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Análisis Tour de Francia 2017. Batalla por el maillot verde: Matthews se lleva un duelo inesperado

En una Grande Boucle donde varios favoritos dijeron adiós a las primeras de cambio, el australiano Michael Matthews (Team Sunweb) consiguió su primer maillot verde gracias a una gran segunda mitad de competición y el tardío abandono de Marcel Kittel (Quick-Step Floors), que había dominado con mano de hierro las llegadas masivas.

Análisis Tour de Francia 2017. Batalla por el maillot verde: Matthews se lleva un duelo inesperado
Michael Matthews (Team Sunweb), líder de la regularidad  | Foto: ASO / Pauline Ballet
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Por Óscar Sainz Mateos

El abandono de Mark Cavendish y la consecuente expulsión de Peter Sagan, el fuera de control de Arnaud Démare, el flojo rendimiento de André Greipel, etc. Ha sido un Tour de Francia un tanto extraño, no solo en la lucha por la general, sino también en la carrera por hacerse con el preciado maillot de la regularidad. Entre tantos despropósitos, el australiano Michael Matthews ha brillado con luz propia para acabar vestido de verde en los Campos Elíseos, ayudado también por la retirada de Marcel Kittel, que se fue a casa con repóker de victorias. 

Michael Matthews: el triunfo de la constancia

Michael Matthews se presentó en la ronda gala con la intención de dar guerra y luchar por victorias, pero sabedor de que había un claro favorito para conseguir el maillot verde: Peter Sagan, vencedor en las últimas cinco ediciones. De hecho, el ciclista de Sunweb tampoco destacó en exceso durante la primera semana, cosechando discretos resultados en las llegadas masivas de Lieja, Vittel y Troyes. Su mejor resultado se produjo en la tercera etapa de Longwy, una llegada para uphill finishers en la que solo la potencia de Sagan le privó de la victoria.

Consciente de la superioridad de Kittel, Matthews optó por fugarse en etapas de montaña. El australiano llegó a estar a 133 puntos del alemán

Precisamente, un injustificable codazo del Campeón del Mundo en pleno sprint de la cuarta etapa acabó con Mark Cavendish en el hospital y con el propio eslovaco expulsado del Tour. Las opciones por el maillot verde se abrían de repente para Matthews, pero el australiano pronto comprendió que debía cambiar de estrategia, pues la superioridad de Marcel Kittel en las llegadas masivas era insultante: meterse en fugas en etapas de montaña para puntuar en los sprints intermedios fue su acertada decisión.

Su primera escapada llegó en la durísima jornada de Chambéry, con tres hors catégorie de por medio. Precisamente, ese día se quitaría a otro rival de en medio, pues Arnaud Démare llegaba fuera de control junto a tres compañeros. Tras la jornada de descanso, Matthews volvería a la cruda realidad: Kittel era imbatible en las volatas y el aussie incluso tenía dificultades frente al resto de velocistas que quedaban. Tras la 11ª etapa, su desventaja con Kittel llegó al máximo de 133 puntos. Pero el de Sunweb no se dio por vencido y siguió intentándolo en las escapadas, esta vez en la etapa de Peyragudes, donde Kittel también se metió para defender su posición.

Michael Matthews obtuvo en Rodez su primera victoria | Foto: ASO / A. Broadway

Matthews tuvo un punto de inflexión tras lograr su primera victoria en Rodez

El punto de inflexión fue la etapa con final en Rodez, un muro que le venía de perlas al ciclista australiano, que no desaprovechó la ocasión para sumar su primera victoria en el Tour 2017. Los siguientes días volvería al ataque, el primero metiéndose en la fuga y el segundo, poniendo a todo el Sunweb a tirar para descolgar a Kittel en los primeros kilómetros y rematar un seleccionado sprint que le dio su segundo triunfo.

Kittel seguía vestido de verde, pero ahora con solo 29 puntos de ventaja. Lejos de aflojar, Matthews siguió al ataque con una nueva escapada en la montañosa etapa del Galibier, un puerto que Kittel ni siquiera llegaría a pasar, pues había abandonado la carrera unos kilómetros antes, tras sufrir una caída. Con el abandono del alemán, Matthews se vistió de verde al final de esa 17ª etapa y prácticamente se aseguraba mantenerlo hasta París, vista la enorme ventaja que tenía sobre el resto de rivales.

