Con una demostración de carácter, el equipo conducido por Lionel Scaloni clasificó a los octavos de final de la Copa del Mundo y en el último partido por la fase de grupo derrotó 2-0 a Polonia en un encuentro que lo tuvo como dominador en los 90’ minutos. De menor a mayor, en el primer tiempo tuvo las mejores chances y se topó con las intervenciones de Wojciech Szcesny, después en el segundo tiempo, Argentina no bajo su intensidad y llegaron las emociones.

Cuando apenas, el neerlandés, Danny Makkelie pitó el inicio del complemento, Ángel Di María se junto con Nahuel Molina Lucero por la calle derecha y el lateral del Atlético Madrid mandó un preciso centro atrás para la llegada de Alexis Mac Allister. Una definición pifiada del mediocampista del Brighton de la Premier y sirvió para colocar el parcial 1-0 en el Stadium 974.

Luego de la apertura del marcador, la Scaloneta bajo su sello que lo caracteriza empezó a jugar de manera asociada, se adueñó de la posesión del balón y no salió de su guion, esperando al combinado europeo para aprovechar el momento justo. En una jugada que comenzó en los pies de Leandro Paredes, siguió abriendo el campo de juego a las bandas, Enzo Fernández apretó el acelerador y aprovechó una distracción en el medio de Polonia para asistir a Julián Álvarez.

En una conexión made in River por ser una de las claves del conjunto de Marcelo Gallardo campeón en la Liga Profesional pasada, el atacante cordobés de 22 años puso la frutilla del postre a una buena acción de toda la delegación de la Albiceleste y se convirtió en el tanto con más pases (25) de Argentina en la historia de los Mundiales. ¿Cuál se encuentra en segundo lugar? En la Copa del Mundo de Alemania 2006 por la segunda fecha en el Veltins-Arena, en aquella goleada frente la débil Serbia y Montenegro, sin desesperarse, el elenco que era dirigido por José Pekerman ya se había puesto arriba por la conquista de Maximiliano Rodríguez.

Sin embargo, en esa tarde en suelo alemán fue histórica, Esteban Cambiasso (24 pases antes) se asoció con Hernán Crespo, dos de los ex futbolistas que tuvieron presente ayer en uno de los palcos del estadio, el ex delantero tocó de taco para el arribo del ex volante central. En esa media hora del primer capítulo, el ex jugador que supo vestir la camiseta del Inter fusiló el arco defendido por Dragoslav Jevric y estampaba el 2-0 en una cátedra de fútbol en la cancha del Schalke 04.


Bajo un libreto claro, el mensaje de Scaloni viene siendo claro, no renunciar a su idea de juego. El grito de Álvarez en la noche de Doha fue una prueba como se caracteriza al ciclo del entrenador oriundo de Pujato.