportunidad. Esta no tardó en llegar y el moldavo no la iba a dejar escapar. En el tercer juego llegó el break, que acabaría siendo definitivo porque de ahí al final del encuentro, el australiano solo fue capaz de ganar un punto al resto.

Tras esta victoria, Albot se medirá en cuartos de final a Steve Johnson. El norteamericano, que no mostró su mejor versión de juego, consiguió ganar en el primer encuentro de la jornada al italiano Paolo Lorenzi (7-5, 7-5) en algo menos de dos horas de partido.