Cada día se acorta la cuenta atrás para que comience oficialmente la temporada 2017 de Fórmula 1. Australia está a la vuelta de la esquina y el gran circo ya está preparado para mostrar en todo su esplendor a los monoplazas más rápidos del mundo.
Tras dos semanas de test en el trazado de Montmeló, los equipos han podido comprobar el potencial que tiene cada uno de sus bólidos. Mercedes, por ejemplo, se mantiene en lo más alto de la tabla con un W08 más que competitivo y trabajado. En cambio, Mclaren ha dado la nota negativa de la parrilla. Un monoplaza que hace aguas por todos lados. El motor Honda da fallos un día sí, el otro también, el chasis Mclaren no tiene la estabilidad que pueden llegar a tener otros equipos, la unidad eléctrica no es 100% fiable...
A falta de una sorprendente mejora en Australia, los de Woking son los máximos perdedores del inicio de 2017. La situación de la escudería dirigida por Zak Brown contrasta enormemente con la de Maurizio Arrivabene. Ferrari ha sido la mayor sorpresa positiva del inicio de temporada. Los 'Cavallino Rampante' han dado un paso al frente y han presentado su candidatura a campeón del mundo. Ni Mercedes ni Red Bull se esperaban a unos italianos tan preparados. Hasta un sorprendido Lewis Hamilton se ha visto obligado a alabar el ritmo del SF70-H.
Sebastian Vettel y Kimi Raikkonen se han ido alternando en las primeras posiciones durante las dos últimas semanas. El mejor crono ha sido de 'iceman' con un 1'18.634s con las superblandas.
El alemán echaba la mirada atrás hacia el 2016 y creía qué la dura lección fue un impulso para este año: "Aprendimos mucho desde el año pasada y creo que fue la temporada más importante para el equipo, no por resultados, sino porque lo que ocurrió fue realmente importante para dar un paso adelante".
El 5 de Ferrari añadía que una buena preparación es importante y aseguraba que este 2017 están "mejor preparados que el año pasado".
Sebastian Vettel concluía con un mensaje de ánimo a la escudería italiana: "El año pasado aprendimos muchas lecciones, toda la organización, todo el equipo creo que ha crecido, creo que fue el año más importante. 2016 fue un paso atrás en términos de resultados, pero creo que un gran paso adelante en término de organización".
Ferrari apunta alto, eso es una realidad. No solo lo dice la misma escudería, los rivales y la tabla de tiempos lo confirman. 2017 ha significado un año de cambios y una buena aclimatación puede ser clave y parece ser que los de Maranello han dado en el clavo.