El campeón de la EFL Cup volvió a jugar otra competición de copa, esta vez tocó la FA Cup, frente a un West Ham que no se parece al de los anteriores años.
Erik Ten Hag realizó seis cambios en el once respecto al de la final de la Carabao Cup frente al Newcastle, entraron Maguire, Lindelof, Malacia, McTominay, Sabitzer y Alejandro Garnacho. Su rival, el West Ham de David Moyes, hizo cuatros cambios respecto a la victoria de 4-0 frente al Nottingham Forest en el London Stadium.
Arranque hammer en Old Trafford
El partido comenzó con un Manchester United un tanto frío por la resaca de la Carabao del domingo, aunque el once fuese totalmente distinto al del partido y eso significó un protagonismo mayor con balón del West Ham al inicio del partido. Declan Rice fue el artifice de ello, interceptando balones en medio campo por las constantes pérdidas de balón y desconcierto del mediocampo del United.
A partir de unos cuantos fallos de los jugadores del Manchester United, comenzaron a darse cuenta de que estaban jugando delante de su gente, en Old Trafford, por lo que ya se empezaron a ver las primeras llegadas de los red devils. En el minuto siete llegó el primer disparo por parte del equipo de Ten Hag, Marcel Sabitzer disparaba con potencia rasa a la portería de Areola, pero el portero francés logró alcanzar el balón y lo despejó a un lado.
Las llegadas de los locales se convirtieron en constantes, pero el West Ham supo reponerse y el mediocampo formado por Declan Rice, Lucas Paquetá y Tomas Soucek se impuso durante la primera parte a Bruno Fernandes, Marcel Sabitzer y Scott McTominay. Especialmente, Paquetá superó líneas y supo girarse frente a sus rivales para poder abrir campo. Gracias a esas transiciones en el 22' llegó la primera llegada de los hammers tras una pérdida de Garnacho, gracias al balón robado por Benrahma que se la pasó en largo a Michail Antonio, pilló descolocados a Lindelof y Maguire y disparó raso a De Gea, pero el español detuvo el primer disparo que recibió. En el mismo córner, Soucek lo remató y asustó a la defensa del United, ya que el remate se fue por muy poco.
El Manchester United no consiguió conectar tan fácil y Alejandro Garnacho tuvo que bajar a recibir muy abajo para poder hacer daño al West Ham, y recibió faltas intentando subir el balón para que le llegara a Weghorst.
Primer dardo del West Ham
Los visitantes entraron fuertes y confiantes en la segunda parte, Benrahma empezó a preparar bien el terreno con un desborde y centrando el balón a Soucek para que De Gea realizara una parada más en el partido. En el minuto 55 llegó el primer gol del partido, una vez más, del argelino y ya mencionado Said Benrahma, recibió un balón raso desde la banda por parte de Emerson Palmieri, y tras controlar el balón dentro del área, sin oposición, la puso en la escuadra del palo largo de David De Gea.
Los próximos minutos fueron los más dañinos del conjunto de David Moyes, cinco minutos más tarde una recuperación por parte de Declan Rice en el área hammer sería el inicio de una jugada muy prometedora que consistió en un pase largo a Michail Antonio en una contra en la que rompía por completo a Lisandro Martínez, pero una vez más De Gea iba a salvar a su equipo de la derrota.
En el minuto 73 Bruno centró un balón tras una falta realizada por el West Ham que remató Casemiro a gol, pero se encontraba en posición de fuera de juego. Tres minutos más tarde, en un córner a favor del Manchester United, Nayef Aguerd remató en propia puerta e hizo el empate en Old Trafford.
A Garnacho le gusta el minuto 90
Con el partido a punto de ir a los penaltis, Bruno Fernandes centraba el balón bastante alejado del área en el 90 y Aguerd falló en el despeje entregándosela a Wout Weghorst que disparó y volvió a rebotar en el defensa marroquí, el balón le cayó a Alejandro Garnacho dentro del área y definió a las mil maravillas a media altura y Areola no pudo hacer nada para detener el 2-1.
A segundos de terminar el partido en el añadido, Rashford centró un balón al área en el que falló de nuevo Aguerd en el control, Weghorst la volvió a luchar, le llegó el balón a Fred, quién entró en el 86', convirtió rasa al centro de la portería el 3-1 definitivo.
Con esta victoria, el equipo de Ten Hag se clasifica a los cuartos de final de la FA Cup en dos semanas en las que ha ganado la final de la EFL Cup y ha eliminado al FC Barcelona de la Europa League. El Manchester United se encuentra en un estado de forma pletórico, no ha perdido ningún partido de los últimos 19 en Old Trafford.
Nada más terminar los partidos, el sorteo celebrado por parte de la FA ha anunciado que su próximo rival de cuartos de final será el Fulham, y casualmente, de nuevo en Old Trafford. Los de Ten Hag ya piensan en el partido importantísimo del domingo en Anfield ante uno de los peores Liverpool de los últimos años.