Después de llevarse Jarlinson Pantano la decimoquinta etapa del Tour de Francia y rematar Peter Sagan la llegada masiva de la decimosexta jornada, los corredores de la ronda gala disfrutaban este pasado martes de un merecido día de descanso antes de afrontar las últimas cinco etapas de la 103 edición del Tour de Francia. Ni mucho menos les esperaba un camino fácil a los ciclistas, sino que por delante tenían ni más ni menos que los temidos Alpes, y la siempre dura tercera semana de una 'Gran Vuelta', que no solo pondría a prueba el estado físico de los favoritos a imponerse en la clasificación general, sino que también el aspecto mental y táctico jugaría un papel muy importante en una carrera tan dura donde la mayor parte de los equipos no habían conseguido ningún triunfo de etapa.
17ª etapa, las jornadas van poco a poco llegando a su fin, pero los corredores debían recorrer los 184 que unían Berna y Finhaut-Emosson, comenzando con un tramo continuo de subida hasta llegar a la Cote du Saanenmoser, afrontando a continuación un corto descenso que deje a los ciclistas en el Col des Mosses, quedando dieciocho kilómetros de descenso antes del sprint intermedio de Martigny, antes de entrar en el encadenado final, donde los ciclistas tenían por delante el Col du Forclaz y Finhaut-Emosson, dos puertos que podrían poner a prueba la superioridad mostrada anteriormente por Chris Froome, el líder de la carrera.
Más allá de las doce de la mañana, y después de pasar por el control de firmas, los corredores hacían acto de presencia en la línea de salida para ponerse en marcha la decimoséptima etapa del Tour de Francia, comenzando con mal pie para Movistar Team, y es que el equipo telefónico veía como Gorka Izaguirre se veía obligado a abandonar la ronda gala a causa de una caída, en la cual se podía apreciar una fractura de clavícula, siendo trasladado el español al hospital para realizarle más pruebas. Como no podría ser de otra manera, los ataques estaban a la orden del día desde el primer momento, siendo Chris Laporte, Nelson Oliveira, Daniel Teklehaimanot, Tony Martin y Julien Vermote los encargados en coger unos metros de ventaja que rápidamente neutralizaba el pelotón, continuando los movimientos para que un grupo de 23 corredores cogiera unos pocos metros de ventaja que el grupo mayoritario no permitía consolidar.
Espectacular escapada con permiso del pelotón
La Côte de Saanenmöser sería la encargada de marcar las primeras diferencias en cabeza de carrera, yéndose por delante Tanel Kangert (Astana), Stef Clement y Jarlinson Pantano (IAM), Kristjian Durasek (Lampre-Merida), Tony Gallopin (Lotto Soudal), Peter Sagan y Rafal Majka (Tinkoff), Domenico Pozzovivo (AG2R), Steve Morabito (BMC), Ilnur Zakarin (Katusha) y Brice Feillu (Fortuneo-Vital Concept), logrando rápidamente más un minuto de ventaja sobre un segundo grupo que marchaba por delante del pelotón en el que se encontraban Greg van Avermaet (BMC), Alexey Lutsenko (Astana), Serge Pauwels (Dimension Data), Alberto Losada (Katusha), Rui Costa (Lampre-Merida), Thomas Voeckler (Direct Energie), Julian Alaphilippe (Etixx) y Rubén Plaza (Orica).
El ritmo del grupo perseguidor, los ataque aparecían y poco a poco iban recortando distancias con los once escapados de cabeza de carrera, para que en el paso de Mosses (3ª) el primero en pasar fuera el maillot de la montaña, Rafal Majka, por delante de Pantano y Sagan, produciéndose en el descenso de este puerto la unión entre parte de los dos grupos, quedando catorce ciclistas en cabeza de carrera, mientras que unos pocos metros por detrás rodaban Alberto Losada y Julian Alaphilippe sin poder contactar. El paso de los kilómetros permitió a los ciclistas llegar al sprint intermedio de Martigny, lugar en el que Peter Sagan no perdonaba a sus rivales en la lucha por el maillot verde, pasando en primera posición para dejar totalmente sentenciada la clasificación. Con menos de treinta kilómetros para la conclusión y trece minutos de ventaja sobre el pelotón, la victoria de etapa estaba en manos de los escapados, donde las hostilidades estaban a la orden del día.
