Poco más de setenta y dos horas. Este es el tiempo que falta para que el balón eche a rodar en el Carlos Tartiere y se suba el telón de un derbi que, a pesar de que no vaya a ser decisivo desde el punto de vista clasificatorio, se antoja trascendental para el futuro de ambos equipos. Juan Antonio Anquela y Rubén Baraja son los dos nombres propios del encuentro. Una derrota de sus respectivos equipos podría provocar que tuvieran que hacer las maletas y abandonar los banquillos asturianos.
“El equipo cree en el trabajo del míster y estamos todos con él”, señalaba esta mañana en la sala de prensa de Mareo un Carlos Carmona que considera “que estamos haciendo un buen trabajo, solo falta que se traduzca en triunfos”.
El balear ha aprovechado la comparecencia para frenar toda la polémica que han suscitado sus declaraciones del pasado domingo, nada más terminar el partido contra el Málaga. “No veo que nos metan cuatro goles”, decía Carmona en una entrevista a pie de campo. Después de recibir muchas críticas de la afición oviedista, el jugador rojiblanco ha explicado sus palabras: “Mis palabras no iban dirigidas al Real Oviedo, jamás en mi carrera he hablado mal de ningún compañero ni de ningún equipo”, aclaraba el centrocampista del Sporting. Visiblemente enfadado manifestaba que “se ha hecho bombo porque es prensa. En ningún momento hablaba del otro equipo, solo del mío. Bastante violencia hay en el fútbol como para seguir fomentándola”. “Hay que cortar este tipo de cosas”, concluía Carmona para zanjar el asunto.
Tras lograr un doblete que suponía el empate ante el Málaga, el de Palma tiene “muchas ganas de hacer un buen partido y cambiar la dinámica. Creo que es un escenario perfecto para conseguir la victoria y comenzar una buena racha”. A pesar de que Oviedo y Sporting están rozando la zona baja de la tabla, “un derbi siempre es especial” y “este año firmo no marcar y ganar el partido”, explicaba Carmona entre risas.
La sesión de esta mañana ha estado marcada por el regreso de Canella, que se disputará con Javi Noblejas un puesto en el lateral izquierdo. También Dani Martín, Pelayo Morilla y Geraldes, que ayer sufría un proceso vírico, han vuelto a ejercitarse junto al resto de sus compañeros. La ausencia ha sido la del central francés Peybernes, a día de hoy la única baja con la que cuenta Rubén Baraja. El Sporting volverá mañana a los entrenamientos a partir de las 10:30 horas a puerta cerrada en Mareo.