Decir fútbol inglés es hablar del Manchester United. 20 títulos de liga, 38 copas nacionales, seis trofeos europeos, uno intercontinental y un Mundial de Clubes. Los ‘Red Devils’ son historia pura de la Premier League, cuentan con millones de fanáticos alrededor del mundo y han sido animadores principales de cada torneo que han disputado, por décadas y décadas.
Pese a esta inmensa historia, el presente de los de Old Trafford está muy lejos de lo que supieron ser. Desde que Sir Alex Ferguson se retiró, el Manchester United nunca más volvió a competir por una Premier League, mucho menos en la UEFA Champions League. Pasaron David Moyes, Louis van Gaal, José Mourinho, Ole Gunnar Solskjaer y Ralf Rangnick, pero ninguno pudo devolverle la gloria a los ‘Red Devils’.
Hoy, con la llegada de Erik ten Hag, su estilo y su ambición hacen crecer nuevamente la esperanza en las gradas del ‘Teatro de los Sueños’, la ilusión de que volverán esos días de gloria para los fanáticos del United.
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Una temporada decepcionante
El regreso de Cristiano Ronaldo estuvo en boca de todos los aficionados del Manchester United, que veían con mucha esperanza el inicio de la nueva temporada. Como si fuera poco, el por entonces equipo dirigido por Ole Gunnar Solskjaer venció por goleada en la primera jornada, con un 5-1 al Leeds United.
Sin embargo, el primer gran tropiezo llegaría apenas unas semanas después, en el debut por UEFA Champions League. El rival era el Young Boys, un contrincante más que accesible para el nivel que venía demostrando el cuadro inglés, que sorpresivamente cayó 2-1 en su visita a Suiza. Unos días más tarde, sería eliminado de la Carabao Cup por el West Ham, siendo la primera decepción de la campaña.
Comenzó allí el primer bajón de nivel para el United, con varios puntos que quedaron en el camino y rendimientos individuales demasiado flojos. Derrotas consecutivas ante Leicester City y Aston Villa lo prepararon para lo que sería otro gran golpe a la ilusión de sus aficionados. Liverpool llegaba de visita a Old Trafford y vencería ni más ni menos que por 5-0 en el gran derby del fútbol inglés. Una vergüenza de grandes proporciones para un club que aspiraba estar en la pelea por el título.
Mientras tanto, en la UEFA Champions League, aparecía Cristiano Ronaldo para salvar el día, con goles en el último instante frente a Villarreal y Atalanta. Con 11 unidades, el United clasificaría como primero en su grupo y sería emparejado en octavos de final con el Atlético de Madrid, rival que lo eliminaría con un global de 2-1.
Pocos días antes, llegaría otra eliminación, pero en FA Cup, donde el Middlesbrough venció en la tanda de penaltis luego de un 1-1 en tiempo reglamentario. En ese momento, el Manchester se encontraba en el cuarto lugar, accediendo a la siguiente edición de la UEFA Champions League y a 18 puntos del City, por lo que esa clasificación europea era su gran objetivo.
Pero volverían a fallar contra rivales claves, sufriendo goleadas contra Arsenal, Liverpool y Manchester City. Ya la debacle total sería a finales de temporada, con derrotas ante Everton (que luchó hasta la última jornada por no descender), Brighton & Hove Albion y Crystal Palace.
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Un discreto mercado de fichajes
Se rumoreaba que el Manchester United saldría muy fuerte al mercado para armar un equipo competitivo, a la altura de su nuevo entrenador y el estilo de juego que pregona. Sin embargo, llegó el inicio de la ventana de transferencias y los ‘Red Devils’ estaban con mucho menos de lo que tenían la temporada anterior.
Entre las salidas a destacar está, principalmente, la de Paul Pogba, quien tras ser el fichaje récord del club, acabó su contrato y regresó libre a Juventus. Junto al del volante francés, también se vencieron los vínculos de Jesse Lingard, Nemanja Matic, Juan Mata y Edinson Cavani, futbolistas que no eran titulares ni mucho menos, pero que aportaban una profundidad y experiencia siempre necesaria en el banquillo.
Por supuesto, el primero en mostrarse disconforme fue Cristiano Ronaldo, símbolo y líder absoluto de la plantilla. Se habían rumoreado decenas de nombres, pero los días pasaban y ninguno firmaba, hasta que, gracias a la advertencia del portugués, los directivos del United comenzaron a moverse y concretaron los primeros fichajes.
Lisandro Martínez, Christian Eriksen y Tyrell Malacia se convirtieron en los tres primeros refuerzos del Manchester United. El defensor argentino responde a una necesidad urgente de mejorar el aspecto defensivo, y llega con la confianza de ten Hag, quien lo conoce muy bien de cuando coincidieron en el Ajax. Con Martínez, el United se asegura un futbolista con experiencia en el fútbol europeo y, un aspecto esencial, polivalente, ya que puede desempeñarse naturalmente como defensor central, pero también puede cubrir los laterales e incluso moverse unos metros hacia adelante, como mediocampista defensivo, aportando así muchas soluciones al armado del equipo.
Christian Eriksen, un viejo anhelo del Manchester United, podría ser una opción para no sobreexplotar a Bruno Fernandes durante la temporada, un futbolista que ha mostrado un excelso nivel desde su llegada, pero que también necesita descansos para no exponer su físico, especialmente teniendo en cuenta que a fin de año tendrá lugar el Mundial de Qatar.
Por último, o al menos hasta el momento, Tyrell Malacia, otro que llega desde los Países Bajos y con apenas 22 años. El ex Feyenoord reforzará la banda izquierda, un lugar del campo que ha sufrido con los bajos niveles de Luke Shaw y Alex Telles durante el último año.
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Análisis del equipo
Cuando un fanático del fútbol piensa en Erik ten Hag recuerda lo que fue ese Ajax que se quedó a las puertas de disputar una final de UEFA Champions League, pero que arrasó en la Eredivisie. El neerlandés gusta de formar un 4-2-3-1, que va mutando tanto en posiciones defensivas como ofensivas, ya que es bastante normal ver que varios jugadores lleguen al área rival para poder definir jugadas de ataque.
La presión alta es otra de las claves del éxito para ten Hag, por lo que se puede esperar un gran desgaste físico al que varios futbolistas del United no están acostumbrados. Otro aspecto fundamental es el uso de los mediocampistas que puedan jugar de área a área, lo que le abre las puertas a, por ejemplo, Donny van de Beek, quien había sido relegado en los últimos meses, con un préstamo a Everton incluido.
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¿Erik ten Hag es el indicado?
Tras su retiro como futbolista, Erik ten Hag empezó su camino como entrenador en el FC Twente, donde se incorporó como asistente de Steve McClaren, quien recientemente declaró que “pensé que trabajaba duro hasta que conocí a Erik. Su enorme fortaleza no radica solo en su atención a los detalles y la organización, sino en su filosofía del fútbol. Tiene muy en claro el ambiente que quiere crear”.
Concluida su estadía en Twente, el neerlandés pasó por PSV Eindhoven, Go Ahead Eagles, la reserva del Bayern Múnich, Utrecht y el Ajax, donde alcanzó su máximo reconocimiento, ganando tres veces la Eredivisie, en dos ocasiones la KNVB-Pokal y una Supercopa.
Ahora, en el Manchester United, el neerlandés se encuentra ante la gran posibilidad de su carrera, no solo por lo que significa el United en el mundo del fútbol, sino también por lo que puede significar si logra despertarlo y recuperar su gloria.