Movistar busca endurecer la carrera y se encuentra con la colaboración de Astana
Mientras por delante en cabeza de carrera Alexey Lutsenko conseguía abrir hueco con respecto a sus compañeros de escapada, el panorama cambiaba por completo en el pelotón, al comenzar Movistar Team a endurecer la carrera con Nelson Oliveira y Winner Anacona tirando del grupo mayoritario. El conjunto telefónico fue el primero en poner ritmo y encendió la mecha en favor de Astana Team, escuadra que tomó el relevo del equipo español, poniendo toda su maquinaria a trabajar con ni más ni menos que el campeón del Giro de Italia comandando el pelotón, Vincenzo Nibali. Con Lutsenko neutralizado en cabeza de carrera, Pantano y Majka se iban en solitario en el descenso del Col de la Forclaz a quince kilómetros de meta, yéndose juntos ambos hasta aparecer por detrás un complicado rival en la lucha por el triunfo de etapa como Ilnur Zakarin.
Zakarin llegó al duo de cabeza de carrera y ni mucho menos se detuvo, lanzando el corredor ruso un potente ataque ante el que nada podían hacer ni Majka ni Pantano, quedándose el ciclista del Katusha Team en primera posición sin nadie que fuera capaz de seguir su rueda. Diego Rosa y Vincenzo Nibali hicieron su trabajo hasta descolgarse, propiciando la entrada del Team Sky a controlar el pelotón, sin dejar que ningún ataque apareciera, a pesar de que Alejandro Valverde endureciera aún más la subida en favor de su jefe de filas, Nairo Quintana. El murciano movió el grupo y el encargado de responder fue Daniel Martin, quien probaba sin suerte un movimiento que duraba un par de kilómetros hasta ser neutralizado por el pelotón. Después de hacer su trabajo Valverde perdía contacto con el grupo del líder, manteniendo un ritmo constante el Team Sky sin poner en apuros el liderato de Chris Froome.
Zakarin se lleva la etapa y Froome asesta otro golpe
Por delante Ilnur Zakarin mostró una superioridad abismal, cruzando la línea de meta en primera posición con un cansancio plasmado en no poder ni levantar los brazos al cruzar la línea de meta, quedando Pantano en segunda posición a 55 segundos y Majka en tercer lugar, a 1:26. A poco más de un kilómetro para la conclusión, la carrera se seguía jugando en el pelotón, donde Richie Porte era el primero en poner contra las cuerdas al líder, lanzando un potente ataque ante el que nadie podía responder, para abrir hueco y que por detrás el siguiente en probarlo Fabio Aru, aunque este sin suerte, propiciando el hachazo de Chris Froome ante el que tan solo podía responder Nairo Quintana, uniéndose los dos para poco a poco ir recortando la distancia con Richie Porte. Froome mantuvo una espectacular cadencia de pedaleo, soltando de rueda a Quintana, en un golpe moral muy importante para la carrera, cogiendo al australiano de BMC para ir los dos hacia delante.
Porte mostraba una piernas fabulosas, haciendo sufrir de lo lindo a Chris Froome, para que por detrás quedaran en un segundo grupo Fabio Aru, Adam Yates, Nairo Quintana, Romain Bardet y Louis Meintjes, endureciendo la carrera Yates para que tanto Aru como Quintana fueran perdiendo contacto con ellos, en un momento de agonía máxima para el colombiano, que veía como poco a poco se le iba alejando la opción de ser podio de la ronda gala. Porte y Froome concluyeron la etapa a 7:59 del vencedor, obteniendo ocho segundos de ventaja sobre Adam Yates, once con respecto a Romain Bardet, diecinueve sobre Fabio Aru y Louis Meintjes, 28 con respecto a Nairo Quintana y 40 sobre Bauke Mollema. Joaquim Rodríguez perdió 1:13 y Alejandro Valverde se dejó 2:02 en la línea de meta. Ahora Chris Froome continúa comandando la clasificación general con 2:27 sobre Bauke Mollema, 2:53 sobre Adam Yates y 3:27 sobre Nairo Quintana. Bardet es quinto a 4:15, Porte sexto a 4:27, Valverde séptimo a 5:19 y Aru séptimo a 5:35. Daniel Martin y Louis Meintjes cierran el 'top ten' de la carrera.