Matthews celebra su maillot con la bandera de Australia | Foto: ASO / P. Ballet
Matthews celebra su maillot con la bandera de Australia | Foto: ASO / P. Ballet

No sabemos qué habría ocurrido si Kittel hubiera aguantado hasta los Campos Elíseos, pero la valentía e insistencia del oceánico —dos victorias y cuatro escapadas en etapas de montaña— bien merecen este premio a la regularidad.  

Marcel Kittel: rey de la velocidad

A pesar de no poder corroborarlo con el maillot verde, no cabe duda de que Marcel Kittel ha sido, de lejos, el mejor sprinter del Tour de Francia 2017. El alemán no ha tenido rival en los finales puramente llanos, consiguiendo un total de cinco triunfos para su equipo, Quick-Step Floors. Su gran estado de forma ya le situaba como uno de los favoritos para luchar por los triunfos parciales, y así ha sido.

Cinco victorias han hecho de Kittel un velocista intratable en este Tour

Con un potente equipo que, sin embargo, tampoco ha necesitado en los momentos decisivos -su impresionante rush final le bastaba para superar a sus rivales- el alemán dejó claro desde la primera etapa en línea de Lieja que era el hombre a batir. Al margen de los finales explosivos (que no van con él), solo se le atragantó la accidentada etapa con final en Vittel, donde llegó cortado por un repecho anterior. Posteriormente haría doblete en Troyes

Marcel Kittel ganó una de las etapas más igualadas de la historia | Foto: ASO / Bruno Bade
Marcel Kittel ganó una de las etapas más igualadas de la historia | Foto: ASO / Bruno Bade

El resto fue casi coser y cantar para el alemán, aunque en la memoria quedará el 'ultraigualado' final de Nuits-Saint-Georges en el que ni la photo finish fue capaz de sacarnos de dudas: finalmente, Kittel levantaría los brazos gracias a una unidad de medición nunca usada hasta ahora en ciclismo: las diezmilésimas. Precisamente, ese día se enfundaría el maillot verde, que no soltaría hasta su abandono. La premisa del germano era sencilla: pasar como pudiera la montaña e ir a por todas en las jornadas planas. De esta forma se embolsaría sin demasiadas dificultades dos victorias más en Bergerac y Pau, llegando a la 'manita' y suscitando conversaciones sobre posibles récords.

La montaña y las constantes fugas de Matthews acabaron minando a Kittel, que abandonó en la etapa 17 por caída

Sin embargo, a Kittel le aguardaban jornadas complicadas, donde la montaña y la constante amenaza de fuga de Matthews le iban minando física y mentalmente (el australiano le recortaba puntos día tras día). Sin opciones en la rampa de Rodez y descolgado en la etapa de Romans-sur-Isère, el velocista de Quick-Step notaba el aliento de su rival y para colmo sufría una caída en los primeros kilómetros de la 17ª etapa. Mermado físicamente y ante el desafío de la alta montaña, decidió bajarse de la bici y dejarle en bandeja el maillot verde (que aún portaba) a Matthews. No obstante, se fue para casa con un saco que victorias que no veíamos desde la gran época de Cavendish. 

Edvald Boasson Hagen: una grata sorpresa

¿Quién iba a pensar que un todoterreno como Boaason Hagen iba a apretar las tuercas a los mejores sprinters del pelotón? Un ciclista cuyo hábitat son las clásicas ha tenido un papel destacado en las llegadas masivas, confirmándose como una de las sorpresas de la ronda gala. Victoria y tercer lugar en la clasificación por puntos. Sin asomar la cabeza en las primeras etapas, no fue hasta la séptima cuando estuvo a punto de darle un buen susto a Kittel (el alemán ganó por los pelos en su sprint más sufrido).

Boasson Hagen, feliz tras su triunfo en la etapa 19 | Foto: ASO / A. Broadway
Boasson Hagen, feliz tras su triunfo en la etapa 19 | Foto: ASO / A. Broadway

Con ganas de revancha, el noruego de Dimension Data volvió a intentarlo en Pau (tercero), el final para puncheurs en Rodez (tercero de nuevo) y el sprint reducido en Romans-sur-Isére (batido por Matthews). Cansado de dar al palo, Hagen se filtró en la escapada de 20 hombres de la 19ª etapa y salió vivo de un sinfín de ataques para imponer su potencia a falta de dos kilómetros y triunfar en solitario. Una merecida victoria para el de Dimension Data, que hizo olvidar el amargo abandono de Mark Cavendish. 

