El Manchester United y la Real Sociedad empataron a cero en el partido de vuelta de dieciseisavos de final de la Europa League. Termina el sueño europeo para los donostiarras, que no consiguieron darle la vuelta a la eliminatoria tras la abultada derrota por 0-4 en Turín. Aun así, los de Imanol plantaron cara al United y lavaron la imagen ofrecida en el partido de ida.

El partido comenzó con buen ritmo. Los txuriurdin cambiaron la estrategia llevada a cabo en la ida; cedieron la pelota al United, se encerraron atrás y no dejaron espacio en la espalda de la defensa para que los Martial, Bruno Fernandes y compañía no pudieran hacerles daño al contraataque.

Oyarzabal falla otro penalti

En el minuto 11 llegó la acción más importante del encuentro, el árbitro señaló penalti para la Real por una falta clara de James a Gorosabel dentro del área. Un pequeño hilo de esperanza florecía en los realistas, y más, teniendo en cuenta un seguro de vida como es Oyarzabal desde los 11 metros. El eibartarra cogió el balón y, como siempre, realizó su peculiar ritual de lanzamiento, pero esta vez el balón se marchó fuera de la portería. Es el segundo penalti que falla Oyarzabal de los 18 que ha lanzado en partido oficial, ambos esta temporada.

La Real en ningún momento bajó los brazos, y aunque la eliminatoria estaba prácticamente decidida por el resultado de la ida, ambos equipos mantuvieron las espadas por todo lo alto y fueron en todo momento a por la victoria. La más clara para el United en la primera mitad estuvo en las botas de Bruno Fernandes. El portugués recibió el balón fuera de área con Remiro fuera de la portería, pero su disparo golpeó en el larguero y se marchó fuera.

Imanol, consciente de que la remontada ya era un anhelo imposible, decidió dar minutos a los menos habituales y sacó a Bautista, Portu y Barrenetxea en el descanso. En la segunda mitad el partido bajó considerablemente de ritmo, la Real bajó las revoluciones y el United sacó del campo a sus mejores jugadores.

Los suplentes aprovechan sus minutos

Aihen Muñoz, Zubimendi y Sagnan aprovecharon su titularidad y demostraron frente a todo un Manchester United que están perfectamente capacitados para suplir a Monreal, Illarra y Le Normand respectivamente. Los teóricamente suplentes no hicieron notar la falta de los más habituales del once de Imanol.

La ocasión más clara de la segunda mitad fue el gol anulado a Tuanzebe. El mediocentro del United marcó de cabeza con un remate contundente en un córner, pero cuando ya estaban celebrando el gol, el VAR avisó al árbitro y éste decidió anular el gol por un rodillazo criminal de Lindelof en la cara de Bautista.

Finalmente, en el “Teatro de los Sueños” acabó el sueño europeo de la Real. Los de Imanol no pudieron darle la vuelta al abultado 0-4 de la ida, pero compitieron hasta el final y lavaron la imagen mostrada en Turín.