Cuando uno miraba el calendario recién salido, si había un partido que parecía tener todos los ingredientes para ser el partido más disputado y parejo era el que tenía a Golden State recibiendo a San Antonio. Por un lado, teníamos el debut oficial de Kevin Durant con su nueva camiseta, luego de su salida de Oklahoma. El alero se sumaría al MVP Stephen Curry, a Klay Thompson y compañía, para generar un verdadero “súper equipo”. Del otro lado, los Spurs en su primer partido de temporada regular desde el retiro de Tim Duncan, el símbolo más importante de la franquicia, pero con la llegada de Pau Gasol. Quedaba ver como encajaban los refuerzos en las dinámicas de los equipos.

Y la verdad es que dudas no quedaron. San Antonio se hizo dueño desde el primer cuarto del partido y comenzó la temporada con una holgada (e inesperada) victoria por 129-100. La segunda unidad de los Spurs logró una ventaja considerable, que luego fue cuidada y aumentada por los titulares, con las actuaciones estelares de Kawhi Leonard y LaMarcus Aldridge.

Los nuevos líderes de San Antonio marcan el camino

Kawhi Leonard y LaMarcus Aldridge fueron señalados desde el minuto uno como los encargados de liderar a estos Spurs. Con la veteranía de Parker, Ginóbili y Gasol como soporte, lo cierto es que ambas estrellas marcaron un partido brillante. El alero terminó con 35 puntos (su record personal), con un 10/21 de campo y un perfecto 15/15 desde el tiro libre, cinco rebotes, cinco robos y tres asistencias.

Aldridge, por su parte, silenció los rumores de traspaso a los cuales se lo vinculó en los últimos días para terminar una jornada con 26 puntos, 14 rebotes y 3 asistencias, con un 10/20 de campo. Con su poderío en la pintura, ni Draymond Green ni Zaza Pachulia pudieron contener al ex de Portland, que brilló una vez más.

La segunda unidad de San Antonio, clave

El partido transcurría parejo en el primer cuarto, cuando los dos equipos intercambiaban canastas, hasta que dieron paso a las segundas unidades. Allí, los texanos, comandados por Jonathon Simmons (7 puntos en el primer cuarto y 20 en total, con 8-14 de campo y +33) lideraron un parcial de 17-2 hacia el final, que dejó el primer parcial con una ventaja de 11 puntos.

El escolta fue secundado por los 11 puntos de Patty Mills (con 5 asistencias y 4 robos en 18 minutos y un +35 de valoración), los 10 tantos de Manu Ginóbili (y 5 rebotes junto a un +22) y a Dwayne Dedmon (2 puntos, 8 rebotes y +29), mientras que ningún jugador de los Warriors desde la banca superó los 5 puntos. Una ventaja muy grande para no ser decisiva.

Los Warriors, y un debut con tintes de pesadilla

Hay un consenso general que Golden State es uno (si no el más) candidato a ganar el próximo título de la NBA. Stephen Curry, Kevin Durant, Klay Thompson, Draymond Green, entre otros, lo cierto es que parece tener uno de los quintetos más temidos de siempre. Sin embargo, Steve Kerr tendrá mucho trabajo si quiere competir realmente por el anillo. En esta primera presentación, se notó una alarmante individualidad sobre el parqué, muy distinto al juego de pases que pregona el coach desde que asumió en el equipo de la Bahía. Kevin Durant y Stephen Curry tiraron del carro y terminaron con 27 y 26 puntos respectivamente, pero no fue suficiente.

Para colmo, la segunda unidad, otro de los fuertes de temporadas anteriores, fue totalmente desarmada. Los jugadores que saltaron desde el banquillo hoy no parecieron estar a la altura de los Spurs, y el máximo anotador de los mismos fue Ian Clark, con 5 puntos solamente pero con un -29 de valoración. Iguodala terminó con 2 tantos en 27 minutos y un -28, y el revulsivo Shaun Livingston solo pudo sumar 2 puntos en 13 minutos. Con las marchas de Speights, Barnes, Ezeli y Barbosa, quedará por ver quiénes serán los secundarios que den un paso al frente durante la temporada.

Los texanos se dieron el gusto de vaciar la banca al final del partido y hacer debutar al décimo argentino en la historia de la NBA, Nicolás Laprovittola. Ahora deberán seguir con esta dinámica cuando enfrenten a Sacramento en la madrugada española del viernes, en condición de visitante. Mientras que los Warriors tendrán la chance de reponerse este sábado, cuando visiten a los Pelicans de Anthony Davis en un duro compromiso.