El Real Madrid perdió ante el FC Barcelona en el Camp Nou en un partido que se decidió en el último minuto de partido tras un gol de Kessié que deja sentenciada LaLiga. Se sitúan a 12 puntos de los culés a falta de 12 partidos, unos números que nunca ha dejado escapar un líder del campeonato a falta de tan pocos partidos.

Un partido horrible de los blancos, que se han visto superado por el Barcelona en el segundo tramo de la temporada. Una derrota en la Supercopa de España, otra en la Copa del Rey y esta última en LaLiga que para Xavi es más que una victoria sino que un golpe sobre la mesa, dejando claro que el Barcelona está de vuelta.

Pese a irse al descanso con un empate, el partido de los hombres de Carlo Ancelotti estaba dejando mucho que desear y con un patrón que se esta repitiendo en el club blanco en estos últimos meses. Un Karim Benzema apagado y tirando de las brillanteces de Courtois y Vinicius. Una estrategia que deja malas sensaciones para un equipo que aspira a todo.

Cambios en el segundo tiempo

Tras el comienzo de la segunda parte, el sembró la locura en el terreno de juego y pasó de ser un partido táctico a un correcalles donde de normal el Real Madrid es el beneficiado de este estilo de partido. Por ello, Ancelotti decidió hacer cambios y sacar a jugadores hábiles y con potencia para correr arriba y abajo. Los cinco cambios fueron; Ferland Mendy, Aurélien Tchouameni, Dani Ceballos, Marco Asensio y Rodrygo Goes. Todos y cada de uno de ellos han dado que hablar tras la conclusión del choque, sea por sus buenas o malas cualidades en el encuentro.

Especialmente el primero, Mendy, pero de manera negativa, ya que falló en el gol de Kessíe, dejando al costamarfileño libre de marca para rematar el pase de Balde. Un fallo crítico que le puede costar mucho mas que tres puntos. Podría significar la perdida de puesto en el lateral izquierdo en el que se estaba por terminando consagrar Nacho. Por suerte para el francés, Nacho se perderá el próximo partido debido a que cumple ciclo de tarjetas por lo que podría ser su última bala para demostrarle a Ancelotti que vale para el equipo.

Ceballos salió como ha jugado estos últimos meses, enchufado. El mediocentro tenía la tarea de dar energía a sus compañeros y lo consiguió. Tras su entrada al campo, el Real Madrid se reenganchó al partido y comenzó a lanzar contraataques con mas frecuencia y dominar tramos de la segunda parte. Fue el artífice de la jugada anulada de Asensio tras un corte de balón estratosférico y empezando la jugada que mas adelante sería anulada. No obstante, el andaluz dejó destellos por el campo y volvió a demostrar que tiene calidad para ser titular en el Real Madrid.

Asensio fue más de lo mismo. Entró al campo enfocado y con ganas de reivindicarse tras su ausencia durante estos últimos partidos. De hecho, casi lo consiguió con un gol cuando entraban en la recta de final de partido si no fuera porque el VAR intervino y anuló el gol por milímetros. A pesar de ello no dejó de intentarlo con disparos lejanos, conduciendo el balón a galopadas y repartiendo el juego.

Por último, Rodrygo. El brasileño es el revulsivo perfecto para Ancelotti, ya que posee una conducción eléctrica, un buen disparo y una asociación que busca el técnico italiano. De sus botas salió la conducción por la banda izquierda y la pre-asistencia al gol anulado de Asensio.

Reflexión y a continuar

Este partido es un reflejo de la temporada del Real Madrid. Un partido sin ideas y rezando a que los revulsivos marquen la diferencia en los últimos instantes. Sin embargo, está vez han sido los blancos quienes han saboreado la derrota.

El mes que se le avecina al Real Madrid es importante, se juega ambas competiciones en las que siguen vivos, la Copa del Rey y la Champions League. Ancelotti deberá rotar más y usar los revulsivos como titulares si quiere tener alguna opción de llegar frescos a final de temporada.