Dylan Groenewegen: la promesa se consolida

El joven neerlandés ha finalizado su segunda participación en la Grande Boucle con el mejor sabor de boca posible: ni más ni menos que alzando los brazos en los Campos Elíseos, el sprint más deseado. Gran recompensa para un velocista que figuraba en la lista de segundas alternativas, por detrás de los gallos, y regresa a casa con su primera victoria en una grande.

Groenewegen dejó lo mejor para el final | Foto: ASO / Thomas Maheux
Groenewegen dejó lo mejor para el final | Foto: ASO / Thomas Maheux

Si bien le costó arrancar en la primera semana, con un quinto como mejor resultado, se le vio con más confianza después de la jornada de descanso (sin Cavendish, Sagan y Démare, eso sí), logrando un tercer y segundo puesto, a la sombra de Kittel. Desde ese día, la promesa de LottoNL-Jumbo se mantuvo en las últimas posiciones del pelotón, guardando fuerzas y sufriendo en la montaña, para brillar en el mejor escenario, las calles de París

Arnaud Démare: buena primera semana

Démare acudía con ganas a la prueba de casa, con el plus de haber cuajado una buena primera mitad de año y estar enfundado con el maillot de campeón de Francia. Pese a no haber completado ni el 50% de la carrera, el velocista de FDJ se marchó con una victoria en el zurrón (la primera de su vida en el Tour) y habiendo vestido de verde durante tres días.

Arnaud Démare retuvo el verde tras la sexta etapa | Foto: ASO / A. Broadway
Arnaud Démare retuvo el verde tras la sexta etapa | Foto: ASO / A. Broadway

Segundo en Lieja y sexto en la ‘trampa’ de Longwy, el galo dejó claro que iba a por la victoria, que llegaría, precisamente, un día después en una etapa marcada por el codazo de Sagan a Cavendish. Démare, aprovechando que Kittel se había descolgado, pescó en río revuelto, pasando a liderar la regularidad. En Troyes volvió a quedar a rebufo de Kittel con un nuevo segundo puesto, pero el francés empezó a sentirse mal con la aparición de la montaña. Salvó el primer match ball, pero la novena etapa (con tres hors catégorie) fue demasiado para él: se descolgó en el primer kilómetro y llegó fuera de control junto a tres compañeros, despidiéndose de la carrera de forma prematura

Decepciones

►Peter Sagan

Efímera participación del Campeón del Mundo en este Tour de Francia. Visto el espectáculo ofrecido en la anterior edición, se esperaba lo mejor de este gran corredor, y no empezó mal. En el poco tiempo que duró en carrera, el de Bora-Hansgrohe fue capaz de ganar una etapa, la tercera con final en Longwy, adecuada a sus características. Favorito indiscutible para hacerse con su sexto maillot verde (hubiera igualado el récord), al eslovaco se le cruzaron los cables en la volata de la cuarta etapa, cuando cerró a Cavendish contra las vallas con un feo movimiento de codo. Resultado: el británico al hospital, Sagan expulsado y el Tour, sin uno de sus grandes animadores.

Peter Sagan logró vencer con autoridad en Longwy | Foto: ASO / A. Broadway
Peter Sagan logró vencer con autoridad en Longwy | Foto: ASO / A. Broadway

►André Greipel

De poco importa su segunda posición en la clasificación de la regularidad. El alemán de Lotto Soudal no ha estado a la altura en este Tour, poniendo fin a su impecable racha de 12 grandes vueltas consecutivas ganando al menos una etapa. Si bien 'El Gorila' no ha estado lejos de la victoria (fue tercero en Lieja, Vittel y Troyes), se le ha visto menos implicado en las llegadas, casi dejando que fueran otros los que llevaran la voz cantante a la hora de lanzar el sprint.

André Greipel rompió su racha de triunfos en grandes vueltas | Foto: ASO / P. Ballet
André Greipel rompió su racha de triunfos en grandes vueltas | Foto: ASO / P. Ballet

Al igual que al año pasado, Greipel intentó jugárselo todo a una carta (la etapa de París), y estuvo cerca de lograrlo, pero su reacción llegó demasiado tarde y se quedó a las puertas de remontar a Groenewegen. Este año Lotto Soudal y el germano se van de vacío del Tour.

