La jornada 15 de la Premier League en el Día del Recuerdo por los caídos en la Primera Guerra Mundial acogía un apasionante e intenso derbi entre Chelsea y Arsenal al oeste de Londres. Duelo diferente al de otras temporadas debido a los 10 puntos que separaban a los equipos de Mikel Arteta y Graham Potter.

Situación de los dos equipos en la jornada 15

Los gunners iniciaban la jornada como líderes de la Premier League, contentos por el 1-0 ante el Zúrich en Europa League y con una racha de imbatibilidad en competición nacional de 7 partidos desde la única derrota de la temporada en Premier por 3-1 en Old Trafford el 4 de septiembre.  

Los blues, por el contrario, pensando más en ese primer puesto del grupo de Champions que en su situación en Premier, séptimos en tabla, con una mala racha de tres puntos de los últimos 12 y de una visita al Amex para olvidar, debido a los cuatro goles encajados en Brighton, exequipo de Potter.

El equipo de Graham Potter hacía varios cambios respecto al partido de Champions frente al Dinamo de Zagrev, regresaban Cucurella, Ruben Loftus-Cheek y Thiago Silva al equipo titular. En el conjunto red tan solo había un cambio respecto a la jornada anterior, la vuelta de Zinchenko al equipo titular.

El derbi comienza

Durante los primeros 20 minutos del partido, parecía verse a un Chelsea cómodo y consciente del tipo de partido que estaba jugando, superando duelos y siendo un poco más superior en el centro del campo al Arsenal, que fue un poco más conservador que el conjunto local durante el inicio, a pesar de dos ocasiones por parte de Ben White.

A partir de ahí, el Arsenal empezaba a elaborar jugadas y a reencontrarse con su juego, con Gabriel Martinelli y Gabriel Jesus como principales protagonistas. El “11” superaba rivales y encontraba a los demás jugadores, mientras que el ex del City lideraba una presión que iba a ser una de protagonistas durante todo el partido en Stamford Bridge.

El Chelsea veía cómo se iba sometiendo poco a poco al dominio del conjunto de Mikel Arteta y no se sentía cómodo, por lo que Potter realizaba algunos ajustes defensivos, como el intercambio de la posición de Azpilicueta y Chalobah en el minuto 25.  

Dos minutos más tarde, Aubameyang realizaba una dura entrada a su excompañero de equipo, Ben White, lo que suponía la primera amarilla y el inicio de un duelo de intensidad y faltas que finalizó en 20 para el Chelsea y 13 para el Arsenal.

La ocasión más clara de la segunda parte llegaba por parte de un centro de Martinelli tras superar a dos defensas que remataba solo Gabriel Jesus, pero que, por la difícil posición de remate del delantero y el toque con la cabeza, se desviaba por muy poco de la portería de Mendy.

El conjunto de Potter no desistía y tras un buen saque de esquina por parte de un Mason Mount que no termina de ser tan protagonista, Thiago Silva remataba un balón que se fue por encima de la portería gunner.

Asimismo, el ambiente en el Bridge hacía que el partido adquiriera un nivel más de intensidad y se convertía en ataques por parte de ambos equipos, duelos muy físicos en el centro del campo y las bandas. Por ello, Bukayo Saka recibía la primera tarjeta amarilla del Arsenal en el partido, tras una entrada a Azpilicueta por venganza de no haber pitado falta del español en la jugada anterior.

Saliba y Gabriel certifican la solidez del Arsenal

El partido de William Saliba y Gabriel Malaghães confirmaba el gran momento de solidez defensiva que vive el conjunto de Mikel Arteta. Los 11 goles en contra que ha recibido el Arsenal les convierte en el equipo menos goleado de la Premier League, algo que en pasadas temporadas echaban de menos. La pareja está funcionando a la perfección y han demostrado que están preparados para pelear por el título y para volver al fútbol europeo de máximo nivel.

Una segunda parte de dominio red

En la segunda parte se podía ver la verdadera razón de por qué el Arsenal de Arteta va líder en la clasificación, y es por esa presión tras perdida, intensidad y dominio al que someten al rival, y el de este día era una prueba más de si están preparados para luchar por el título, por ser un derbi, por ser el Chelsea, por ser Stamford Bridge y por estar ante la tercera temporada en los últimos 20 años que el Arsenal puede terminar por encima del Chelsea.

Uno de los nombres del partido ha sido Gabriel Jesus, que hacía que los defensas del Chelsea tuvieran que forzar jugadas, sortear balones, crear inseguridades, etc., y, así, lo hacía en el minuto 59, ya que forzaba un fallo de Cucurella, y Chalobah frenaba al delantero del Arsenal, lo que significaba la primera amarilla para el central del Chelsea, este terminó frustrándose y recriminándoselo al exjugador del Brighton.

Tres minutos más tarde llegaría el gol del Arsenal tras minutos de dominio y constantes llegadas, un centro de media altura de córner por parte de Bukayo Saka y una mala salida de Mendy provocaba desconcierto en el área del Chelsea y llegaba el primer gol del derbi por parte de Gabriel Malaghães.

Como consecuencia, Potter realizaba dos cambios, entraban Armando Broja y Connor Gallagher sustituyendo a Aubameyang y Havertz. Los cambios del Chelsea no daban mucho resultado y el Arsenal estaba más cerca del segundo que el conjunto blue del empate. En el minuto 74 iba a llegar una jugada magnífica de Gabriel Jesús regateando a tres defensas y filtrando un balón a Martin Ødegaard, que no aprovechaba la oportunidad de haberle dejado libre de defensas frente a Mendy.

En los últimos tramos del partido, tras el constante asedio gunner, habría polémica por una posible mano del área por parte de Cucurella, que finalmente no se pitaba. En el tiempo de descuento se producía una tángana propia de derbi de Londres, tras una lucha por un balón entre Granit Xhaka y Trevoh Chalobah, en la que también se unió Mateo Kovacic, el duelo lo terminaba sonriendo Xhaka debido al paso de los minutos, que significaban la victoria red en el derbi.