Se abre un nuevo capítulo dentro de una de las franquicias con más historia dentro de la NFL, tras el fracaso de varios proyectos que no han terminado de cuajar, los Redskins afrontan por primera vez desde que draftearon a Robert Griffin III (etapa que no llegó a cumplir las expectativas que creó) una reconstrucción en toda regla, con todo lo que ello implica.
Los de Washington han sufrido unos años con muchos altibajos, y finalmente han decidido cortar por lo sano y comenzar desde 0, lo que en la NFL significa, buscar un QB para el futuro. Por ahí han iniciado también los capitalinos su proceso, y para ello hicieron saltar la sorpresa al elegir en el draft, con su primera ronda (pick nº 15) a Dwayne Haskins Jr. procedente de la universidad Ohio State. Sorprendió porque no se esperaba que los Redskins tuvieran tanto interés en seleccionar un nuevo mariscal pese a la baja indefinida de Alex Smith, y mucho menos que el elegido fuese a ser el ex-buckeye. De él se ha visto de todo en esta pre-temporada, dándole su entrenador un buen número de repeticiones en todos los encuentros. Actuaciones brillantes acompañadas de partidos para olvidar, lectura de jugadas al nivel de un veterano con toma de decisiones propias de un novato y lanzamientos de una gran precisión seguidos por otros que te obligan a taparte los ojos.
Al fin y al cabo, nada extraño en el proceso de adaptación de un rookie y más en esta posición. Por ello, los de Washington han decidio entregar sus riendas desde un inicio al veterano Case Keenum, ya que aún se ha visto a Haskins muy verde como para lanzarlo al fuego de golpe, en una temporada en la que no parece haber nada en juego, más allá de la progresión de éste. Y es que esto es una realidad, los capitalinos no tienen serias esperanzas de llegar a nada este curso, no hay un equipo de receptores que represente una gran amenaza para las defensas rivales, más allá de sus geniales TEs. Una línea ofensiva que necesita que el conflicto entre su OT estrella, Trent Williams, y la directiva termine, para poder dar alguna garantía de protección a Keenum. La defensa por su parte, si espera ser la nota positiva de la temporada, pero su profundidad deja mucho que desear.
Altas
Case Keenum
Otra oportunidad de demostrar a la liga que tiene un hueco entre los titulares para Keenum. La temporada pasada estuvo muy lejos de su mejor nivel en Minnesota, pero los Redskins confían en él para lograr esa figura veterana capaz de sacarle rendimiento al ataque que tiene, y sobretodo, servir de mentor para su joven QB reserva.
Landon Collins
No abandona la NFC East el experimentado safety. Muy necesario refuerzo para los de Washington, cuya secundaria necesitaba de algo más que de Josh Norman para conseguir más garantías.
Ereck Flowers
Polémica decisión la de fichar a Flowers, pero la negativa de Williams a aparecer por la pre-temporada no les ha dejado más remedio que reforzar la línea ofensiva. Nunca ha cumplido con el status que se le presupone a una elección número 9 del draft, puede que en los Redskins se reencuentre al fin con su juego.
Bajas
Ha-ha Clinton Dix
El que en su día fuera uno de los safeties más prometedores de la liga por juventud y versatilidad, parece que sigue inmerso en un declive deportivo. Tras ser visto como prescindible para los Packers, ahora son los capitalinos los que tampoco apuestan por él.
Josh Doctson
Una de las apuestas de los últimos drafts que no le salió bien a Washington. El joven receptor nunca ha sido esa amenaza vertical y desequilibrante que pretendía encontrar en él la franquicia al seleccionarlo con el número 22 hace tres años. Tampoco le ha ayudado su estado físico y las lesiones.
Mason Foster
El líder en tackles de la franquicia la temporada pasada ha sido cortado para ampliar el margen en el tope salarial del equipo. Una decisión meramente económica, ya que siempre ha sido un jugador que ha demostrado dar muy buen rendimiento en el campo.
Jugador a seguir
Si no fuese por sus problemas durante esta offseason, este es un lugar que podría ocupar Trent Williams perfectamente. Basándonos únicamente en términos de calidad, Josh Norman o Jordan Reed, también podrían estar aquí. Pero el jugador que ha demostrado un mayor nivel de manera más regular durante las últimas campañas es sin duda el linebacker exterior, Ryan Kerrigan. Muy cómodo en esa defensa 3-4 ya clásica en la capital de EEUU, siempre es una amenaza para el QB rival llegando desde el edge. Es de esos pocos OLB que se sienten cómodos tanto en el blitz como cuando deben ocupar una cobertura durante la play action. Gran podería físico, intimidación y una gran anticipación son sus mejores armas. La franquicia espera de él que siga siendo ese factor diferencial para la defensa que ha sido estos últimos años y que su progresión no se vea limitada por una temporada en la que a priori se presuponen muchas derrotas.
Fechas clave
8-9-19 vs. Eagles: La jornada inaugural para el equipo de la capital trae consigo uno de los duelos más clásicos de la liga, una rivalidad de la NFC East. No lo tendrá fácil el equipo de Washington, pero ya se sabe que en estos encuentros con tanta fricción todo puede ocurrir.
6-10-19 vs Patriots: No tienen un calendario excesivamente exigente los Redskins, y sin duda el duelo ante Brady y los suyos será un difícil examen.
3-12-19 vs Bills: Uno de los rivales de "su liga" al que los Redskins reciben antes de la semana de descanso, que precisamente les llega en el ecuador de la temporada. Una victoria aquí marcaría el rumbo del último tramo de la campaña.
22-12-19 vs Giants : Como no, cualquiera de los duelos de división es fundamental siempre dentro de la NFC East, y si hay alguno de los equipos que militan en ella que tampoco está para tirar cohetes es Nueva York.
29-12-19 vs Cowboys: Sería un milagro prácticamente que los Redskins llegaran con algo en juego a su último encuentro de temporada regular, pero los que si que puede que se jueguen algo son unos Cowboys a los que seguro querrán amargar la fiesta.
Jay Gruden
Es difícil ver hoy en día a una franquicia tener paciencia con un entrenador y confiar en él tanto durante las temporadas de playoff, como cuando se ve abocada a un proceso de reinicio. Pues algo así ocurre con el equipo capitalino. La confianza en Jay Gruden parece intacta tras una temporada no muy buena. Aunque no es de extrañar viendo las 5 temporadas del entrenador en Washington. Pese a no tener los mejores mimbres ha conseguido ser competitivo en todas ellas, y el curso anterior, hasta la dura lesión de Alex Smith, también parecía que el equipo estaba rindiendo más de lo que se esperaba. Ahora tocan otros tiempos para los Redskins y su entrenador, que tendrá que centrarse en saber desarrollar al máximo a su nuevo QB y conseguir elegir el momento adecuado para darle las riendas del equipo, algo más complicado de lo que parece en esta liga, ya que nunca se puede saber al 100% cuando un QB está preparado para dar ese paso. Gruden acertó en su día con Cousins, y la franquicia espera que lo vuelva a lograr.