►Alexander Kristoff

Una decepción más que sonada, pues Katusha-Alpecin lo fiaba todo al noruego en esta carrera, sin un hombre de garantías para luchar por la general. El resultado ha sido nefasto, pues Kristoff solo ha podido luchar realmente por una victoria: fue en la cuarta etapa, en esa accidentada llegada aprovechada por Démare, que tuvo que lidiar con el nórdico hasta los últimos metros. Al margen de este segundo puesto, solo se pueden destacar dos cuartas y dos quintas posiciones. Discreta participación de Kristoff (cuarto en la clasificación por puntos) y su escuadra en la ronda francesa.

Kristoff no fue capaz de lidiar con los mejores velocistas | Foto: ASO / P. Ballet
Kristoff no fue capaz de lidiar con los mejores velocistas | Foto: ASO / P. Ballet

►Sonny Colbrelli

Con el abandono de Ion Izagirre a las primeras de cambio, el único consuelo para Bahrain Merida era conseguir alguna victoria de etapa con un velocista inferior a los gallos. El italiano, pese a intentarlo, no pasó del sexto lugar (Lieja y Rodez) como mejor resultado, aunque disputó casi todos los sprints intermedios para finalizar quinto en la clasificación por puntos. Tampoco se le podía pedir mucho más. 

Colbrelli pasa primero por un sprint intermedio | Foto: ASO / A. Broadway
Colbrelli pasa primero por un sprint intermedio | Foto: ASO / A. Broadway

►John Degenkolb

El alemán quería recuperar sensaciones en el Tour tras una notable preparación que solo le faltó rematar con alguna victoria más. No obstante, apenas tuvo tiempo para ponerse al día: sin ninguna opción en la primera etapa en línea, el sprinter de Trek-Segafredo voló por los aires al verse involucrado en la acción Sagan-Cavendish. Pudo seguir en carrera, pero tan solo luchó por la victoria en Bergerac (segundo tras Kittel) y Romans-sur-Isère (tercero). Desaparecido en el resto de etapas llanas.

John Degenkolb no estuvo a la altura | Foto: ASO / P. Ballet
John Degenkolb no estuvo a la altura | Foto: ASO / P. Ballet

►Nacer Bouhanni

Al francés se le resiste la victoria en la Grande Boucle. De nuevo muy atrás en los sprints, sin meterse de lleno en la lucha, excepto en el caos de Vittel y los Campos Elíseos (cuarto en ambas). El resto, varios top-10 sin demasiado valor. Tanto a él como a su equipo, Cofidis, se les ha visto superados. Destacar su remontada de tres minutos desde el grupo de Kittel (descolgado) al de cabeza en la 16ª etapa, que al final se quedó en papel mojado.

Bouhanni estuvo muy lejos de sus competidores | Foto: ASO / P. Ballet
Bouhanni sigue sin ganar en el Tour | Foto: ASO / P. Ballet

►Mark Cavendish

Es injusto que el británico aparezca aquí, pues no tuvo ninguna culpa de su prematuro adiós. Tan solo pudimos verle en acción en el sprint de Lieja, donde acabó en cuarta posición. En el siguiente, una fea acción de Sagan le mandó contra las vallas, recibiendo el de la Isla de Man múltiples contusiones y dejando a Dimension Data sin su principal hombre. Es una incógnita si 'Cav' hubiera podido hacerse con alguna etapa.

Mark Cavendish siendo atendido tras la dura caída ocasionada por Sagan | Foto: AFP
Mark Cavendish siendo atendido tras la dura caída ocasionada por Sagan | Foto: AFP

 

Mención especial: Thomas de Gendt

Ni mucho menos el objetivo del belga era el maillot verde (ni siquiera es un velocista), sino conseguir una victoria para Lotto Soudal. Pese a fracasar, no será por falta de intentos, ya que ha estado escapado la friolera de 11 etapas —seis seguidas inclusive—. Su activa presencia en las fugas le ha otorgado de forma indirecta un enorme botín de puntos en cada sprint intermedio que ha disputado, finalizando la clasificación de la regularidad en un notable sexto puesto (149 puntos), mejor que otros sprinters. No lo buscaba, pero ahí queda. 

Thomas de Gendt, durante una de sus innumerables escapadas | Foto: ASO / A. Broadway
Thomas de Gendt, durante una de sus innumerables escapadas | Foto: ASO / A. Broadway