El argentino que hoy ocupa la posición 42 del ranking ATP, no sufrió complicaciones y sin mucho desgaste, avanzó a los octavos de final del torneo estadounidense luego de vencer a Kevin Anderson por 6-4 y 6-4 y estiró su ventaja sobre el sudafricano: el tandilense está seis a cero en el frente a frente.

La Torre de Tandil dejó atrás un año lleno de emociones y de grandes cosechas que invitaron a sus fanáticos a ilusionarse y a soñar con un 2017 que tenga a Juan Martín como protagonista en los grandes eventos. El argentino llegó al torneo de Derlay Beach luego de conseguir grandes triunfos en los Juegos Olímpicos, en el que derrotó nada más ni nada menos que al entonces número uno del mundo, Novak Djokovic, en primera ronda y a Rafael Nadal en semifinales, para luego perder en la final con el escocés Andy Murray en un partidazo y colgarse en su cuello la medalla de plata.

Luego de su excelente paso por los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro, Del Potro  se vistió de héroe y consiguió poner a la Argentina en lo más alto del tenis mundial: venció a Andy Murray en la semifinales de la Copa Davis en un impresionante partido a cinco sets y luego, en la final, sacó adelante un partido que parecía no tener vuelta atrás y tras una dura batalla, derrotó al croata Marin Cilic por 6-7, 2-6, 7-5, 6-4 y 6-3 para dejar a su país a un solo partido del título, que luego concretaría Federico Delbonis.

Con estos prometedores antecedentes en el pasado año y dejando atrás las graves lesiones que hasta llevaron al tandilense a replantearse su continuidad en el tenis profesional, Juan Martín Del Potro se puso en marcha y disputó su primer partido de lo que va del año. Sin jugar un tenis deslumbrante pero sí, siendo muy superior a su rival, el argentino tuvo un buen debut en Derlay Beach  - donde fue campeón en 2011-, y avanzó a la siguiente ronda del certamen de los Estados Unidos, en menos de una hora y media.

Kevin Anderson, que llegó a colocarse dentro de los diez mejores del mundo en el 2015 llegó al cruce con el argentino  luego de su paso por el ATP 250 de Memphis: el sudafricano no tuvo un buen andar y fue derrotado en la primera ronda del torneo en manos de Damir Dzumhur en un partido muy disputado.

Del Potro no tuvo un buen día con su saque -alcanzó tan solo un 59 % de primeros servicios-, pero Anderson no fue capaz de aprovechar esos desaciertos y solo pudo ocasionar una oportunidad de quiebre en todo el partido. El primer set se caracterizó por peloteos cortos, sin mucha intensidad y con el argentino queriendo tomar la iniciativa con su principal arma: la derecha. El andar del partido le permitió al argentino no desgastarse más de la cuenta y aprovechar el momento oportuno para romper el servicio del sudafricano. En el 3-3, el ex top cuatro, necesitó recurrir a cuatro chances de quiebres para conseguir la rotura y tomar una ventaja definitiva en el set que se acabaría llevando por 6-4.

Ya en el segundo set, el tandilense fue entrando en ritmo, comenzó a jugar más suelto y poco a poco fue reencontrándose con su juego. Con un estadio lleno y plagado de argentinos que le brindaron mucho apoyo durante todo el encuentro, Delpo consiguió un tempranero quiebre en el 1-1, y tras la confirmación con su servicio, tomó una distancia enorme que marcaría el destino final del partido.

El argentino fue más agresivo y si brillar, no sufrió  inconveniente alguno para cerrar el set a su favor por 6-4 en cuarenta minutos y sellar su pase a los octavos de final del ATP de Derlay Beach, donde chocará con el nacido en Sarajevo, Damir Dzumhur. El campeón del US Open 2009, podría cruzarse en semifinales con el canadiense y primer preclasificado del torneo, Milos Raonic.