No llores por mí, Argentina. Argentina lloró, y con ella Leo. Argentina lloró y lo hizo en Brasil, en Chile y en Estados Unidos. Argentina lloró en 2014, 2015 y 2016. Argentina lloró frente a Alemania y frente a Chile por partida doble. Argentina lloró.
La canción compuesta a mediados de los setenta por Andrew Lloyd Webber y por Tim Rice es un claro reflejo del momento por el que pasa la selección albiceleste. Muchos son los años en los que se ha Hasta que en el año 2005 apareció un joven de Rosario.intentado conseguir alguna gesta y siempre terminan quedando en las puertas, apeados por alguna circunstancia. Desde Maradona hasta Messi hay una época de vacío legal en la que nadie dio un salto cualitativo para coger las riendas de la selección. Hasta que en 2005 apareció un joven de Rosario. El momento en el que Leo aparece en escena, los argentinos se aferran a un nuevo ídolo que se está comenzando a forjar y en el que depositan todas sus ilusiones.
Un inicio prometedor
La relación de Leo con su selección viene desde las categorías mas inferiores. Siendo juvenil, ganó el Mundial sub-20 de 2005, disputado en los Países Bajos. Argentina ganó por 2-1 a Nigeria en la final con dos goles de Leo Messi. Torneo en el que fue elegido máximo goleador y mejor jugador. Debutó un año mas tarde con la selección absoluta debido al futuro tan prometedor que tenía por delante, y se convirtió en el argentino mas joven en debutar y marcar en un Mundial. Solo le bastaron dos años para que, en su año de máxima explosión, 2008, ganase un oro olímpico. Fue en Pekín y aunque parezca sorprendente, es el último título que ha conseguido Leo como internacional.
2014, el inicio del purgatorio
El inicio de lo que pudo ser algo grande. El Mundial de Brasil estaba marcado en rojo para una selección que había tenido una participación mediocre en el Mundial previo, al igual que en la Copa América. La fase de grupos fue la soñada para Leo. En los tres partidos fue elegido como hombre del encuentro, además de sumar un total de cuatro goles. Messi sabía de la importancia de la cita y quería llevar a su selección a lo mas alto. En los octavos, la albiceleste sufrió más y es que no fue hasta el 118' cuando Di María transformó un pase de Messi para darle la eliminatoria frente a Suiza. De nuevo Leo fue elegido mejor jugador del partido, y ya iban cuatro de cuatro. Con sufrimiento venció a Bélgica en cuartos, y gracias a penaltis frente a Holanda se colocó en la final.
En el último escalón antes de la gloria, Argentina cayó derrotada frente a Alemania. Un gol de Götze en los últimos minutos de la prórroga hacía que la albiceleste y Messi se quedaran sin su deseado Mundial. Tras realizar un gran campeonato, el fútbol decidió que no era el momento para que se alzasen con el máximo trofeo de fútbol intercontinental.
2015 y 2016, fechas para el olvido
Como dos gotas de agua, separadas al nacer, en las que influyen ciertos aspectos distintos pero que al final provienen de la misma base. Dos Copa América, una para resarcirse del Mundial, la segunda para hacer lo propio de la primera Copa perdida. El verdugo el mismo, Chile. Las circunstancias las mismas, en penaltis y con ningún argentino pudiendo creer lo que estaba viendo.
En la primera cita, disputada en Chile, Leo superó los cien partidos como albiceleste. Era el momento para darle a los suyos lo que no había conseguido en Brasil. Tras una fase de grupos plagada de oficio, venció a Colombia en cuartos en penaltis. En la siguiente ronda, se lució repartiendo tres asistencias en la goleada frente a Paraguay por 6-1. En lo que respecta a la final, el gafe volvía a hacerse real para los blanquiazules. En los penaltis cayeron derrotados frente a la anfitriona, Chile.
Un año después, y con otra oportunidad para redimirse, el mismo resultado Messi fue decisivo en la fase de grupos además de igualar a Bautista como máximo goleador albiceleste. En la final, de nuevo Chile. Hasta el factor psicológico influyó a toda una selección hasta tal punto de volver a caer derrotados en el mismo escenario de la misma competición de la misma forma. Gerardo Martino dejó la selección y el propio Messi anunció su retirada con Argentina. "Para mí se terminó la selección. Ya lo intenté mucho, me duele no ser campeón con Argentina y me voy sin lograrlo", dijo aquella noche Leo. Pronto se dio cuenta de que los suyos le necesitaban y un mes mas tarde anunció su regreso.
Rusia, la hora de Leo
Llegó el momento de MessiLa hora de demostrar al mundo, si no lo ha hecho veces ya, de la talla que está hecho. Tiene la espina clavada de la comparación con Maradona porque Messi no tiene un Mundial. Fue él quien hizo que la albiceleste esté en la cita veraniega y quiere ganarla a toda costa. Para Leo ya no hay factores psicológicos, le tiene ganas a Rusia y viajará hasta el este de Europa para levantar su primer Mundial. Con la Copa del Rey y la Liga ya en su bolsillo, el '10' ya tiene la mente pensando en la cita, su cita. Leo quiere romper el compás del tango. Quiere que Argentina deje de llorar, y que no lo haga por él. Todos los focos apuntan al de Rosario, que está ante su hora. Con Messi enchufado, la albiceleste pasa a una de las favortias a alzarse con el trofeo intercontinental. De ti depende Leo.
