Como cada año, la Copa de Maestros de Londres, las Nitto ATP Finals como nombre comercial,  reúne a los ocho mejores tenistas del mundo en el evento que sirve para echar el telón a otra apasionante temporada tenística. El pasado lunes se sortearon los grupos del denominado 'Round Robin', homenajeando a dos campeones de este mismo torneo y ex números uno del mundo como son el brasileño Gustavo Kuerten y el australiano Lleyton Hewitt. El primero lo lidera el serbio Novak Djokovic. Recién instalado de nuevo en la cúspide del ránking mundial, el número uno del mundo buscará poner el broche de oro a una segunda parte de la temporada absolutamente mágica en la que ha sumado, hasta ahora, los títulos de Wimbledon, US Open, Shanghai y Cincinnati, aparte de la final recientemente perdida en París-Bercy ante el ruso Karen Khachanov.  

No parece que esto último vaya a minar en absoluto la confianza de un hombre cuyo instinto competitivo y hambre de títulos es, en estos momentos, voraz. Además, otro aliciente será igualar en títulos de 'Maestro', al suizo Roger Federer, el otro gran favorito que encabeza el Grupo Hewitt, cosa que haría si se coronase por sexta ocasión en la capital británica. Obviamente, el respeto a los demás rivales es máximo pero huelga decir que la no clasificación de Djokovic, no ya para las semifinales, sino incluso como primero de grupo, sería calificada como una sorpresa mayúscula.

49-11 es el balance de Djokovic este año, pero 32-2 desde Wimbledon

Por momento de forma y aplastante dominio en el cara a cara con varios de sus contrincantes, el de Belgrado no debería tener muchos problemas para asegurarse su billete entre los dos primeros de grupo. Contra Cilic e Isner, su balance es de 16-2 y 8-2, respectivamente, mientras que con Zverev la cosa está igualada con un triunfo para cada uno. Aunque el de Djokovic llegó hace relativamente poco, en las semifinales del Masters 1000 de Shanghai y por un contundente 6-2 y 6-1. A este nivel, el serbio es casi imparable contando, además, con suficientes recursos para dominar a grandes sacadores como los que tiene en este grupo. Su resto, probablemente el mejor de la historia, y su increíble facilidad para moverse de un lado a otro de la pista, lo convierten en uno de los jugadores, sino el mejor, más complicados de enfrentar en una pista de tenis. 

Zverev y Cilic, obligados a dar un paso adelante

Los dos teóricos favoritos para esa segunda plaza del Grupo Kuerten no es que lleguen demasiado bien de forma a Londres. Tanto Alexander Zverev como Marin Cilic han sufrido bastantes altibajos y derrotas sorprendentes durante este 2018, aunque su elevado potencial les ha permitido obtener su plaza sin demasiados agobios. 

Cara a Cara Zverev: vs Djokovic (1-1), vs Cilic (5-1), vs Isner (4-1)

El alemán (54-18) ha calcado prácticamente sus números con respecto a la temporada anterior, en la que ingresó con fuerza en la élite con cinco títulos y un balance de 55-22. Este año ha repetido sus excelentes números en torneos Masters 1000, con un triunfo (Madrid) y dos finales (Miami y Roma). Pero por segundo año consecutivo su talón de Aquiles han vuelto a ser los Grand Slams, con los cuartos de final en Roland Garros como mejor resultado. Su unión con Lendl a finales del verano no ha terminado de dar sus primeros frutos y da la sensación de que Zverev sigue teniendo los mismos defectos que antes de la llegada del ex número uno a sus filas. Su impulsivo carácter y su exceso de especulación en muchos partidos le han impedido dar otro salto cualitativo más y pugnar por los grandes torneos. El año pasado cayó en la fase de grupos, sumando una victoria y dos derrotas. Este año está obligado a dar un paso más y alcanzar, al menos, las semifinales.

Marin Cilic durante las Nitto ATP Finals de 2017. Foto: zimbio.com
Marin Cilic durante las Nitto ATP Finals de 2017. Foto: zimbio.com

En una situación parecida se encuentra Marin Cilic (41-18). El croata estará presente en Londres por cuarta vez en su carrera y tercera consecutiva pero sigue sin resolver las dudas que existen, sobre todo, a nivel mental. Su fragilidad en los momentos clave ha vuelto ha ponerse de manifiesto durante esta temporada, con duros varapalos en la segunda ronda de Wimbledon ante el argentino Guido Pella tras ir dos sets a cero arriba, o en los cuartos de final del US Open ante el japonés Kei Nishikori, también en cinco mangas. 

Cara a cara Cilic: vs Djokovic (2-16), vs Zverev (1-5), vs Isner (7-3)

Su gran comienzo de año con la final del Open de Australia y el título en Queen's son sus mejores avales ante un torneo que tampoco se ha dado históricamente bien al de Medjugorje. Tres participaciones y tres eliminaciones en fase de grupos, con sólo una victoria hace dos años ante Nishikori y cuando ya estaba eliminado. Los antecedentes no invitan al optimismo pero a la vez, también se pueden convertir en una motivación extra para el bueno de Marin. 

Isner y la oportunidad de su vida

A sus 33 años, John Isner (34-19) se encuentra en el mejor momento de su carrera deportiva y a nivel personal. Recién estrenada la paternidad, el gigante de Greensboro ha demostrado que si se encuentra bien físicamente puede ser mucho más que un mero sacador. Así lo dejó patente en Miami, derrotando a Alexander Zverev en la final y conquistando su primer y único Masters 1000 hasta la fecha. En Wimbledon rebasó por primera vez la barrera de cuartos de final de un Grand Slam y solamente cedió ante la mayor frescura de Kevin Anderson en una maratoniana semifinal por 26-24 en el quinto set. Por último, y en casa, Isner repitió su mejor resultado en La Gran Manzana al alcanzar los cuartos de final en 'Flushing Meadows'. 

John Isner durante la Laver Cup 2018 en Chicago. Foto: zimbio.com
John Isner durante la Laver Cup 2018 en Chicago. Foto: zimbio.com

Todo esto le ha valido para acabar entre los diez primeros del mundo por primera vez en sus doce años como profesional. Como ya es de sobra conocido, el estadounidense disputará su primera Copa de Maestros debido a las bajas por lesión de Rafa Nadal y Juan Martín del Potro. Seguramente no es la mejor manera de conseguir esa plaza, pero las oportunidades están para aprovecharlas y en el caso de Isner, ésta era única. No todos los días se levanta uno con la posibilidad de codearse con los mejores del mundo y está es una experiencia que el americano no olvidará nunca, sea cual sea el resultado. En lo puramente deportivo, tiene el cara a cara perdido con claridad con sus tres rivales (Djokovic (2-8), Zverev (1-4) y Cilic (7-3), pero la superficie indoor de Londres y el hecho de no tener nada que perder puede jugar en su favor, llegando a convertirse en algo más que un juez de este grupo. 

El próximo lunes el Grupo Guga Kuerten echará a rodar y ahí es cuando las cábalas y los análisis dejarán paso a la calidad y carácter de los auténticos protagonistas de este juego, los tenistas.